"25. Buen entendedor. Arte era de artes saber discurrir: ya no basta, menester es adivinar, y más en desengaños. No puede ser entendido el que no fuere buen entendedor. Hay zahoríes del corazón y linces de las intenciones. Las verdades que más nos importan vienen siempre a medio decir; recíbanse del atento a todo entender: en lo favorable, tirante la rienda a la credulidad; en lo odioso, picarla."
"A los veinte años, serás
precipitado e inseguro como un Pavo. A los treinta, venturoso aventurero, como
un León. A los cuarenta, iras lento y cargado de problemas, como un Camello. A
los cincuenta, te desplazas meticuloso y hábil, como Serpiente. A los sesenta,
seguirás a tus hijos o te ayudará otro, como un Perro. A los setenta, no harás
más que imitar lo ya visto, como una Mona. A los ochenta nada, no tienes
comparación."
“A medida que el amor adquiere
confianza, el respeto retrocede.”
"Al varón sabio más le
aprovechan sus enemigos que al necio sus amigos."
"Amar es el más poderoso
hechizo para ser amado."
"Aprende a librarte de los
pesares. Ahorrarse disgustos es propio de gente sensata. La prudencia evita
muchos, y es origen de la felicidad y el contento. Las malas nuevas, trata de
no darlas ni recibirlas: ciérrales la puerta, si no vienen con su remedio. Unos
gastan sus oídos en escuchar lisonjas, otros aman los amargos chismes, y hay
quienes no saben vivir sin un dolor, sin un veneno. Tampoco vayas a darte a ti
mismo un sufrimiento de toda tu vida sólo por complacer a la otra persona,
aunque sea la más querida. Nunca peques contra tu propia felicidad por
complacer a otro. Siempre que te veas en la situación de que para hacer un bien
a alguno, tengas que hacerte un mal a ti mismo, piensa que es mejor que el otro
se disguste ahora, y no tú después y sin remedio."
"Aprobarlo todo suele ser
ignorancia; reprobarlo todo, malicia."
Baltasar Gracián
Atención a no errar una, más que acertar ciento. La censura popular no tendrá en cuenta las veces que se acierte, sino las que se falle. Los malos son más conocidos por murmuraciones que los buenos por aplausos. Todos los aciertos juntos no bastan para desmentir un solo y mínimo error."
Baltasar Gracián
"Aun a la persona que no conocemos, por el porte la juzgamos."
Baltasar Gracián
Tomada del libro El poder. Un estratega lee a Maquiavelo de Pedro Baños, página 113
"Aun para la sabiduría hay
que tomarse su tiempo, para no saberla mal sabida."
Baltasar Gracián
"Aunque muchos son sabios
en latín, suelen ser grandes necios en romance."
“Bien está dos veces encerrada
la lengua y dos veces abiertos los oídos, porque el oír ha de ser el doble que
el hablar.”
"Buen entendedor. Arte era de artes saber discurrir; ya no basta: menester es adivinar, y más en desengaños."
Baltasar Gracián
Oráculo manual
"Cada siete años dicen que
son las etapas en que la naturaleza cambia al ser humano. Unas veces para
mejorarte y otras para reafirmar el carácter y tus gustos. Al cumplir los
primeros siete, adquieres razón y conciencia, y luego, cada cinco años
consigues una nueva virtud. Si conoces bien ese proceso natural, puedes
impulsarlo más y ser cada vez mejor."
“Cada uno muestra lo que es en
los amigos que tiene.”
Baltasar Gracián
"Ciencia sin seso, locura
doble."
"Confiar los amigos de hoy como enemigos de mañana, y los peores."
Tomada del libro El poder. Un estratega lee a Maquiavelo de Pedro Baños, página 51
"Con los enemigos, siempre puerta abierta a la reconciliación."
Baltasar Gracián
Oráculo manual y arte de prudencia
Tomada del libro de Pedro Baños, Así se domina el mundo, página 324
Oráculo manual y arte de prudencia
Tomada del libro de Pedro Baños, Así se domina el mundo, página 324
“Consiste la simpatía en un
parentesco de los corazones, y la antipatía, en un divorcio de las voluntades.”
Baltasar Gracián
“¿Cuál puede ser una vida que
comienza entre los gritos de la madre que la da y los lloros del hijo que la
recibe?”
Baltasar Gracián
“Cualquiera vale para enemigo, no así para amigo;
pocos pueden hacer bien, y casi todos mal.”
“De los amigos ofendidos salen
los peores enemigos: añaden a su defecto todos los ajenos.”
