“Cuando los problemas objetivos
que a nuestros conocimientos se presentan son tales que no se llega a conseguir
descubrir en ellos la verdad segura y positiva (...), hay que contentarse con
mirar al cielo, pensar profundamente en la inmensidad del Universo, en el
enigma de nuestro destino, y pronunciar, allá, dentro de nuestro ser, aquellas
palabras litúrgicas que son bálsamo consolador de nuestra pequeñez e
impotencia: Spera in Deo..."
José Cubillo Fluiters