A la muerte

"Muerte, mi Señora y Dueña Muerte, 
Tu abrazo, ¡debe ser tan bueno! 
Lánguido y dulce como un dulce lazo 
Y como una raíz, sereno y fuerte. 

No hay mal que no sane o no conforte 
Tu mano que nos guía paso a paso, 
En ti, dentro de ti, en tu regazo 
No hay triste destino ni mala suerte. 

Doña Muerte de los ojos de terciopelo, 
¡Cierra mis ojos que ya todo lo vieron! 
¡Sujeta mis alas que ya volaron tanto! 

Vine de la Moirama, soy hija de rey, 
Mal hada me encantó y aquí quedé 
A tu espera... ¡quiebra el encantamiento!"

Florbela Espanca




"Duerme, duerme, alma soñadora, 
¡Hermana gemela de la mía! 
Tu alma, del mismo modo que la mía, 
Rasgando las nubes se cernía 
Por encima de los otros, 
Buscando mundos nuevos, 
Más bellos, más perfectos, más felices. 

Criatura extraña, espíritu inquieto, 
Lleno de ansiedad, 
Tal como yo hacía, creando mundos nuevos, 
Bellos como tus sueños, 
y vivías en ellos, vivías soñando como yo. 

Duerme, duerme, alma soñadora, 
¡Hermana gemela de la mía! 
Ya que en vida no tuviste descanso, 
Si existe la paz en la sepultura: 
¡La paz sea contigo!"

Florbela Espanca



"¡El mundo me quiere mal porque nadie 
Tiene alas como yo las tengo! Porque Dios 
Me hizo nacer Princesa entre plebeyos 
¡En una torre de orgullo y de desdén! 

¡Porque mi reino queda más Allá! 
Porque traigo en mi mirada el vasto cielo, 
¡Y porque oros y resplandores son todos míos! 
¡Porque Yo soy Yo y porque Yo soy Alguien! 

¡El mundo! ¡¿Qué es el mundo, oh amor mío?! 
El jardín de mis versos todo en flor, 
La mies de tus besos, pan bendito, 

Mis éxtasis, mis sueños, mis cansancios... 
Son tus brazos dentro de mis brazos: 
¡Vía Láctea cerrando el Infinito!..."

Florbela Espanca






Espera

"No me digas adiós, ¡oh sombra amiga!,
Ablanda más el ritmo de tus pasos;
Siente el perfume de la pasión antigua,
¡De nuestros buenos y cándidos abrazos!

Soy la dueña de místicos cansancios,
La fantástica y extraña niña
Que un día quedó presa en tus brazos
¡No te vayas aún, oh sombra amiga!

Tu amigo hizo de mí un lago triste:
¡Cuántas ondas riendo que en él no oíste,
Cuánta canción de ondinas allí en el fondo!

Espera, espera ¡oh sombra amada!
Mira que más allá de mí ya no hay nada
¡Y nunca más me encuentras en este mundo!"


Florbela Espanca



"Las almas de las poetisas están hechas de luz, como los astros: no ofuscan, iluminan... 
Del cuento “Al margen de un soneto” 

¡Ser poeta es ser más alto, es ser mayor 
De lo que son los hombres! ¡Morder como quien besa! 
¡Es ser mendigo y dar como quien es 
Rey del Reino de Más Acá y Más allá del Dolor! 

¡Es tener de mil deseos el esplendor 
Y no saber siquiera qué se desea! 
¡Es tener aquí dentro un astro que flamea, 
Y tener garras y alas de cóndor! 

¡Es tener hambre, es tener sed de Infinito! 
Por yelmo, las mañanas de oro y de satén... 
¡Es condensar el mundo en un solo grito! 

Y es amarte, así, perdidamente... 
Es que seas alma y sangre y vida en mí 
¡Y decirlo cantando a todo el mundo!"

Florbela Espanca




"Lástima es no haber un manicomio para corazones,
pues para cabezas hay muchos."

Flor Bela de Alma da Conceição


Mi soneto

Con cadencias lentísimas, flemáticas,
con las manos en gestos contenidos,
todo en púrpuras fúlgidas, hieráticas,
vagan en ti baliando mis sentidos...

Mis pupilas serenas, enigmáticas,
pobres niñas por piélagos perdidos,
tan dolientes, tan tristes, tan extáticas,
versos son de poemas no leídos...

Las magnolias abiertas de mis dedos
son misterios, son filtros, son enredos
de pecados de amor que dejan rastros...

Y mi boca, cual rútila mañana,
va por los cielos, lírica y pagana,
deshojando en mil pétalos los astros...

Florbela Espanca



"Nací sensible y así he de morir, muy probablemente somos lo que somos y no lo que queríamos ser; no crees? Tienes que aceptarme como soy vista, que solo así yo creo que me puedan amar."

Florbela Espanca



"Necesito de toda la vida, de toda alma, de todos los pensamientos del hombre que me tenga. Necesito que el viva mas de mi vida que de su vida. Necesito que él me comprenda, que me adivine. Si no es así, soy la criatura para olvidar con la mayor de las frialdades, de las crueldades. Ya he hecho sufrir tanto! He sido tan mala! He hecho mal sin importarme, porque cuando no me gusta, soy como las estatuas que son de mármol y no sienten."

Florbela Espanca


"¿Qué más puedo hacer si la podredumbre de los charcos nunca vuelve a la limpidez de las fuentes que corren?"

Florbela Espanca



"Quiso Dios otorgarme el mágico don de ser sensible 
Como el diamante a la luz que lo ilumina. 
Darme un alma fantástica, imposible: 
–¡una danza de color y fantasía! 

¡Quiso Dios hacer de ti la ambrosía 
De esta pasión extraña, ardiente, increíble! 
Erguir en mí la antorcha inextinguible, 
¡Como un cincel grabando una agonía! 

¡Quiso Dios hacerme tuya... para nada! 
–Vanos, mis brazos de crucificada, 
¡Inútiles, esos besos que te di! 

¡Anda! ¡Camina! ¿Hacia dónde?... pero ¿por dónde?... 
Si con uno de tus gestos la sombra esconde 
El camino de estrellas que tracé..."

Florbela Espanca


"Un óleo pintado a fuego por el genio de un pintor. Aún quedan vestigios humedecidos de estos ígneos lienzos: emulan un color rojo difuminado entre colinas que se pierden; un indiferente y dorado torbellino yuxtapuesto en lontananza.
La vida apenas se muestra trémula, flota casi inmóvil, sin ningún tipo de convulsión interior, condensada en sí misma, extática y rayana en el arcano de lo profundo. La vida, hierática y recolectada, cría héroes en medio de los imponderables efluvios vespertinos.
Los hombres, antecediendo ante sí mismos, semejan ser mariposas con forma de salamandra que no pueden ser ateridas por la ingente llama, abren sus extremidades superiores como si fueran asas... y flotan. Las propias llamas tienden a ascender irredentas sobre los trazos del genial pintor. ¿O qué deberíamos pensar? ¿Se trata quizás de una gaviota? ¿De algún otro velamen?... El travieso sol se afinca en lo alto de la cima como si fuera un niño que no deja de dar saltos a causa del trágico asombro suscitado por lo nunca visto. ¿Otra gaviota? ¿Algún otro velamen?"

Florbela Espanca
Las máscaras del destino