URANO
URANO EN LA PRIMERA
En las raíces de su
naturaleza el individuo con Acuario en la cúspide de cualquier casa o incluido
en ella posee un tremendo deseo de libertad. Pero Saturno, regente restrictivo
de Acuario, monta guardia en el portal de la libertad hasta que el individuo
aprenda que, sólo mediante disciplina personal y servicio, podrá tener la
libertad que él tanto desea.
F. S.
La persona uraniana es a
menudo alguien que se rebela contra la autoridad y las demandas del poder
establecido. Se imagina a sí mismo como un "salvador" de la humanidad
o de la causa que defiende y se identifica con el desvalido. Si solamente
representa el rol y nunca rescata a nadie en realidad, actúa "como si”
fuese un salvador en vez de serlo de verdad. Si es un legitimo
"salvador", hará a los otros Independientes, aun a riesgo de atraer
sobre sí la ira de la autoridad. (En algunos casos esto también es aplicable a
personas con una fuerte tendencia Neptuniana).
F. S.
Lo
mejor que pueden hacer quienes tienen a Urano en la casa Uno es tener el coraje
de determinar por sí mismos su propia verdad. Sumamente originales e
inventivos, estas personas ofrecen nuevas visiones o ideas provenientes de sus
diversos campos de interés. Como es obvio, quienes tienen a Urano en este
emplazamiento se desempeñan mejor en roles de liderazgo, ya que simplemente no
pueden avenirse bien a ser seguidores. Se les ha de conceder una gran libertad
individual para que puedan encontrarse a sí mismos. Para ellos siempre hay algo
mejor o diferente que podría ser, y por consiguiente tienen grandes
dificultades para incluirse en ningún sentimiento definitivo de quiénes son.
Para otros, esta condición del nativo tanto puede ser emocionante como
dolorosamente irritante.
Básicamente,
lo que quieren estas personas es que simplemente las dejen solas para seguir
adelante con lo que quieren hacer, sin que nadie las moleste. De todas maneras,
de nada sirve el intento de detenerlos. Mal dispuestos a adherirse a
modalidades o pautas de comportamiento convencionales, ”cortan por lo sano”, y
con la rapidez y limpieza de un láser, con cualquier cosa que sea para ellos
falsa o sofocante. Esta actitud en ocasiones parece escandalosa a terceros.
Si Urano esta próximo al ASC, es
probable que haya algo excepcional en el nacimiento o en los primeros años. Con
Urano en la casa Uno la vida tendrá algo fuera de lo común.
Si
Urano está mal aspectado, es posible que estos nativos sean sumamente
obstinados e irrazonablemente discrepantes, y que solacen en ser diferentes por
el mero placer de serlo. La originalidad se convierte en excentricidad.
Normalmente,
aquellas personas con Urano situado en el Ascendente no suelen ser en absoluto
conformistas. El sujeto puede llegar a mostrarse sumamente individualista y
poco amigo de los compromisos en su búsqueda de espacio y de libertad. Un
espacio y una libertad que le permitan llevar a cabo el estilo de vida, radical
o anti convencional (al menos, desde el punto de vista de los demás), se ajuste
a sus deseos (que pueden ser a veces terriblemente egoístas). Algunas personas
con Urano en el Ascendente nacieron de forma repentina y casi inesperada por lo
que su primera experiencia en el mundo fue la de haber provocado algún tipo de
conmoción.
Sue Tompkins, pág. 445
Aspectos
en Astrología
Una
de las cosas que Urano en Casa I parece sugerir en el plano externo es una vida
muy cambiante, en cuanto al estilo, al entorno, a dónde o con quién uno vive.
En el momento en que uno trata de sujetar todo en su lugar y crear un ambiente
agradable y seguro, las cosas tienden a entrar en erupción, porque hay una
necesidad interior de vivir con un cierto nivel de inestabilidad.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 63
URANO EN LA SEGUNDA
Los que tengan a Urano en la Segunda casa
tendrán que encarar todo lo que tenga que ver con dinero, posesiones y recursos
de una manera diferente de la ordinaria. Deseosos de no verse limitados por la
necesidad de seguridad y posesiones materiales, algunos nativos eludirán todo
apego a aquellas mismas cosas que busca la mayoría de las personas.
En ocasiones puede haber maneras poco
comunes de ganar dinero o los ingresos pueden provenir de campos de desarrollo
todavía nuevos, de tecnologías modernas o de alguna empresa sumamente
individualista. Urano en esta casa va asociado además con súbitos altibajos
materiales y financieros. Son nativos que, actuando intuitivamente y por
corazonadas, pueden correr riesgos de dinero. Y estos riesgos, según cómo esté
aspectado Urano, pueden resultarles estupendamente "rendidores", o
bien dejar a la persona sin un céntimo. En realidad los aspectos difíciles de
Urano en esta casa podrían representar la clásica quiebra o el
"crack" financiero para una persona muy pudiente.
Los que tienen a Urano en este
emplazamiento experimentan con frecuencia alguna especie de cambio, alteración
o destructuración en el terreno de la seguridad personal que les obliga a una
reevaluación de toda esta esfera de la vida. Es probable que, para mantenerse,
en algún momento de su vida tengan que cultivar habilidades diferentes de las
que previamente habían ejercido.
Muy frecuentemente es la intensidad de
sus propias tendencias inconscientes lo que les obliga a romper con sus
vínculos pasados Si no tienen conciencia de su profunda necesidad de libertad,
es posible que estos nativos escojan situaciones que aparentemente les ofrecen
seguridad, pero en última instancia resulten ser inestables.
Los
recursos innatos que es menester desarrollar son la originalidad, la inventiva,
la actitud de apertura a nuevas corrientes y a las tendencias progresistas, y
una visión intuitiva -que suele ser de cristalina claridad- de diferentes
situaciones.
Cuando Urano está en Casa II, la manera
"normal" de manejar los temas referidos a la seguridad tiende a salir
mal, y los esfuerzos por crear estabilidad según la sabiduría convencional,
generalmente no funcionan. A veces, la persona con Urano en Casa II (...) opta
de manera voluntaria por abrazar la inestabilidad. Pero para esto se necesita
mucho coraje y pre-visión, y más a menudo -al menos en la primera parte de
nuestra vida- uno camina pesadamente tratando de hacer lo correcto, para luego
descubrir que no es tan simple. Urano en Casa II nos pide que sobrevivamos en
el mundo material mediante el recurso de la visión y nos enseña a trabajar con
la energía de la realidad material sin quedarnos demasiado aferrados. La gente
inteligente con Urano en casa II evita trabajar para empresas o instituciones.
Los que tienen a Urano en Casa II pueden empezar buscando un empleo seguro
dentro del marco de una compañía, pero entonces algo explota: la empresa
quiebra o nos dejan cesantes, o nos empezamos a sentir insoportablemente
claustrofóbicos y debemos dejar el trabajo. Para los que tienen a Urano en Casa
II, el mundo material no puede ser un simple medio para establecer seguridad,
de modo que se pueda pagar la hipoteca. Hay que entenderlo de manera mágica.
