"El capitalismo actual se basa fundamentalmente en el sistema financiero internacional; esos mega-capitales, que no tienen patria, que responden sólo a la lógica del dinero fácil y rápido, se mueven en un espacio de extraterritorialidad ajeno en un todo a leyes nacionales, a superintendencias bancarias, a regulaciones, a convenios internacionales. Ese espacio no controlado (igual que el del negocio de las armas o de las drogas ilegales) –y que, al contrario, controla en muy buena medida la marcha del mundo- es el de los llamados paraísos fiscales y la banca offshore. […] Ahora ya no se trata de competir, de seguir las leyes de mercado y ser respetuoso de esos principios. Ahora la avidez por la ganancia inmediata es el nuevo norte. Todo se vale. Igual que un criminal, el dinero fácil es el único objetivo: la guerra, el crimen, la droga, el dinero sucio, la especulación financiera, el robo descarado…., todo eso reemplazó al espíritu emprendedor y laborioso de algunos siglos atrás."

Marcelo Colussi




"El capitalismo de fines del siglo XX y comienzos del XXI ha pasado a ser, lisa y llanamente, una mafia. La corrupción no es una enfermedad del sistema, un cuerpo extraño que lo ataca: es su dinámica cotidiana, lo que constituye y define su forma actual. El capitalismo contemporáneo, manejado por mega-capitales de alcance planetario, se asemeja más a una estructura mafiosa, corrupta y delincuencial que al espíritu empresarial que lo puso en marcha hace ya algunos siglos. La “aventura” de invertir y buscar hacer prosperar el negocio, sabiendo que ello puede suceder pero que no está asegurado de antemano -el riesgo ocupaba un lugar por cierto- se cambió hoy día por un esquema donde la ganancia fácil es la norma. Para ello este nuevo esquema corrupto se asegura su “éxito” con prácticas más de orden criminal que empresarial. […] La ganancia se asegura al precio que sea, y si es por medio de la fuerza bruta, no importa: el fin justifica los medios. La proclamada “libre competencia” quedó en la historia. El mundo pasó a ser el campo de acción de bandas delincuenciales… ¡legales!, con poderes omnímodos y que se dan el lujo de hablar de democracia y libertad. Igual que un gángster de barrio, el actual capitalismo se mueve con la más descarada bravuconería e impunidad."

Marcelo Colussi