Se cuenta que Tales de Mileto, un famoso filósofo
griego del siglo VI antes de J.C., cayó dentro de un pozo mientras andaba
observando las estrellas y que, después de ser rescatado por una esclava, ésta
le reprendió por prestar excesiva atención al cielo y, en cambio, no fijarse en
el suelo que se hallaba debajo de sus pies. Esta parece haber sido una lección
importante para Tales de Mileto puesto que, a partir de aquel momento, comenzó
a desarrollar su teoría de que todas las cosas proceden del agua. No obstante,
la moraleja de este relato resulta también extraordinariamente apropiada para
nuestra época, ya que nos recuerda que, mientras escudriñamos el cielo, debemos
mantener los pies firmemente asentados sobre la tierra.
Robert Frager
pág. 295-296 ¿Quién soy yo?