Con esto quiero decir que tal vez sea necesario utilizar la visión y la
pre-visión, combinadas con un profundo conocimiento de modo en que funciona el
"sistema" y de cómo la sustancia sigue el flujo de las ideas. por eso
las profesiones relacionadas con Urano en Casa II suelen llamarse no convencionales.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 88
Para aquellos que se han resuelto fijar
todo, Urano en Casa II puede ser sumamente angustiante. Si deseamos viajar con
una valija liviana y logramos ingresar en el espíritu de la exploración que
Urano requiere, podremos revelar el secreto de cómo sentirnos cómodos en el
mundo sin tener que vender nuestra alma.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 89
Urano no maneja bien el proceso del
envejecimiento, ni los vaivenes del cuerpo y las fases de debilidad y
enfermedad. la visión prometeica rechaza de cuajo este nivel de la vida. Desde
un lado positivo, esta visión nos llevó -como totalidad- a hallar la manera de
prolongar la vida y de aumentar su cualidad y vitalidad, en especial en los
últimos años, mediante una gama siempre creciente de descubrimientos médicos y
tecnológicos. Pero cuando Urano es demasiado dominante en la carta, en
particular si está en Casa II o en Casa VI, o aspecta fuertemente a la Luna
(que se relaciona con los asuntos corporales), a menudo suele haber un
sentimiento de revulsión contra el cuerpo. Esto puede experimentarse contra el
propio cuerpo o contra fallas en los cuerpos de los demás, porque, por
supuesto, podemos proyectar nuestra sensación de imperfección física.
En
las relaciones, Urano a menudo causa trastornos de esta manera. Cuando está
fuertemente configurado con Venus, pueden surgir problemas similares, por la
asociación de Venus con la Casa II. Podremos hallar que con el correr del
tiempo la realidad física de nuestra pareja nos perturba, porque nos damos
cuenta de las imperfecciones del ser amado. Urano también puede estar conectado
con ciertos desórdenes alimentarios, como la anorexia, en los que hay una
obsesión por la perfección del cuerpo.
Si
volvemos a la mitología, podemos ver este patrón con mucha claridad en el
rechazo de Ouranos por sus hijos. Todo lo que tenga defectos o no calce con la
imagen perfecta es repudiado, o se invierte una gran cantidad de esfuerzo,
energía y haya dinero para "arreglar" lo imperfecto. Es probable que
esta actitud genere mucho dolor, tanto en uno como en la gente a la que uno
ama, cuando esta dimensión de Urano hace estragos. También es común en aquellos
que son fuertemente acuarianos si en su carta natal no tienen suficiente tierra
para aportar algo de equilibrio.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 139-140
URANO EN LA TERCERA
Quienes tienen a Urano en la casa Tres
buscan continuamente su propia manera de entender lo que sucede a su alrededor,
en vez de seguir adheridos a la forma en que les han enseñado a ver las cosas.
Dicho de otra manera, son pensadores intuitivos, originales e inventivos. De
alguna manera, perciben su entorno desde un ángulo ligeramente diferente del de
las otras personas. Es muy frecuente que muestren una especie de claridad desapegada
que les permite resolver rápidamente los problemas. A veces, sus ideas van
ligeramente adelantadas a su época.
Es
probable que las personas que tienen a Urano en la casa Tres sean inquietas y
sumamente tensas. Necesitan estar en movimiento, explorar y experimentar una
amplia variedad de facetas de la vida. Son capaces de cambiar de opinión tan
rápidamente que los demás se quedan sumidos en una total confusión respecto de
lo que está pasando.
Urano
en la Tercera casa puede significar un medio que perturba al sujeto durante su
niñez, posiblemente mediante importantes cambios de residencia que lo
trastornan. Es probable que, incluso a edad temprana, se haya sentido aparte o
diferente de otros integrantes de su ambiente inmediato. Las relaciones con los
hermanos pueden ser fuera de lo común, como en el caso de las familias mixtas,
en que hay hermanastros o hermanastras, hijos de un matrimonio anterior de uno
de los padres o de ambos. También se encuentra este emplazamiento en las cartas
de personas que son considerablemente mayores o menores que los otros hermanos.
Quien tenga a Urano en la casa Tres
puede haber experimentado dificultades para adaptarse a los sistemas de
educación tradicionales. Cualquiera que sea el estudio que sigan, es probable
que los cursos estén sometidos a cortes y modificaciones. Suelen ser personas
que sobresalen en los dominios de la educación y de la comunicación.
La casa Tres rige los viajes cortos, y
quien tenga en ella a Urano puede esperar que le sucedan cosas inesperadas.
Con
un hijo con Urano en Casa III, suele ser común eso que, de manera eufemística,
llamamos dificultades de aprendizaje.
La resistencia a la disciplina mental, la rebelión contra el método de aprender
de memoria, la renuncia a concentrarse en temas o tareas que aparecen aburridos
y una manera sumamente excéntrica de comunicarse y escribir pueden ser notorias
en las personas con Urano en estas Casas.
Por cierto, estas no son
"dificultades de aprendizaje" en el sentido de que haya una falta de
inteligencia o de capacidad, sino que se trata de que el niño necesita aprender
de un modo diferente, entendiendo al mundo más por la conexiones que revelan el
sistema que a través de trozos aislados de información (...)
El sufrimiento uraniano puede ocurrir en
la primera etapa de nuestra vida en relación con los sistemas educativos, ya
sea en la escuela secundaria o en la universidad.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 90-91
Hay una palabra que "huele" a
Urano en Casa III: verdad. La verdad
suele llegar bajo la forma de una revelación cuando Urano está en esta Casa. La
comprensión no es un proceso de construcción que pone un hecho sobre otro para
arribar a una conclusión lógica. La comprensión llega en toda su amplitud. Para
la persona con Urano en Cada III, dicha verdad es indiscutible. A todo aquel
que la escuche, esto puede resultarle muy difícil, porque hay una cualidad de
impermeabilidad en el pensamiento de la persona. Es casi imposible mantener un
debate objetivo con alguien que tiene a Urano en la Casa III, si el tema toca
alguna de estas verdades uranianas auto manifiestas. El sistema está completo y
no necesita más alteraciones o moderaciones. Para alguien que no tienen entrada
en el sistema puede ser irritante.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 93
Con Urano en Casa III a veces hay un
terrible sentimiento de que nadie va a entender de qué estamos hablando.
Sentimos que no podemos comunicar nuestras percepciones a los demás. Entonces,
Urano en Casa III, aunque se siente muy cómodo en ella, también puede reflejar
mucho sufrimiento mediante un sentido de aislamiento intelectual.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 92
URANO EN LA CUARTA
Ya
sea debido a una elección personal o a circunstancias externas inevitables, los
nacidos con Urano en la Cuarta casa no están hechos para vivir atados por la
unidad tradicional de la familia biológica. Es probable que se sientan ajenos,
extraños o exiliados en relación con su familia de origen, o que por alguna
razón la vida familiar se haya visto perturbada durante los primeros años de su
vida, y la familia se haya dispersado. Este emplazamiento de Urano lleva
consigo una necesidad de descubrir cual es su verdadero lugar de pertenencia,
ya que se diría que las raíces familiares o raciales no ofrecieran a estos
nativos esa clase de seguridad.