"Denomínase, la erudición, según algunos, de la oposición contra la rudeza e ignorancia; consiste en una universal noticia de dichos y de hechos, para ilustrar con ellos la materia de que se discurre, la doctrina que se declara. Tiene la memoria una como despensa, llena de este erudito pasto, para sustentar el ánimo, y de que enriquecer y fecundar los convites que suele hacer a los entendimientos. Es un magacén rebutido, un vestuario curioso, un guardajoyas de la sabiduría. Sin la erudición no tienen gusto ni sustancia los discursos, ni las conversaciones, ni los libros. Con ella ilustra y adorna el varón sabio lo que enseña, porque sirve así para el gusto como para el provecho. Gustan los atentos oyentes en gran manera de oír una cosa curiosa, que no sabían, un buen dicho, un famoso hecho, o si ya lo sabían, gozan de la agudeza con que se aplica al sujeto presente. Sin este sainete son secos y desabridos los discursos; por ingeniosos y picantes que sean, luego enfadan y los pierde la atención del que oye, o los arrima la del que lee.
Cuanto más sublime y realzada fuere la erudición, será más estimada, pero no ha de ser uniforme, ni homogénea, ni toda sacra, ni toda profana, ya la antigua, ya la moderna, una vez un dicho, otra un hecho de la historia, de la poesía, que la hermosa variedad es punto de providencia. Especialmente se ha de atender a la ocasión y a sus circunstancias, de la materia, del lugar, de los oyentes, que la mayor prenda del que habla o escribe, del orador o historiador, es el decir con seso.
El grave y erudito Séneca de todo se vale, como se nota en sus sustanciales obras, ya de la sentencia de un filósofo, ya de la de un poeta, ni se dedigna de ilustrar con el verso su enseñanza. Hasta el verdadero maestro, el apostólico sabio, el predicador de las gentes, San Pablo, se valió en su ocasión de la erudición gentílica y poética: Sicul et quídam vestrorum Poe tarum dixerunl. Ipsius enim, et genus sumus; el ser a propósito es gran ventaja de la autoridad.
La erudición de cosas modernas suele ser más picante que la antigua y más bien oída, aunque no tan autorizada. Los dichos y hechos antiguos están muy rozados; los modernos, si sublimes, lisonjean con su novedad; dóblase la ilustración con la curiosidad y con la ingeniosa acomodación. Requiérese grande elección, que es don de los primeros, por su singularidad y por su importancia, para escoger cosas buenas y a propósito. Si estas dos cosas se juntan, hacen un trabajo muy plausible, y que se logra con felicidad. Acontece no ser el cuerpo todo de la obra tan perfecto como otros, pero la eminencia de la erudición le hace agradable en gran manera y que sea más versado. Vese en los gustosos Diálogos de Escalante, que tratan del arte militar, ricos de escogida y sazonada noticia. La historia con suspensión de los sucesos entretiene. Las comedias, épicas y otras ficciones, con sus enredados empeños, deleitan. Los discursos, si no se favorecen de la erudición, son secos, estériles y empalagan.
Cuando concurren lo realzado del asunto, la agudeza de la invención y la variedad de la escogida erudición, hacen un todo muy perfecto y acepto. Así El Embajador, de don Antonio de Vera y Zúñiga, entre muchas muy lucidas de sus obras, fue excelente, digno de su gran ingenio en hacerle y de los demás en lograrle. Hállanse muchos libros que son como almacenes de la erudición, o, por mejor decir, fárragos donde están hacinados los dichos, apotegmas y sentencias, éstos enfadan luego; mejores son los que la ministran sazonada, dispuesta y ya aplicada.
Las fuentes de la noticiosa erudición donde han de acudir el gusto y el ingenio para ilustrar sus asuntos son muchas y diferentes; la primera es la historia, así sagrada, como humana, de gran autoridad a la doctrina por lo práctico y por lo curioso; las sentencias y dichos de sabios, sacados de la filosofía moral y de la poesía, ilustran con magisterio; los apotegmas, agudezas, chistes, donosidades en su ocasión, son plausibles. Los dichos heroicos de príncipes, capitanes, insignes varones, son muy graves y autorizan magestuosamente. Los emblemas, jeroglíficos, apólogos y empresas son la pedrería preciosa al oro del fino discurrir. Pues los símiles declaran mucho y con aplauso; las alegorías y parábolas, o propias o ajenas, adornan sublimemente y ayudan al persuadir con infalibilidad; hasta los adagios y refranes valen mucho: han de ser comúnmente escogidos por huir la vulgaridad. Finalmente, las paradojas, problemas, enigmas, cuentos, tienen su vez también, y su triunfo, que de todo se socorre la prudente y sabia erudición, disfrutando siempre la nala, y como discreta abeja, recogiendo la flor de la agudeza de la prudencia y de la sabiduría...
