“A medida que el exceso
inflacionista de dinero hace subir precios, costes y tipos de cambio, el cada
vez más amplio y elaborado aparato de la economía coercitiva intenta
contrarrestar esta subida mediante medidas policíacas. La inflación reprimida
se convierte así en un sistema de precios coactivos ficticios, que suele estar
inseparablemente unido al usual sistema económico del colectivismo, y que se ha
establecido en todos aquellos países donde el socialismo ha subido al poder o
ejerce influencia.”
Wilhelm Röpke
“¿Acaso no es
progreso, por el contrario, si las grandes masas del pueblo cumplen la mayoría
de edad en términos económicos, gracias a sus ingresos crecientes, y se hacen
responsables de ellas mismas, de manera que podamos disminuir el Estado Benefactor
en lugar de inflarlo más y más?”
Wilhelm Röpke
“Contra la inflación
la única actitud correcta es el rechazo resuelto y airado; la menor desviación
de esta conducta está mal.”
Wilhelm Röpke
“Cuando uno trata de
leer una revista económica de nuestros días, uno se pregunta si no estará en
realidad leyendo una revista académica sobre química o hidráulica. Es tiempo de
que hagamos un análisis crítico sobre estos temas. La economía no es una
ciencia natural; es una ciencia moral y como tal se vincula al hombre como un
ser espiritual y moral.”
Wilhelm Röpke
“El camino de la
inflación reprimida termina en el caos y la paralización. Cuanto más empuja la
inflación los precios hacia arriba, tanto más refuerza el Estado la presión de
su aparato represivo. Pero cuanto más ficticio se hace el sistema de los
precios controlados, tanto mayor es el caos económico y el descontento general
y tanto más se debilita la autoridad de Gobierno o su pretensión de seguir
ostentando un carácter democrático.”
Wilhelm Röpke
“El requisito más
importante de un sistema monetario ordenado es, pues, la limitación de la
cantidad de dinero frente a las tendencias inflacionistas, que estén siempre al
acecho.”
Wilhelm Röpke
“El viejo y sano
principio, conservador y filantrópico, de que aun los más pobres deben tener
algo con qué contar, se ha trocado por otro muy distinto: la socialización
creciente del uso del ingreso, apoyada en la teoría niveladora del Estado, de
que toda ampliación de los servicios sociales para las masas es un hito de
progreso.”
Wilhelm Röpke
“En ausencia de una
cantidad suficiente de personas auténticamente necesitadas, es preciso
inventarlas, de modo que la nivelación de la riqueza hacia abajo, hasta un
promedio normal que satisface las injusticias sociales, se pueda justificar con
frases moralizantes. El lenguaje del antiguo gobierno paternal sigue en uso, lo
mismo que sus categorías, pero todo ello se está convirtiendo en una pantalla
que oculta la nueva cruzada en contra de todo lo que ose exceder el promedio,
ya sea en ingresos, riqueza o desempeño.”
Wilhelm Röpke
“En la relación entre
cantidad de dinero y cantidad de bienes que por él se cambia está el principal
motivo determinante del valor o poder adquisitivo del dinero (teoría
cuantitativa o de la escasez del dinero). Si se producen esas graves
enfermedades del dinero que calificamos en inflación y deflación, que se
caracterizan por agudos y repentinos cambios en el poder adquisitivo del
dinero, tendremos que buscar sus causas en un gran aumento o en una gran
disminución de la cantidad de dinero, a la cual tendremos que agregar siempre
el dinero bancario (contracción o expansión del crédito).”
Wilhelm Röpke
“(...) Entre estos
lentos cánceres de nuestra economía y sociedad occidentales se destacan dos: el
avance al parecer incontenible del Estado de beneficencia o Benefactor y la
erosión del valor del dinero, lo que se denomina inflación reptante. Existe
entre ambos un estrecho vínculo nacido de sus causas comunes y de su refuerzo
recíproco. Los dos se inician lentamente, pero al poco tiempo el ritmo se
acelera hasta que cuesta detener el deterioro, lo cual multiplica el peligro.”
Wilhelm Röpke
“Estas son las
cuestiones que surgen en primer término. Pero son también aquellas a las que
busca respuesta un solo hombre -el autor- (...) y cuya respuesta no puede ser
sino subjetiva, aunque esté fundamentada en argumentaciones irrefutables y
experiencias generales. Así, pues, no se trata sólo de un culto a la
sinceridad, sino también a la oportunidad, comenzar por uno mismo, intentando
determinar con la mayor exactitud su propia postura político-social y
económica.”
Wilhelm Röpke
“Hoy ya no dudamos que
la cantidad de dinero en circulación influye decisivamente en el poder
adquisitivo del dinero, de tal manera que un aumento del dinero reduce su poder
adquisitivo (inflación) y una disminución lo eleva (deflación). A la larga, el
peligro de un aumento inflacionista de la cantidad de dinero es mucho mayor que
el de una disminución deflacionista, ya que la tentación es mucho mayor y los
efectos inmediatos suelen ser mucho más populares.”
Wilhelm Röpke
“La ayuda a las masas
organizada por el Estado es sencillamente la muleta de una sociedad lisiada por
el proletarismo, un recurso adaptado a la inmadurez económica y moral de las
clases que surgieron de la descomposición del antiguo orden social.”