Este emplazamiento también podría
corresponder a una vida hogareña poco común. Es posible que el hogar sea usado
como lugar de reunión de grupos u organizaciones donde se intercambien
diferentes ideas. Puede que el padre (o la madre) sea portador de algunas de
las características de Urano. Quizás haya sido, de alguna manera, poco
convencional o excéntrico, o simplemente se haya pasado la vida apareciendo y
desapareciendo en el escenario doméstico. Tal vez se haya sentido prisionero de
su condición de padre (sobre todo sí está Urano mal aspectado con el Sol). En
ocasiones se encuentra físicamente presente, pero no por eso deja de ser una
incógnita con quién es difícil establecer una ligazón emocional intensa. En un
sentido más positivo, puede tratarse de un padre sumamente original e
inventivo, de pensamiento libre, y afectuoso sin por ello resultar sofocante.
Aunque
es probable que esto no se revele hasta una época tardía de la vida, es
frecuente que quienes tienen a Urano en la casa Cuatro sean profundamente anti
convencionales. En algunos casos, puede ser que vivan de cierta manera hasta
los cuarenta y tantos años, y que después cambien radicalmente de estilo de
vida cuando Urano se opone a su lugar natal. A medida que envejecen, en estos
nativos puede aflorar un interés por la metafísica y por los sistemas políticos
y filosóficos.
Urano y Acuario en la casa cuatro quizá
no ofrezcan una gran cantidad de afecto en la primera infancia, tal vez el bebé
interior no esté demasiado bien nutrido, pero el alimento emocional que
proporcionan puede ser el más adecuado para alguien que ya está al borde de la
rebelión adolescente. Hay que tener en cuenta que la clase de alimento
emocional que se le da a un bebé no sirve para todas las edades.
Richard Idemon,
pág. 145
El Hilo Mágico.
Con Urano en las Casas de los padres,
podremos encontrar en el entramado de la pisque familiar todo tipo de
perturbaciones e inestabilidad, abiertas o cubiertas. Dado que la IV y la X son
Casas angulares, como Casa I y la VII, la inestabilidad suele ser literal y
concreta, no solo en la niñez, sino también más adelante en la vida. La
necesidad uraniana de romper con las estructuras existentes, que empieza como
una herencia de los padres pero que en definitiva pertenece al propio
individuo, puede expresarse comúnmente en el entorno doméstico en la vida
adulta, de modo que Urano en Casa IV suele estar vinculado con el trotamundos,
el emigrante, la persona que siente el impulso de escaparse del lugar de sus
orígenes.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 109
Este parece ser un tema común cuando Urano
está en las Casas de los padres: el hijo
puede interpretar el comportamiento de ellos como falto de sentimiento o de
amor, cuando en realidad ellos están al borde de un colapso nervioso y no
pueden responder a las necesidades y sentimientos de los hijos. La naturaleza
impersonal de la experiencia uraniana nos suele resultar dura de digerir desde
un punto de vista emocional, ene especial cuando el trastorno o la separación
parecen inmerecidos o injustos. Suponemos que hay que culpar a los sentimientos
personales -sean los propios o los de nuestros padres-.
Pero,
por lo general, Urano describe la perturbación mediante circunstancias
colectivas como una guerra, aunque, cuando está en las Casas IV o X, igual lo
encontramos en el entorno familiar, con relación a alguno de los padres. A
veces Urano describe el temperamento de uno de ellos. pero con frecuencia,
cuando este es el caso, que el padre o la madre estaban atrapados en una
situación intolerable, y el panorama general sabe más a un terrible error
cósmico que a un intento deliberado por lastimar. De cualquier modo, por
supuesto, en última instancia siempre es responsabilidad del individuo hallar
la manera de contener y honrar el espíritu prometeico.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 111
Urano en Casa IV puede avizorar una
sociedad perfecta, una comunidad perfecta, en la que las circunstancias de
nacimiento y parentesco no deberían ser determinantes del valor de las
personas. ese es el ideal uraniano de perfección. Pero la realidad material no
es así. Probablemente no lo sea durante mucho tiempo (si es que alguna vez
llega a serlo), porque siempre existe un problema fundamental con la naturaleza
humana. Los elementos saturnianos de la naturaleza humana, que todos tenemos en
nuestro interior, son jerárquicos y siempre se opondrán a la pérdida de las
estructuras sociales que definen nuestro lugar.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 114
URANO EN LA QUINTA
Los placeres raros son los
que más nos deleitan.
EPICTETO
De manera similar a Urano en la Primera
casa, son personas que casi no tienen más remedio que ser innovadoras y
diferentes. Es probable que los que tienen este emplazamiento nunca estén
totalmente satisfechos con sus creaciones, y que les perezca siempre que
podrían haber hecho algo mejor, más ideal. En ocasiones, la
inspiración creadora los acomete como un relámpago, como si un rayo
los cargase.
A
Urano lo que más le interesa es todo aquello que a los demás les parece raro y
excéntrico, y es probable que en la Quinta casa sus aficiones se salgan
bastante de lo común. Lo mismo es aplicable a sus aventuras y romances, que
pueden ser anticonvencionales, impulsivas, inconstantes, secretas y terminar
tan súbitamente como empezaron. Urano se aburre cuando la emoción y el
entusiasmo originales se desvanecen, o si la relación se vuelve demasiado
previsible o estrecha. Llegado ese momento, busca justificaciones para ponerle
fin sin demora.
Quienes
tienen a Urano en la casa Cinco han de encontrar otras maneras de expresarse,
además de la puramente biológica. Aunque tengan hijos, sus necesidades
creativas no quedarán satisfechas con el simple hecho de ser padres. Hay casos
de mujeres con Urano en la casa Cinco que tienen muy poco deseo de ser madres,
o que se han separado de sus hijos por razones diversas. Parece que, cuando
está en esta casa, Urano plantea la exigencia de satisfacer la necesidad de
hallar otras formas creativas diferentes de la meramente generativa. Cuando son
padres, es probable que los puntos de vista de estos nativos sobre la educación
de los niños sean progresistas o contrarios a los que defiende la sociedad.
Si
Urano esta afligido en la Quinta casa en un tema femenino puede indicar hijos
extramatrimoniales; partos difíciles; frecuentes abortos o peligro de perder al
niño en accidente imprevisto o enfermedad poco común, dependiendo de la
naturaleza de los planetas y aspectos que reciba Urano. No es favorable para el
juego ni las especulaciones. Gusto en general por el placer a través de formas
malsanas de excitación.
