"El conocimiento es el sanctasantórum, el dios de los dioses y
exige el respeto de las testas coronadas; carente de él, el hombre no es más
que un animal. Los adornos y muebles de la casa de uno pueden ser robados por
los ladrones, pero el conocimiento, el mayor de los tesoros, no es susceptible
de robo."
Puranas,
II
Las personas viles se encuentran siempre inclinadas a detectar las faltas de los demás, aunque puedan ser tan pequeñas como semillas de mostaza, y persistentemente, cierran sus ojos ante los yerros propios, aunque sean tan grandes como los frutos de vilva.
La libertad o la emancipación es la única felicidad concedida al hombre.
La verdadera felicidad radica en la extinción de todas las emociones.
La aprensión se encuentra donde se halla el afecto. Renuncia al afecto y serás feliz.
Una vasta, profunda e infantil fe hacia todos, una clemencia universal y un atento y próximo desvelamiento de tus propias virtudes inherentes parecidas a dioses, son los rasgos que marcan el alma noble."
Puranas, II
"Habrá entonces en la Tierra monarcas de ruin espíritu, genio violento, perversos y mendaces, que harán dar muerte —¡recuérdese el reciente espectáculo de la Gran Guerra!— a las mujeres, a los niños y a todos los animales domésticos. Ellos arrebatarán la propiedad a sus súbditos y a todos; se dirigirán a las esposas de otros… pero su poder se verá limitado; sus vidas serán cortas y sus deseos insaciables… Gentes de varios países, mezclándose con ellos, seguirán su funesto ejemplo, y el pueblo perecerá, pues que los mlechchhas o «bárbaros» serán los señores y los arios o «puros» los avasallados… La riqueza y la verdadera piedad disminuirán de día en día, hasta que el mundo llegue a depravarse por completo, porque entonces, tan sólo la propiedad conferirá el rango; la riqueza resultara ser la única fuente de devoción y mérito; la pasión, el único y transitorio lazo entre los sexos; la falsedad y falta de honradez, el único medio de éxito en las luchas de la vida y por la subsistencia; la debilidad, causa de supeditación en lugar de merecer protecciones… Entonces la amenaza y la presunción sustituirán a la verdadera sabiduría; sólo quien derroche se verá estimado; la riqueza dará reputación de virtud; las vestiduras y demás exterioridades, la única consideración de dignidad… Los elegidos, no pudiendo soportar más corveas y humillaciones, se refugiarán en los valles… y de este modo, en la triste edad del negro Kali-Yuga, la decadencia continuará más y más en el mundo, hasta que la raza humana entera se aproxime a su destrucción… Cuando el fin de la edad Kali esté próximo, descenderá sobre la Tierra una parte de aquel Sér divino que existe de su propia naturaleza espiritual, un Kalki-Avatara dotado de las ocho facultades supremas, y las mentes de los hombres por él despertados serán tan diáfanas como el cristal, constituyendo la semilla de otra raza que seguirá las leyes de la edad Krita o de la Pureza —la perdida Edad de Oro— que así volverá a reinar…"
Vishnú Purana
Krishna en su diálogo con Maitreya
"Habrá entonces en la Tierra monarcas de ruin espíritu, genio violento, perversos y mendaces, que harán dar muerte —¡recuérdese el reciente espectáculo de la Gran Guerra!— a las mujeres, a los niños y a todos los animales domésticos. Ellos arrebatarán la propiedad a sus súbditos y a todos; se dirigirán a las esposas de otros… pero su poder se verá limitado; sus vidas serán cortas y sus deseos insaciables… Gentes de varios países, mezclándose con ellos, seguirán su funesto ejemplo, y el pueblo perecerá, pues que los mlechchhas o «bárbaros» serán los señores y los arios o «puros» los avasallados… La riqueza y la verdadera piedad disminuirán de día en día, hasta que el mundo llegue a depravarse por completo, porque entonces, tan sólo la propiedad conferirá el rango; la riqueza resultara ser la única fuente de devoción y mérito; la pasión, el único y transitorio lazo entre los sexos; la falsedad y falta de honradez, el único medio de éxito en las luchas de la vida y por la subsistencia; la debilidad, causa de supeditación en lugar de merecer protecciones… Entonces la amenaza y la presunción sustituirán a la verdadera sabiduría; sólo quien derroche se verá estimado; la riqueza dará reputación de virtud; las vestiduras y demás exterioridades, la única consideración de dignidad… Los elegidos, no pudiendo soportar más corveas y humillaciones, se refugiarán en los valles… y de este modo, en la triste edad del negro Kali-Yuga, la decadencia continuará más y más en el mundo, hasta que la raza humana entera se aproxime a su destrucción… Cuando el fin de la edad Kali esté próximo, descenderá sobre la Tierra una parte de aquel Sér divino que existe de su propia naturaleza espiritual, un Kalki-Avatara dotado de las ocho facultades supremas, y las mentes de los hombres por él despertados serán tan diáfanas como el cristal, constituyendo la semilla de otra raza que seguirá las leyes de la edad Krita o de la Pureza —la perdida Edad de Oro— que así volverá a reinar…"
Vishnú Purana
Krishna en su diálogo con Maitreya