Ni sólo sirve la erudición para el confirmar y probar, sino para el comenzar con sublimidad y aceptación."
Agudeza y arte de ingenio, discurso LVIII
"Día sin pleito, noche de
buen sueño. Vivir mucho y vivir con gusto es vivir doble, y es fruto de la paz.
Todo lo consigue quien no se mete en nada de lo que no le importa. No hay mayor
despropósito que tomarlo todo a propósito. Y la peor necedad es que hieras los
sentimientos de quien no lo merece, y que no pongas en su sitio a quien te
falta."
"Días hay en que incluso tu
inteligencia parece haber huido."
Baltasar Gracián
“Discurren
mucho algunos en lo que nada les importa, y nada en lo que mucho les
convendría.”
"Donde acaba el deseo
comienza el temor."
"El cuerdo de todo sale
airoso por el atajo de la galantería."
"El discreto hablar es
mejor que la elocuencia."
"El espíritu profundo posee
secretos hondos."
“El hombre sensato obtiene más
de sus enemigos que el necio de sus amigos.”
"El más poderoso hechizo
para ser amado es amar."
Baltasar Gracián
"El mentiroso tiene dos
males: que ni cree ni es creído".
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 12
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 16
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
Baltasar Gracián
"La superioridad es siempre detestada."
"Las cosas no pasan por lo que son, sino por lo que parecen."
Oráculo manual y arte de prudencia
"Las necedades del rico son aplaudidas, cuando las sentencias del
pobre no son escuchadas."
"Las palabras son femeninas; los hechos masculinos."
“Las serpientes son las maestras de toda sagacidad: ellas nos muestran
el camino de la prudencia.”
"Las verdades útiles son muy estimadas, noticiosas, provechosas, como son algunos refranes selectos. Tuvo extremado gusto en recogerlos el erudito y mucho más que gramático, el juicioso Aragonés (Juan Lorenzo Palminero), que pudo hacer célebre la amena y fértil Alcañiz, su patria; tuvo sabroso genio, como se goza en sus libros tan gustosos, El estudioso cortesano, y otros dignos de la librería del varón discreto."
Agudeza y arte de ingenio
"Lo bien dicho se dice presto."
“Lo bueno si breve, dos veces bueno; lo malo, si poco, no tan malo.”
“Lo que más suscita la ambición es el estrépito de la fama ajena.”
“Lo único que realmente nos pertenece es el tiempo. Incluso aquél que
no tiene otra cosa, cuenta con él.”
"Los astros conservan su esplendor porque no se rozan con los
otros."
"Los ignorantes son los muchos, los necios son los infinitos; y
así el que los tuviere a ellos de su parte, ése será señor de un mundo
entero."
Baltasar Gracián
"Los más de los hombres ven y oyen con ojos y oídos prestados, viven de información de ajeno gusto y juicio."
Baltasar Gracián
"Los más de los hombres ven y oyen con ojos y oídos prestados, viven de información de ajeno gusto y juicio."
Baltasar Gracián
El Criticón
Baltasar
Gracián
Baltasar
Gracián
Oráculo manual y arte de prudencia
"Más consigue un talento mediano con dedicada aplicación, que un
genio sin ella."
"Más daña el decaimiento del ánimo espiritual que el del
cuerpo."
“Más quiero mis dientes que mis parientes.”
"Más vale un grano de cordura que arrobas de sutileza."
“Menos mal te hará un hombre que te persiga que una mujer que te
siga.”
"Muchas veces nace la enfermedad del
mismo remedio."
Máximas
"Nunca contiendas con
quien no tiene nada que perder."
Baltasar Gracián
"Nunca defenderse con la pluma, que deja rastro."
Baltasar Gracián
"Nunca pierdas la calma. Uno de los dones de la cordura es nunca
descomponerte ni perder la calma. Muchos arguyen que lo hacen llevados porque
tienen un corazón que siente, pues la persona mala no suele conmoverse. Pero no
es así. La furia desenfrenada viene de los excesos de la pasión, que hacen
hervir los humores del ánimo. Y salen palabras dañinas por tu boca, y peligra
tu reputación. Enseñoréate, pues, sobre ti, con tanta grandeza que ni en lo más
dulce ni en lo más amargo pueda alguno acusarte de perturbado, y sí admirarte
todos por tu paciencia y superioridad interior."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 25
"Obró mucho el que nada dejó para mañana."