Urano en
Casa V podrá pedirnos que reconsideremos nuestra definición de hijo y qué clase de hijos -físicos o de otro
tipo- podemos crear mejor como individuos. En realidad no nos gusta pensar en
esto; puede resultar muy amenazante, ya que desafía nuestra identificación con
la paternidad o maternidad como pasaporte a la normalidad social. muchas
mujeres tienden a sentir que, en cierto modo, son inferiores en su condición femenina
si no quieren tener hijos, y los varones pueden sentir que se cuestiona su
virilidad si no tienen descendencia. no obstante, la capacidad de la paternidad
o maternidad -en oposición a la reproducción biológica- es un talento como
cualquier otro, no un supuesto universal, y hay mucha gente a la que le iría
mejor i creara en otras esferas y dejara la concepción de hijos para aquellos
que verdadera, profunda y genuinamente quieren, aman y se identifican con los
niños. y es probable que haya más personas todavía, en especial las que tienen
a Urano en Casa V, que de hecho son buenos padres o madres, pero que se
relacionan mejor con sus hijos como amigos. Si esos individuos fueran honestos
con esa realidad, les podrá ir mucho mejor a ellos y a sus hijos. Con Urano,
tal vez podamos hallar el coraje de cuestionar las suposiciones que se han
consolidado en nosotros desde hace tanto tiempo acerca de la naturaleza de los
lazos "normales" entre padres e hijos.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 126
URANO EN LA SEXTA
Urano en la casa Seis tiene la ocasión de
aprender que, para poder cambiar el afuera, se ha de alterar primero el
adentro. De no hacerlo así, estos nativos son propensos a padecer trastornos de
diversa importancia en la vida, tales como enfermarse para no tener que ir a un
trabajo que no les gusta, en lugar de empezar admitiendo que se sienten
prisioneros del trabajo, y de actuar luego en consecuencia para cambiar la
situación.
De
hecho, es posible que toda su relación con el mundo del trabajo y
del empleo sea muy poco convencional. Son mentes que necesitan estar
continuamente comprometidas e interesadas con la tarea que tienen por delante,
y lo mejor es que el trabajo les deje margen para el cambio, la variedad,
la inventiva y el movimiento. Es frecuente que tengan dificultad en trabajar a
las órdenes de otros, porque necesitan siempre encarar el trabajo a su manera,
por más que antes jamás se lo haya hecho así. Sin ego, a menos que tengan a
Urano muy mal aspectado, el intercambio de ideas con sus colaboradores puede
resultarles eficaz y estimulante.
Con
frecuencia les interesan tanto las nuevas tecnologías como los temas del tipo
de la astrología u otros sistemas metafísicos o psicológicos afines.
En general, no les gusta estar atados
por las pequeñas necesidades diarias y las rutinas de la existencia, y es
probable que creen complicaciones para que la vida sea más emocionante y
ofrezca mayor interés.
Interesados
en la relación entre mente y cuerpo, son personas capaces de explorar diversas
formas de medicinas alternativas y complementarias; en ocasiones, probarán
dietas rarísimas y se someterán a diversas rutinas de ejercicios. El exceso de
estrés y de tensión nerviosa, que debilita las defensas del cuerpo, puede
provocarles problemas de salud.
Es obvio que quienes tienen aquí a Urano
se beneficiarán de cualquier forma de actividad que les ayude a liberar
tensiones: ejercicios físicos, yoga, meditación, etc. En su lado positivo,
Urano ofrece la posibilidad de una rápida recuperación o liberación de la
enfermedad, ayudada en gran medida por las actitudes mentales adecuadas.
También puede existir la posibilidad de
que las personas con Urano en la Sexta casa tengan gustos raros con sus
animales domésticos.
Por intermedio de la casa VI creamos
rituales, hábitos y patrones repetitivos y seguros de comportamiento, que nos
permiten manejar el cuerpo y el mundo. Cuando Urano está en la Casa VI, los
rituales, hábitos y patrones de comportamiento aceptados colectivamente, tienen
a no funcionar muy bien. Urano en Casa VI a veces se asocia con problemas de
salud del tipo que desconcierta a los médicos. Puede estar conectado con
enfermedades os síntomas que no parecen tener una base orgánica. Urano puede
requerir un conocimiento mayor o más profundo de la síntesis entre el cuerpo y
la psique, y tal vez deban considerarse los efectos más sutiles que el entorno
y la actitud mental generan ene l cuerpo. Es probable que los que tienen a
Urano en Casa VI no puedan ignorar a su cuerpo o tratarlo según las teorías
convencionales. Cuando Urano está en Casa VI es posible que uno se vea obligado
a cambiar por completo su idea de qué es eso de lo que está hecho el cuerpo,
quizá porque se enferma por causas que aparentemente nadie puede explicar.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 131
A veces, Urano en Casa VI está conectado con
trastornos en nuestros esfuerzos por crear una vida laboral rítmica y estable
(...) En el trabajo o en la salud -y a veces en ambos- Urano puede hacer sentir
su presencia diciendo: "Lo siento, pero debes entender la vida material
sobre una base completamente distinta. Aprende a ver más allá de la sensatez
predeterminada de la sociedad a tu alrededor. Mira con mayor profundidad. Vive
con inestabilidad". De ahí que Urano en Casa VI también esté asociado con
una atracción por los métodos de sanación alternativos y con el desarrollo de
habilidades y conocimientos en esferas que no encajan dentro de lo que mucha
gente considera un "trabajo apropiado". Urano en Casa VI puede
reflejar que hay algo en la persona que simplemente no puede trabajar para otro
ni cuadrar en las rutinas o rituales de otro.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 132
Los síntomas uranianos a menudo están
vinculados con el sentimiento de estar atrapado dentro de una estructura de
vida que es demasiado limitante y restrictiva. O nuestra perspectiva quizás sea
demasiado estrecha y materialista, y no tengamos suficiente comprensión del
cuerpo a niveles más sutiles. Con Urano en Casa VI, podremos tener que ampliar
nuestra visión para percibir el cuerpo físico como un sistema intrincado e
interrelacionado, donde la pisque juega un papel tan importante como la carne
misma.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 138
Los
tres planetas exteriores tienen una mala reputación por somatizar cuando se
encuentran en la Casa VI. La somatización quizás sea la primera etapa de un
proceso que, en definitiva, conduce a una conciencia más expandida. Pero,
inicialmente, estos planetas tal vez no estén en condiciones de expresarse de
ninguna otra manera, porque el ego está encerrado en una visión del mundo muy
apegada a la tierra. Entonces, entran en erupción a través del cuerpo, porque ese
es el único modo en que pueden darse a conocer.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 138
Urano no maneja bien el proceso del
envejecimiento, ni los vaivenes del cuerpo y las fases de debilidad y
enfermedad. la visión prometeica rechaza de cuajo este nivel de la vida. Desde
un lado positivo, esta visión nos llevó -como totalidad- a hallar la manera de
prolongar la vida y de aumentar su cualidad y vitalidad, en especial en los
últimos años, mediante una gama siempre creciente de descubrimientos médicos y
tecnológicos. Pero cuando Urano es demasiado dominante en la carta, en
particular si está en Casa II o en Casa VI, o aspecta fuertemente a la Luna
(que se relaciona con los asuntos corporales), a menudo suele haber un
sentimiento de revulsión contra el cuerpo. Esto puede experimentarse contra el
propio cuerpo o contra fallas en los cuerpos de los demás, porque, por
supuesto, podemos proyectar nuestra sensación de imperfección física.
En
las relaciones, Urano a menudo causa trastornos de esta manera. Cuando está
fuertemente configurado con Venus, pueden surgir problemas similares, por la
asociación de Venus con la Casa II. Podremos hallar que con el correr del
tiempo la realidad física de nuestra pareja nos perturba, porque nos damos
cuenta de las imperfecciones del ser amado. Urano también puede estar conectado
con ciertos desórdenes alimentarios, como la anorexia, en los que hay una
obsesión por la perfección del cuerpo.
