"El hombre es su propio astro, y
el alma
capaz de fructificar en un
hombre honesto y perfecto,
domina toda luz, toda
influencia, todo destino.
Nada le acontece con excesiva
demora ni antelación.
Nuestros actos son nuestros
ángeles, en toda circunstancia,
sombras ineludibles que nos
acompañan en silencio."
Beaumont y Fletcher
Epilogo de La Fortuna Del Hombre Honesto