Baltasar Gracián
“Ocuparse del problema del otro para poder abandonar el propio.”
Baltasar Gracián
"-¡Oh vida, no habías de comenzar, pero ya que comenzaste no habías de acabar! No hay cosa más deseada ni más frágil que tú eres, y el que una vez te pierde, tarde te recupera: desde hoy te estimaría como a perdida. Madrastra se mostró la naturaleza con el hombre, pues lo que le quitó de conocimiento al nacer le restituye al morir: allí porque no se perciban los bienes que se reciben, y aquí porque se sientan los males que se conjuran. ¡Oh tirano mil veces de todo el ser humano aquel primero que con escandalosa temeridad fió su vida en un frágil leño al inconstante elemento! Vestido dicen que tuvo el pecho de aceros, mas yo digo que revestido de yerros. En vano la superior atención separó las naciones con los montes y los mares si la audacia de los hombres halló puentes para trasegar su malicia. Todo cuanto inventó la industria humana ha sido perniciosamente fatal y en daño de sí misma: la pólvora es un horrible estrago de las vidas, instrumento de su mayor ruina, y una nave no es otro que un ataúd anticipado. Parecíale a la muerte teatro angosto de sus tragedias la tierra y buscó modo cómo triunfar en los mares, para que en todos elementos se muriese. ¿Qué otra grada le queda a un desdichado para perecer, después que pisa la tabla de un bajel, cadahalso merecido de su atrevimiento? Con razón censuraba el Catón aun de sí mismo entre las tres necedades de su vida el haberse embarcado por la mayor. ¡Oh suerte oh cielo oh fortuna!, aun creería que soy algo, pues así me persigues; y cuando comienzas no paras hasta que apuras: válgame en esta ocasión el valer nada para repetir de eterno."
Baltasar Gracián
El Criticón
“Para prevenidos no hay acasos.”
Baltasar Gracián
"Para saber callar hay que tener gran dominio sobre sí, saber
vencer las pasiones y deseos, y este es el verdadero triunfo."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 68
"Para tratar con la gente necesitas de tres cosas: ser crítico
excepcional, observador profundo, y de juiciosa cordura."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 113
"Para un caballero animoso nunca hay arma corta, porque con
hacerse él un paso adelante se alarga aquella y lo que falta lo suple con el
corazón y con valor."
Baltasar Gracián
“Pensar bien es fruto de la racionalidad. A los veinte años reina la
voluntad, a los treinta el ingenio, a los cuarenta el juicio.”
“Pise firme siempre en el medio y no vaya por extremos, que son
peligrosos todos.”
"Pon un grano de audacia en todo lo que hagas."
Baltasar Gracián
“Por grande que sea el puesto, ha de mostrar
que es mayor la persona.”
Baltasar Gracián
"Por no hacerse clara idea de las cosas ni pensarlas, se pierden
todos los necios."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 19
"Que tu entendimiento no se confunda con las falsas maravillas
del vulgo, que no pasan de simples apariencias. Si te dejas seducir por la
necedad de la gente corriente, tendrás grandes y tristes desengaños."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 16
"Que una persona sea desfasada o no, depende de si su forma de
ser responde al tiempo en que vive. No todos tuvieron el tiempo que merecían, y
otros, lo tuvieron, pero no acertaron a aprovecharlo. Algunos tuvieron virtudes
que los hicieron dignos de mejor siglo, pero lo bueno no siempre triunfa. Los
hombres y las cosas tienen determinado su instante feliz, y hasta a los más
excelentes les está determinada su hora de uso. Pero el hombre que posee
sabiduría, que es eterna, lleva una ventaja: sabe que si este no es su momento,
muchos otros lo serán."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 14
"Quien ignora sus razones y se lleva de sus pasiones, con el
tiempo recibirá un amargo desengaño."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 18
"Quien no tiene enemigos, tampoco suele tener amigos."
"Quien se muestra bueno, todo lo cura: dora el “no”, endulza de
buen modo la verdad y embellece hasta a la misma vejez."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 12
“Saber olvidar, más es dicha que arte.”
Baltasar Gracián
"Saber uno vender sus cosas vale mucho, que ya no se estiman por lo que son, sino por lo que parecen."
Baltasar Gracián
El criticón
"Saber y saberlo demostrar, es saber dos veces."