Si
volvemos a la mitología, podemos ver este patrón con mucha claridad en el
rechazo de Ouranos por sus hijos. Todo lo que tenga defectos o no calce con la
imagen perfecta es repudiado, o se invierte una gran cantidad de esfuerzo,
energía y haya dinero para "arreglar" lo imperfecto. Es probable que
esta actitud genere mucho dolor, tanto en uno como en la gente a la que uno
ama, cuando esta dimensión de Urano hace estragos. También es común en aquellos
que son fuertemente acuarianos si en su carta natal no tienen suficiente tierra
para aportar algo de equilibrio.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 139-140
URANO EN LA SÉPTIMA
Con
Urano en esta casa, la actitud hacia las relaciones excederá, sin lugar a dudas
el marco convencional. Si una relación no es creativa y estimulante, abierta y
sincera, son capaces de romperla para buscar algo mejor.
Podría
ser que uno de los miembros de la pareja, o los dos, exigiera más
espacio y más libertad de lo acostumbrado en un matrimonio o pareja habitual.
En vez de conformarse con ser simplemente la pareja de alguien, estas personas
necesitan tener fuera de la relación otros intereses que les permitan
fortalecer su sentimiento de identidad y de vitalidad. Con Urano en la casa
Séptima los miembros de una pareja tendrán que reconocer que cada uno es un
individuo por derecho propio, y no alguien que solamente existe para satisfacer
lo que el otro pueda requerir en un momento dado.
Los
que tienen a Urano en la casa Siete suelen experimentar revelaciones y cambios
súbitos de manera de ver y de actitud, que hacen que, de pronto, la relación
que mantienen ya no les satisfaga. Buscan entonces otras que reflejen el cambio
de su estado anímico.
La Séptima casa
describe tanto lo que buscamos en una pareja como las cualidades que
posiblemente estén latentes o poco desarrolladas en nosotros mismos. Quienes
tienen en este emplazamiento a Urano buscan un compañero o compañera sumamente
original, enérgico, dinámico, mágico, inventivo y carismático; alguien que los
despierte y les ofrezca cambios y perspectivas nuevas. Sin embargo, no es
probable que una persona de esta naturaleza sea de las que aportan a una
relación un alto grado de estabilidad y seguridad.
La
casa Siete se refiere también a la interacción social en general, y aquí se
harán valer los principios de Urano, posiblemente indicando a los nativos que
están hechos para, ya sea en virtud de su trabajo o del hecho de ser quienes
son, aportar a la sociedad nuevas ideas, intuiciones y avances.
Los sujetos con Urano situado en el Descendente
siempre intentaran apoyarse en los demás con el fin de reflejar los aspectos
más originales e in convencionales de su personalidad. Normalmente, casi
siempre suelen ser los demás quienes incitan a las personas con Urano en el
Descendente a llevar un tipo de vida mucho más emocionante y estimulante A
través de sus relaciones con los demás, el sujeto se da cuenta que no tiene por
qué amoldarse a los caprichos y convencionalismos de la sociedad, sino que
puede expresarse como realmente desea hacerlo. En lugar de afirmar "¡Soy
único!", como haría el sujeto con Urano en el Ascendente, la típica
persona con Urano en el Descendente, dirá: “Somos diferentes”. Nuestra relación
es muy excitante, muy radical y anti convencional u otro montón de frases
típicamente uranianas. Las relaciones de las personas con Urano en el
Descendente, normalmente suelen estar llenas de sobresaltos y conmociones.
Sucesos inesperados, extrañas elecciones de pareja, propuestas
matrimoniales repentinas, etcétera, y todo ello, normalmente, suele ser debido
a causa del despertar de la conciencia provocado por algún cambio radical de la
personalidad.
También
suele ser a través de las relaciones como los sujetos con Urano en el
Descendente aprenden a rebelarse. La elección de la pareja, con frecuencia,
suele ser un acto de rebelión, así como la forma de establecer una relación.
con esta posición, el individuo exigirá la libertad de poder perseguir el tipo
de relación que desee y con quien desee. Con Urano situado en cualquiera de los
extremos del Eje Ascendente-Descendente, la persona necesitará establecer un
tipo de relación totalmente libre y sin ataduras, por lo que, normalmente, esta
combinación suele estar asociada con las relaciones libres, de pareja o de
concubinato y, sobre todo, con un tipo de relaciones basadas en el
compañerismo. El sujeto concibe a su pareja y a su relación como algo sumamente
excitante y estimulante, algo que puede llegar a favorecer su propia
evolución personal. Si, pasado un tiempo, esta relación deja de resultarle
estimulante, entonces, normalmente, el individuo necesitará buscar esta
excitación en otra parte.
Sue Tompkins
pág.
446 Los Aspectos en Astrología
Urano tiene mala reputación en Casa VII, porque las relaciones
tienen a ser inestables (...) Con Urano
en Casa VII, parece ser muy importante permitir que las relaciones sean como
son, sin importar si los roles sexuales o sociales son o no "aceptables"
y más allá de toda promesa de permanencia firmada y sellada.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 67-68
Con Urano en casa VII, una relación estable a veces puede ser similar a
vivir en una casa en la que todas las puertas están cerradas. Incluso si no
somos conscientes de nuestra claustrofobia psíquica, algo en nuestro interior
quiere empezar a golpear esas puertas. saber que están todas cerradas es muy
desagradable, por eso empezamos a mover los picaportes y a gritar:
"¡Déjenme salir!". Si alguien abre la puerta y nos dice: "Mira,
la puerta está abierta, puedes irte cuando quieras", probablemente no lo
hagamos. Como sabemos que somos libres de irnos, podemos decidir quedarnos.
Pero, cuando alguien dice: "No puedes irte, debes quedarte; tenemos un
acta de casamiento, una hipoteca, responsabilidades con nuestros hijos, y
debemos cuidar a tu madre, ¿y qué va a pensar la gente?, entonces el impulso de
escapar puede ser bastante compulsivo. Es cuestión de, metafóricamente, dejar
la puerta abierta, y eso puede resultarnos muy difícil si somos demasiado
convencionales o si estamos demasiado identificados con roles rígidos de
relación.
Urano es un poco más duro
en algunas Casas que en otras. Se siente muy cómodo en Casa IX, por ejemplo.
Pero puede resultar muy doloroso en Casa VII, porque nuestras necesidades
emocionales pueden verse comprometidas y hasta totalmente anuladas por la
exigencia de hallar una nueva manera, más flexible, de relacionarnos. El miedo
a la soledad y la necesidad de permanencia son atributos humanos muy básicos, y
Urano en Casa VII puede hacer que estas necesidades sean imposibles de
satisfacer sin ninguna garantía de seguridad. Podremos tener estabilidad por
mucho tiempo, pero nunca debemos
darla por sentada. Entonces, un Urano en Casa VII puede ser todo un desafío,
porque nos exige que dejemos la puerta abierta y aceptemos la posibilidad de
relaciones cuya duración dependerá de una continuidad mental o espiritual, más
que emocional o física. Para algunos esto es más fácil que para otros, según
cómo aspecte Urano a otros planetas y el balance general de elementos en la
carta. Tal vez resulte más fácil en aquellas personas dominadas por los signos
de tierra y agua.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 70-71
Urano es Casa VII nos enseña a ser más flexibles y menos convencionales
en nuestras definiciones de relación.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 82
Con frecuencia, quienes tienen a Urano en
la Octava casa sienten una necesidad compulsiva de liberarse de las
restricciones de su naturaleza instintiva básica y dejar de estar regidos por
tales emociones. Pueden, por ejemplo, sentirse atraídos por el concepto de un
matrimonio comunal, e incluso por el intercambio de parejas.
