"Esas noches sin Luna, cuando incluso las estrellas de sexta magnitud
encienden sus apretados y relucientes fuegos, semillas de luz
en medio de la oscuridad.
los resplandecientes templos del cielo brillan con antorchas más
numerosas que las arenas de la orilla del mar, que las flores del prado,
que las ondulaciones del bosque. i la naturaleza les hubiese dado
multitud de poderes en proporción con su número, el mismo éter
no habría sido capaz de mantener sus propias llamas, y la conflagración
del Olimpo habría consumido al mundo entero."
Marcus Manilius
Tomado del libro de Barbara Schermer, Astrología viva, página 12
Ni signo ni planeta pueden actuar solos,
cada uno sus virtudes funde con las del otro,
mezclando así su fuerza reinan conjuntamente:
el signo ata al planeta y a éste el signo detiene."
Ni signo ni planeta pueden actuar solos,
cada uno sus virtudes funde con las del otro,
mezclando así su fuerza reinan conjuntamente:
el signo ata al planeta y a éste el signo detiene."
Marcus Manilius
Tomado del libro de Michel Gauquelin, Los relojes cósmicos, página 87