“(...) la filosofía es una ciencia de los fundamentos. Donde las otras
ciencias se paran, donde ellas no preguntan y dan mil cosas por supuestas, allí
empieza a preguntar el filósofo. Las ciencias conocen; él pregunta qué es
conocer. Los otros sientan leyes; él se pregunta qué es la ley. El hombre
ordinario habla de sentido y finalidad. El filósofo estudia qué hay que
entender por sentido y finalidad.”
J. M.
Bochenski
Introducción
al pensamiento filosófico, p. 29