Igualmente,
es posible que intenten expresar la naturaleza instintiva de maneras diferentes
del mero propósito del apareamiento y la procreación. De aquí la reputación
atribuida a este emplazamiento, de cierto grado de curiosidad y experimentación
sexual.
Hay
casos en que Urano en la casa Ocho alterna entre los extremos de la pasión
desenfrenada y la frialdad inhumana.
Es
frecuente en los que tienen este emplazamiento el deseo de indagar debajo del
nivel superficial de la existencia para descubrir las leyes más sutiles de la
naturaleza, que operan sobre la vida. Es probable que les interese la
astrología, la psicología, la alquimia, el ocultismo y la magia, la física
subatómica o la química moderna. En una dirección similar, es posible que Urano
en esta casa se sienta fascinado por todo lo que tenga que ver con la muerte, y
procure entenderla dentro de un marco menos convencional.
En
un nivel más práctico, estos nativos pueden enfrentar súbitos cambios de
fortuna debidos al matrimonio, a herencias y a asociaciones comerciales.
Además, es probable que las diversas fases de la vida terminen en forma súbita
e irreversible: aparentemente de la noche a la mañana, un capítulo se acaba y
se inicia otro, o bien un acontecimiento imprevisto altera drásticamente la
dirección que seguía la persona.
Urano en la Casa VIII tiene una capacidad para
desentenderse de manera abrupta de las relaciones emocionales íntimas, de
hecho, puede exacerbar sus defensas contra la cercanía emocional. Con Urano en
Casa VIII, es probable que también haya experimentado pérdidas o impactos
emocionales repentinos en una etapa temprana de su vida, como la muerte de un
familiar querido o el alejamiento emocional imprevisto de uno de sus padres. La
expectativa de una pérdida inesperada puede contribuir a su miedo de
relacionarse profundamente desde un punto de vista emocional.
Liz Greene
Barreras y límites, pág. 285
Urano en Casa VIII nos enseña que hay patrones y
fuerzas en la vida que se encuentran más allá de nuestro control, y con los que
debemos entendernos mediante un espíritu de desapego.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 82
Urano en Casa VIII puede contribuir a una
sensación de ser "anormal", porque nuestra sexualidad no se encuadra en
un determinado conjunto de preceptos sobre cómo se supone que debemos sentir y
actuar. Esa culpa a menudo acompaña a Urano en Casa VIII cuando el trasfondo
familiar nos habla de una intensa inhibición y hay esqueletos sexuales en el
armario de la familia. Urano en Casa VIII puede reflejar un gran temor a la
vulnerabilidad y a la pérdida de control que siguen a la pasión, porque puede
entrar en erupción algo que tal vez no aparezca en la lista de la página 53 del
Buen Manual del Sexo. Mediante las sensaciones sexuales y las experiencias
sexuales, Urano puede perturbar o destrozar nuestra imagen de nosotros mismos
como un tipo determinado de persona, abriendo la puerta a un entendimiento más
amplio y flexible de las pasiones humanas.
Urano
puede aportar una intuición y una pre-visión repentinas y, mediante la
experiencia sexual, Urano en Casa VIII a veces puede provocar profundas
revelaciones sobre la naturaleza humana y sobre lo que sucede debajo de la
superficie en una relación íntima, tanto emocional como sexualmente. dichas
percepciones pueden ser muy perturbadoras porque revelan patrones y dinámicas
psicológicas que suelen ser profundamente inconscientes y formar parte de la
herencia psíquica familiar oculta. Estos destellos no suelen estar disponibles
cuando el colectivo aparece con sus sensatez prefijada sobre lo que se supone
que debe ser un comportamiento sexual normal o sobre cómo deberían funcionar
las relaciones. Sospecho que muchas personas con Urano en Casa VIII se sienten
consternadas por eso de "volvamos a los valores familiares y todo estará
bien", que suele brindarse como solución a las enfermedades de la
sociedad. El espíritu prometeico que emerge de las pasiones puede destrabar
puertas secretas, como las del castillo de Barba Azul, y lo que descubrimos
sobre nosotros mismos y la naturaleza humana en general, quizá nos haga sentir
culpables, anormales, asustados o avergonzados.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 86-87
Para Urano en Casa VIII,(el sexo) puede ser un
medio de transformación, una especie de muerte que conduce a una visión
diferente de la vida. A través de la pasión, el control del ego queda
destrozado. Aparece un mundo que no es el que habíamos pensado, lleno de
misterio, de patrones y energías que abren la mente y el corazón mucho más allá
de sus límites habituales. Se puede sentir como si estuviéramos muriendo.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 87
URANO EN LA NOVENA
Urano va siempre en pos de la
"verdad", y que mejor casa para eso que la Nueve, morada natural de
Sagitario. En vez de adherirse a ideas ortodoxas o tradicionales, el nativo
debe hallar independientemente un conjunto de creencias significativo, o un
sistema filosófico por el cual ordenar su vida.
Para
ellos, Dios puede ser concebido a imagen y semejanza de Urano -los cielos
estrellados-: muy basto y muy difícil de captar.
Es
frecuente que quienes tienen a Urano en esta casa defiendan puntos de vista
progresistas en el terreno de la educación. Quizá busquen una alternativa
diferente de la estructura académica tradicional, como podría ser un programa
de estudios independiente, o una Universidad a Distancia. Pero es probable que
en cualquier momento del programa decidan hacer un cambio total en sus estudios.
Quien tenga a Urano en la casa Nueve puede aportar ideas, conceptos e
intuiciones nuevas en cualquier campo.
Mediante
los viajes, estos nativos pueden alcanzar vivencias excepcionales e
inesperadas. Mientras visiten otro país, es probable que den con personas e
ideas que los despierten y les cambien viejas estructuras. Incluso un pariente
político puede ser el catalizador para una visión nueva e inspiradora.
Si
Urano no está muy mal aspectado, es probable que tengan una comprensión
impresionante de tendencias futuras a como si pudieran tomar el pulso de la
sociedad, como por ejemplo Julio Verne que nació con Urano en Capricornio en la
casa Nueve.
Los
que tienen a Urano mal aspectado podrían, según el momento, adherirse a cultos
extrañísimos o fanáticos.
Con un hijo con Urano en Casa IX, suele ser
común eso que, de manera eufemística, llamamos dificultades de aprendizaje. La
resistencia a la disciplina mental, la rebelión contra el método de aprender de
memoria, la renuncia a concentrarse en temas o tareas que aparecen aburridos y
una manera sumamente excéntrica de comunicarse y escribir pueden ser notorias
en las personas con Urano en estas Casas.