Wilhelm Röpke
“La distorsión de
todas las relaciones de precios, la coexistencia de mercados
"oficiales" y "negros" y el antagonismo entre quienes
operan en el mercado y el Estado, que lucha desesperadamente por conservar su
autoridad, conducen al final a una situación caótica, en la que falta
prácticamente toda clase de orden, ya sea el propio de la economía social de
mercado, ya sea el de tipo colectivista.”
Wilhelm Röpke
“La inflación alemana
de los años 1920-1923 quedará siempre en la memoria del mundo para ejemplo de
cómo un continuado aumento del dinero le permite al Gobierno tapar
momentáneamente el hueco abierto en las finanzas públicas. Pero también de cómo
tan despreocupada y alevosa cobertura de los gastos públicos tiene como
consecuencia un aumento de precios sin precedentes, un exasperante
empobrecimiento de la mayoría con el desvergonzado enriquecimiento de la
minoría más opulenta y, por último, de la peligrosa desintegración de la
economía y de la sociedad.”
Wilhelm Röpke
“La política social
nunca debería sustituir al mercado libre.”
Wilhelm Röpke
“Lo curioso es que
este hinchado Estado Benefactor nuestro es en realidad un anacronismo. La
asistencia pública organizada en beneficio de los económicamente débiles tuvo
origen e importancia en un período determinado de la historia económica y
social, el período entre la sociedad preindustrial y la sociedad industrial
avanzada de hoy, cuando el antiguo patrón social se deshizo y el individuo,
privado de su apoyo, se convirtió en desvalido proletario. (...) La paradoja
está en que hoy en día el moderno Estado Benefactor lleva al exceso el sistema
de ayuda masiva organizada por el Estado precisamente en un momento en que los
países económicamente avanzados han salido en gran medida de aquel período de
transición y en que, por tanto, las potencialidades de autoayuda voluntaria,
por parte del individuo o del grupo, están muy acentuadas.”
Wilhelm Röpke
“Los demagogos
sociales emplean las promesas del Estado Benefactor y de la política
inflacionaria para seducir a las masas y cuesta advertir a la gente de modo
convincente acerca del precio que todos habrán de pagar al final.”
Wilhelm Röpke
“(...) Otra
característica común del Estado Benefactor y de la inflación crónica es que
ambos fenómenos demuestran, en forma clara y aterradora, de qué manera ciertas
fuerzas políticas socavan los cimientos de una economía y una sociedad libres y
productivas. Ambos son el resultado de opiniones masivas, reclamaciones
masivas, emociones masivas y pasiones masivas, y a ambos los dirigen esas
fuerzas en contra de la propiedad, la ley, la diferenciación social, la
tradición, la continuidad y el interés común.”
Wilhelm Röpke
“(...) Pero cuanto más
aumenta la inflación, tanto más se acentúa la presión, que se trata de
compensar mediante la economía coercitiva. Y tanto más amplia y desconsiderada
ha de ser también la economía coercitiva para poder detener la creciente
presión de la inflación, siendo lícito que nos preguntemos si es posible
semejante economía coercitiva sin la esclavitud del totalitarismo de que el
Tercer Reich dio tan pavoroso ejemplo.”
Wilhelm Röpke
“Pocos pueden cerrar
todavía los ojos ante el contraste entre los éxitos extraordinarios de un orden
social y económico que se apoya en las fuerzas reguladoras y estimulantes del
mercado y de la libre empresa, por un lado, y, por el otro, los resultados de
una redistribución constante del ingreso y la riqueza en aras de la igualdad.
Es un contraste que a la larga se hace intolerable. Una u otro tendrá que
ceder: la sociedad libre o el moderno Estado Benefactor.”
Wilhelm Röpke
“Si el Estado moderno
se encarga cada vez más de repartir beneficencia y previsión a todos lados, a
beneficio primero de unos, luego de otros, tiene que degenerar en una
institución que estimula la desintegración moral y prepara su propia condena
final.”
Wilhelm Röpke
“(...) Si hemos de
tomar en serio el respeto por la persona humana, debemos medir el progreso por
el grado en que se puede pretender que las grandes masas del pueblo se
mantengan con sus propios recursos y bajo su propia responsabilidad, mediante
el ahorro y el seguro, y las múltiples formas de ayuda voluntaria de grupo.”
Wilhelm Röpke
“Si un país
subdesarrollado no obtiene acceso a la fuente de los mercados extranjeros de
capital debido a sus propias políticas nacionalistas y socialistas, entonces
debe buscar un suministro de capital político. El dinero que no fluye
libremente hay que bombearlo con conferencias diplomáticas, propaganda y
amenazas abiertas o disfrazadas, aun bajo pena de que el flujo pueda evaporarse
o desaparecer en el calor de las mismas pasiones que ya secaron la fuente
original.”
Wilhelm Röpke
“Tan de temer es que
la exageración de los derechos de la sociedad degenere en colectivismo como que
las demasías de los derechos individuales desemboquen en el límite extremo del
anarquismo. La propiedad privada degenera en plutocracia, la autoridad en
esclavitud y opresión, la democracia en capricho y demagogia. Cualesquiera que
sean las orientaciones o corrientes políticas que quieran ponerse como ejemplo,
todas ellas se cavan su propia tumba si se consideran a sí mismas como valores absolutos
y no respetan sus propios límites.”
Wilhelm Röpke
“Un error radical, del
que deberá liberarse radicalmente el programa de desarrollo, consiste en la
idea de que lo único necesario para lograr que broten las fuerzas económicas
latentes en aquellos países es el abono artificial del "capital" y
los conocimientos técnicos - organizatorios (del Know how) de Occidente.”
Wilhelm Röpke