"El hombre ha de convivir con el hecho de que el conocimiento pleno es inalcanzable: de que esa meta es solo eso, un hito que brinda sentido a su lucha existencia; la que el individuo libra en su intimidad para saber quién y qué es él. Y si ése es su afán forzoso es advertir que no encontrará tregua."
"La vida es una; solo una. Es, ésa, una realidad primaria, común a todo ser vivo. De la concepción a la muerte, cada ser agota esa experiencia única, irrepetible tanto por sí mismo como por cualquier otro. Momento a momento, cada uno va desgranando su vida en un permanente presente. Un presente fugaz por naturaleza, que se consume en el instante mismo de pensarlo o vivirlo y, por ende, inasible. Y, junto a ese presente, un futuro que se desconoce; que al tiempo que se desea, se sueña o se teme, tan solo resulta imaginable especulativamente, inmerso en la radical inseguridad. Y un pasado, que el presente nutre segundo a segundo, desván del recuerdo, depósito de imprecisión y manantial caprichoso de una memoria, defectuosa de origen, selectiva siempre y sumida en lento proceso de deterioro por el mero paso de los años y por diversidad de otras causas posibles. De esos mimbres está compuesta la existencia de todo ser vivo, inmersa por definición en el tiempo y condicionada por él."
Salvador Bermúdez de Castro
Vida, destino y muerte
Reflexiones sobre la condición humana, página 23
"La vida es una; solo una. Es, ésa, una realidad primaria, común a todo ser vivo. De la concepción a la muerte, cada ser agota esa experiencia única, irrepetible tanto por sí mismo como por cualquier otro. Momento a momento, cada uno va desgranando su vida en un permanente presente. Un presente fugaz por naturaleza, que se consume en el instante mismo de pensarlo o vivirlo y, por ende, inasible. Y, junto a ese presente, un futuro que se desconoce; que al tiempo que se desea, se sueña o se teme, tan solo resulta imaginable especulativamente, inmerso en la radical inseguridad. Y un pasado, que el presente nutre segundo a segundo, desván del recuerdo, depósito de imprecisión y manantial caprichoso de una memoria, defectuosa de origen, selectiva siempre y sumida en lento proceso de deterioro por el mero paso de los años y por diversidad de otras causas posibles. De esos mimbres está compuesta la existencia de todo ser vivo, inmersa por definición en el tiempo y condicionada por él."
Salvador Bermúdez de Castro
Vida, destino y muerte
Reflexiones sobre la condición humana, página 9
"Los actos que realizamos a lo largo de nuestras vida, en muy buena medida tan sólo son explicables y apreciables en función de esas coordenadas inexorables que la suerte nos ha asignado en el hecho mismo de nacer."
"Sin el silencio previo en uno mismo, no hay soledad que cumpla su fin y sea fructífera."
"Sólo unos cuantos, cada vez, son conscientes de la hondura dramática de lo irreversible, de lo irrepetible; de lo que conlleva en sí el paso del tiempo. "Ni se detiene, ni tropieza, ni vuelve" al decir del poeta. Todo fluye inexorablemente."
"Los actos que realizamos a lo largo de nuestras vida, en muy buena medida tan sólo son explicables y apreciables en función de esas coordenadas inexorables que la suerte nos ha asignado en el hecho mismo de nacer."
Salvador Bermúdez de Castro
Vida, destino y muerte
Reflexiones sobre la condición humana, página 53-54
"Sin el silencio previo en uno mismo, no hay soledad que cumpla su fin y sea fructífera."
Salvador Bermúdez de Castro
Vida, destino y muerte
Reflexiones sobre la condición humana, página 37
"Sólo unos cuantos, cada vez, son conscientes de la hondura dramática de lo irreversible, de lo irrepetible; de lo que conlleva en sí el paso del tiempo. "Ni se detiene, ni tropieza, ni vuelve" al decir del poeta. Todo fluye inexorablemente."
Salvador Bermúdez de Castro
Vida, destino y muerte
Reflexiones sobre la condición humana, página 31