Por
cierto, estas no son "dificultades de aprendizaje" en el sentido de
que haya una falta de inteligencia o de capacidad, sino que se trata de que el
niño necesita aprender de un modo diferente, entendiendo al mundo más por la
conexiones que revelan el sistema que a través de trozos aislados de
información (...)
El
sufrimiento uraniano puede ocurrir en la primera etapa de nuestra vida en
relación con los sistemas educativos, ya sea en la escuela secundaria o en la
universidad.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 90-91
Los
uranianos pueden ser sumamente rígidos en su modo de pensar, debido a la
tendencia de recibir la verdad como una revelación.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 91-92
Hay
una palabra que "huele" a Urano en Casa IX: verdad. La verdad suele
llegar bajo la forma de una revelación cuando Urano está en esta Casa. La
comprensión no es un proceso de construcción que pone un hecho sobre otro para
arribar a una conclusión lógica. La comprensión llega en toda su amplitud. Para
la persona con Urano en Cada IX, dicha verdad es indiscutible. A todo aquel que
la escuche, esto puede resultarle muy difícil, porque hay una cualidad de
impermeabilidad en el pensamiento de la persona. Es casi imposible mantener un
debate objetivo con alguien que tiene a Urano en la Casa IX, si el tema toca
alguna de estas verdades uranianas auto manifiestas. El sistema está completo y
no necesita más alteraciones o moderaciones. Para alguien que no tienen entrada
en el sistema puede ser irritante.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 93
URANO EN LA DÉCIMA
Los
que tienen este emplazamiento necesitan hacer a la sociedad algún aporte
original y progresista. No quieren que se los vea como seres comunes, sino más
bien como fuerzas que promueven el cambio, la rebelión o la innovación. Dado
que la casa Diez es el dominio natural de Capricornio, cuentan con la capacidad
de canalizar sus nuevas ideas o intuiciones hacia vehículos concretos.
Puede haber personas con este
emplazamiento que renuncien a empleos porque no estaban de acuerdo con la
manera en que se llevaban las cosas. También hay otras que constantemente
cambian de trabajo, en busca de algo que tenga más significado para ellas. En
ocasiones, los que presentan este emplazamiento tienen trabajos poco comunes. A
veces, acontecimientos aparentemente incontrolables pueden desbaratar el status
quo en la carrera.
La madre puede estar hecha según el
molde de Urano. Quizás el niño la vea como excéntrica o anti convencional en
algún sentido. Puede ser que otros intereses hayan interferido con el rol de
madre, o que ella haya sentido la maternidad como una trampa. Si la madre era
muy voluble, el niño puede haberse visto forzado a crecer con más
independencia, sin poder confiar en ella como hacen la mayor parte de los
niños. Ocasiones hay en que la madre es aparentemente convencional, pero dentro
de ella arde el deseo de liberación. Los hijos lo perciben, y más adelante
"viven por delegación" los deseos insatisfechos de la madre, evitando
cuidadosamente dejarse trabar por excesivas responsabilidades maternales o
familiares. A veces, las madres con este emplazamiento se sienten culpables por
su carencia de instintos maternales típicos, y olvidan lo que tienen de bueno:
su capacidad de amar sin sofocar es para el niño espejo y representación de la
libertad de pensamiento. Probablemente, las mujeres que tienen a Urano en la
casa Diez serán más felices criando hijos después de haber satisfecho
parcialmente su necesidad de aportar algo a la sociedad.
A menudo, las personas con Urano conjunto al
MC, suelen reflejar una marcada necesidad de rebelarse contra los valores
sociales o contra lo establecido por alguna de las figuras paternas y, sobre
todo, una gran necesidad de negarse a seguir una línea de trabajo que pueda
contradecirse con sus propios deseos. Sin embargo, en el fondo, la
persona puede estar bastante de acuerdo con los deseos inconscientes del padre,
quien espera que su hijo pueda llevar a cabo todas estas excitantes cosas
que a él tanto le hubiera gustado realizar, pero que jamás se atrevió a llevar
a cabo.
Esta
combinación favorece las profesiones liberales, ya que el sujeto necesita hacer
las cosas a su manera y sin ningún tipo de interferencias. En algunas
ocasiones, durante su infancia, el sujeto tuvo que rebelarse contra alguna
figura de autoridad y, posiblemente esto es lo que hace que, en el trabajo,
siga intentando rebelarse contra sus jefes. Las personas con esta posición
son demasiado honestas para limitarse a seguir las líneas sociales establecidas.
La vocación elegida o la forma en que siguen su carrera, realmente, debe
llenarles plenamente y, por lo general, nunca seguirán una carrera por el mero
hecho de ganarse una respetabilidad o de conseguir una seguridad.
La vocación
debe resultarles muy excitante e interesante y en cuanto dejen de considerarla
así, enseguida se sentirán empujados a empezar algo nuevo y totalmente distinto
a lo que hacían. Las personas con Urano conjunto al MC no sólo desean que
exista una cierta libertad dentro de su carrera, sino que esta carrera, en
realidad, también esté relacionada con la libertad de los demás. Por ello, en
algunas ocasiones, el tipo de vocación suele estar relacionado con una
liberación de las personas, sea apoyando una libertad de expresión, sea
alimentando a los más necesitados o bien, mediante la utilización de una
tecnología mucho más avanzada que, potencialmente, pueda llegar a liberar a las
personas de unas tareas sumamente aburridas y poco estimulantes.
Sue
Tompkins, Págs. 446-47
Los
Aspectos en Astrología
A Urano en Casa X le encanta impresionar.
Liz
Greene
Urano
en la carta natal, pág. 55
Este
parece ser un tema común cuando Urano está en las Casas de los padres: el hijo puede interpretar el
comportamiento de ellos como falto de sentimiento o de amor, cuando en realidad
ellos están al borde de un colapso nervioso y no pueden responder a las
necesidades y sentimientos de los hijos. La naturaleza impersonal de la
experiencia uraniana nos suele resultar dura de digerir desde un punto de vista
emocional, ene especial cuando el trastorno o la separación parecen inmerecidos
o injustos. Suponemos que hay que culpar a los sentimientos personales -sean
los propios o los de nuestros padres-.
Pero, por lo general, Urano describe la
perturbación mediante circunstancias colectivas como una guerra, aunque, cuando
está en las Casas IV o X, igual lo encontramos en el entorno familiar, con
relación a alguno de los padres. A veces Urano describe el temperamento de uno
de ellos. pero con frecuencia, cuando este es el caso, que el padre o la madre
estaban atrapados en una situación intolerable, y el panorama general sabe más
a un terrible error cósmico que a un intento deliberado por lastimar. De
cualquier modo, por supuesto, en última instancia siempre es responsabilidad del
individuo hallar la manera de contener y honrar el espíritu prometeico.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 111
URANO EN LA UNDÉCIMA
Quien tenga a Urano en la Undécima casa
debe buscar otros seres con quienes pueda unirse en la persecución de un
objetivo común. Los fines y objetivos son liberales y amplios, con una fuerte
orientación humanitaria y un sentido de hermandad universal. La gente que tiene
a Urano en esta casa se siente más conectada con aquellos con quienes comparte
una visión similar. No es necesario que estén geográficamente próximos entre sí
para ser parte del grupo; lo que importa es que estén dedicados a los mismos
ideales y objetivos.