"Señal de tener gastada la fama propia es cuidar de la infamia
ajena."
"Sé juicioso y observador. Así dominarás las situaciones, en vez
de que ellas te dominen a ti. Penetra con tu pensamiento hasta lo más profundo,
aprende a analizar y juzgar todo. Cuando veas a una persona, estudia y valora
su esencia profunda. Con esas observaciones, descifrarás la más escondida
interioridad. Nota lo duro, percibe lo sutil, infiere con juicio: descubre,
advierte, alcanza, profundiza."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 24
"Sé primero señor de ti, y podrás luego serlo de los demás."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 26
“Se respeta a un hombre mientras no se haya encontrado límite a su capacidad.”
Baltasar Gracián
“Se respeta a un hombre mientras no se haya encontrado límite a su capacidad.”
Baltasar Gracián
"Señal de tener
gastada la fama propia es cuidar de la infamia ajena."
Baltasar Gracián
“Ser eminente en profesión humilde es ser grande en lo poco, es ser
algo en nada.”
"Siempre valdrá más lo interior que lo exterior. Sujetos hay que
son sólo fachada, como casas a medio acabar, porque les faltó fuerza interna:
tienen entrada de palacio y habitación de choza. No hay en ellos ni una idea
importante. Con la primera salutación termina la conversación, pues se agotan
las palabras donde no hay ni un trascendental concepto. Engañan fácilmente a
otros superficiales como ellos, pero el hombre cuidadoso, que sabe mirar por
dentro, descubre su tonta fábula y su ausencia de sabiduría."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 24
"Sin mentir, no decir todas las verdades."
Baltasar Gracián
Tomada del libro El poder. Un estratega lee a Maquiavelo de Pedro Baños, página 114
"Solo vive el que sabe."
"Son los ímpetus de las pasiones deslizadores de la cordura, y
allí es el riesgo de perderse."
“Son tontos los que lo parecen y la mitad de los que no lo parecen.”
Baltasar Gracián
"Son verdades célebres las sentencias
cuando son universales."
"Tened paciencia y tendréis ciencia."
Baltasar Gracián
El Criticón
"Tiene la mentada fortuna muchos quejosos y ningún
agradecido."
"Toda discapacidad del alma es más deforme que la del cuerpo,
porque desdice de la belleza moral. ¿Y quién podrá corregir tan incorregible y
vulgar desperfecto? Donde falta sensatez, no queda lugar para la
corrección."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 65
"Todas las victorias engendran odio."
Baltasar Gracián
"Todo lo que llama la atención molesta a los que no pueden
mostrar lo mismo o sólo mostrar menos. Mucho más mal cae, si tu excentricidad
va contra la regla o la costumbre del lugar donde estás. Hay algunos que son
tan extremistas que hasta por sus vicios quieren darse a notar, buscando
novedad en la ruindad, para conseguir apenas una infame fama. Hasta en la
sabiduría, lo sobrado degenera en palabrería."
Baltasar
Gracián
El arte de
la prudencia, pág. 109
"Todo lo que realmente nos pertenece es tiempo; incluso el que no
tiene nada más, lo posee."
“Todos los necios son obstinados y todos los obstinados son necios.”
Baltasar Gracián
“Todos los vicios dan treguas: el glotón se agita, el deshonesto se
enfada; el bebedor duerme, el cruel se cansa; pero la vanidad del mundo nunca
dice basta, siempre locura y más locura.”
Baltasar Gracián
“Triste cosa es no tener amigos, pero más triste debe ser no tener
enemigos, porque quien enemigos no tenga, señal de que no tiene: ni talento que
haga sombra, ni valor que le teman, ni honra que le murmuren, ni bienes que le codicien,
ni cosa buena que le envidien.”
"Un buen exterior es la mejor recomendación de un hermoso
interior".
Baltasar
Gracián
"Un hombre es juzgado según sus amigos, pues el sabio y el necio
nunca han coincidido."
Baltasar
Gracián
"Un poco de buen humor, todo lo mejora."
Baltasar
Gracián
“Una habilidad mediana, con esfuerzo, llega más lejos en cualquier
arte que un talento sin él.”
Baltasar
Gracián
"Una misma vejez para unos es premio y para otros apremio, a unos
autoriza, a otros atormenta."
Baltasar
Gracián
"Vale más quintaesencias que fárragos."
“Varón prevenido de cordura no será combatido de impertinencia.”
“Visto un león, están vistos todos, y vista una oveja, todas; pero
visto un hombre, no está visto sino uno, y aún no bien conocido.”