En
términos más generales, a Urano en la casa Once le gusta estar con personas que
piensen como él, trátese de un grupo de científicos o de astrólogos.
En
un nivel personal, tienen generalmente sentimientos muy definidos sobre el
significado de la amistad, y esperan que los demás estén a la altura de ellos.
Este emplazamiento podría indicar la existencia de amigos que sirven como
importantes catalizadores del cambio. De la misma manera, podría ser el nativo
quien aporte a sus amigos nuevas experiencias. Algunas personas con Urano en la
Undécima casa suelen sentir fascinación por las gentes un tanto excéntricas,
que expresan aspectos de su naturaleza que quienes tienen este emplazamiento no
siempre reconocen en sí mismos. Suele suceder que tengan amigos de muchas clases
diferentes, que no combinen fácilmente unos con otros.
Sus metas y objetivos en la vida podrían
cambiar radicalmente en un plazo relativamente breve, como si un día se
despertaran con una nueva visión que deben seguir.
Si
Urano está mal aspectado, es probable que estos nativos expresen ideas
revolucionarias que podrían ser demasiado tajantes y drásticas. También es
posible que riñan con otros miembros del grupo por alguna cuestión de
principio.
Urano, en su casa natural, la XI, es la
mirada puesta hacia el futuro, hacia la posibilidad de realizar una buena
siembra con vistas al mañana.
Jorge César Parodi
URANO EN LA DUODÉCIMA
El planeta de la libertad en la casa del
confinamiento es una contradicción. Urano en este emplazamiento pueda dar una
sutil afinación con los movimientos que se dan en el seno de lo colectivo, con
frecuencia antes de que efectivamente se manifiesten.
Si Urano está bien aspectado en la casa
Doce, los nativos tienen muchos buenos consejos para ofrecer, como si fueran un
manantial de comprensión y conocimiento. Sin embargo, si el planeta presenta
muchos aspectos difíciles, es posible que la visión se dé desmejorada por las
propias neurosis y complejos del nativo. Habrá que "limpiar" todo ese
material antes de que se puedan hacer sentir los beneficios positivos de este
emplazamiento. También es muy probable que estas personas se dejen apartar de
su curso por los sentimientos negativos que haya en la atmósfera.
Independientemente de como se halle aspectado Urano, es frecuente que haya
interés por la parapsicología y el espiritualismo.
Una profunda renuncia a abdicar de su
independencia puede hacer que a estos nativos les resulte difícil asentarse o
echar raíces. Quizás haya una parte de ellos que quiere desesperadamente
intimidad y seguridad, pero sin saber cómo lograrlas; no obstante hacen lo
posible para impedir que esto se concrete. Son nativos con una persistente
sensación de soledad y aislamiento.
Algunos de estos nativos se unen a
sociedades secretas o se dedican a trabajar "entre bastidores" para
algún grupo. Es posible que se afilien a instituciones de naturaleza
progresista o, en algún sentido, excepcional. Al actuar como canales por cuya
mediación se establecen las ideas y las tendencias nuevas, estas personas
pueden revolucionar o perturbar el funcionamiento de cualquier institución con
la que se encuentren relacionados.
Algunos
períodos de confinamiento o de encierro pueden producirles efectos
sorprendentes. En algunos casos, nativos con estas características que no
habían reconocido una necesidad de apartarse temporalmente de la vida han
atraído hacía sí, como consecuencia, “accidentes” o enfermedades que los
obligaron a hacerlo. Son posibles vuelcos súbitos de fortuna: algo que parecía ominoso
y amenazante puede resultar completamente diferente de lo que esperaban, y
viceversa.
Si
Urano está muy mal aspectado en la casa Doce, la investigación del mundo
psíquico u oculto puede traer problemas en la salud, especialmente en la
relación con el sistema nervioso.
La
Casa XII se relaciona con la herencia, aunque en un plano muy sutil. Pensamos
en la herencia como algo genético o material; no solemos hacerlo en términos de
herencia de dioses, de patrones arquetípicos o de conflictos psíquicos. Cuando
Urano está en Casa XII, podremos vernos forzados a entender la herencia de un
modo muy diferente. El espíritu prometeico estuvo transmitiéndose por el
entramado familiar durante muchas generaciones, desconocido e in-expresado, y
puede pegar muy fuerte porque, quizás, en el pasado estuvo despiadadamente
reprimido por las expectativas, presunciones y códigos de comportamiento
familiares. La persona con Urano en Casa XII puede terminar sintiéndose muy
extraña y hasta bastante loca, porque se siente zarandeada por su espíritu
dinámico y revolucionario, pero la familia está ocupada negándolo e insistiendo
en que todos son "normales".
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág. 134
Urano
en Casa XII suele sentir su diferenciación mucho más dolorosamente que en Casa
I. La antigua herencia de la visión y trastornos prometeicos a menudo es muy
fuerte, pero el individuo no se identifica con ella, como podría hacerlo cuando
está en casa I, porque es una especie de "secreto familiar". La
sensación de ser un inadaptado se da generalmente en planos más sutiles y se
siente en nuestro interior, más que mostrarse en el afuera. Urano en Casa I
podría vestirse y comportarse de un modo excéntrico, pero en Casa XII tiende a
ir por la vida tratando de ser convencional y, a la vez, con la sensación de
estar un poco loco. No se comunica de la manera obvia, pero se siente como un
resorte en nuestro interior. A menudo existe una gran ansiedad que todo lo
domina y, a veces, el profundo temor de una ruptura incipiente, que, en algunos
casos, es justificado. Uno puede sentir un compulsivo llamado a liberar a la
familia, a redimirla, para llevar y hacer actuar el fuego de Prometeo que ha
sido sofocado y enfriado a lo largo de muchas generaciones.
Dado que es poca la educación que
recibimos sobre estos temas y poca también, por ende, la ayuda real que nos dan
al respecto cuando somos jóvenes, los imperativos psicológicos que simbolizan
los planetas en Casa XII suelen terminar en estados de crisis nerviosa. Por
supuesto, las crisis nerviosas no siempre son destructivas o "malas";
a veces, son saludables y necesarias, de modo que la personalidad puede
renovarse y volverse más saludable y flexible. pero también puede ser
terriblemente atemorizantes y dolorosas para los que las atraviesan, porque el
enfoque psiquiátrico habitual se basa en la medicación, con una total ausencia
de comprensión de lo que realmente está en funcionamiento.
El espíritu uraniano, anárquico y
colectivo, que entra en erupción a través de la Casa XII, puede estar conectado
con estos estados repentinos de disociación y desorientación, no porque uno
esté intrínsecamente desequilibrado, sino porque es muy probable que haya
habido demasiada represión familiar de toda verdadera visión o conexión con el
cosmos mayor. Cuando ese espíritu empieza a causar estragos, desafiará a todas
las estructuras e hitos familiares del ego. La persona podrá sentirse aterrada
y, dado que el poder de la visión uraniana es tan grande, puede destrozar la
personalidad -durante cierto tiempo-, si el ego no es lo suficientemente fuerte
y flexible para contentarla.
Liz Greene
Urano en la carta natal, pág.135-1362