El Sutra del Diamante (Abreviado)
1. Esto es lo que he oído:
En cierta ocasión, Buda estaba en el retiro de Anathapindika
en el bosque de Jeta, cerca de la ciudad de Sravasti, en una reunión de 1250
monjes. Después de vestirse, hacer la ronda de las limosnas por la ciudad e
ingerir su única comida diaria, se sentó junto a los monjes.
2. El monje Subhuti se inclinó ante Buda y le hizo una
pegunta: "¿Qué debería tener en cuenta alguien que quisiera seguir el
camino del Bodhisattva?"
3. Buda respondió: "Un Bodhisattva debe tener en cuenta
lo siguiente: todas las criaturas, tanto si provienen de un útero como de un
huevo, tanto si se transforman como mariposas o aparecen milagrosamente, tanto
si tienen un cuerpo como si son meros espíritus, tanto si son capaces de pensar
como si no lo son: ¡a todas estas criaturas debe ayudar a entrar en el Nirvana
antes que a sí mismo!
"Pero, ten en cuenta, Subhuti, que en realidad no
existe algo parecido a un "yo" que ayuda, ni tampoco algo parecido a
otro "yo" que recibe ayuda. ¡Un Bodhisattva que no es capaz de
reconocer esta realidad no es un verdadero Bodhisattva!
4. "Un verdadero Bodhisattva no obtiene placer de este
acto de compasión y no se interesa por las apariencias. Él tan solo ayuda a los
demás desinteresadamente.
"¿Puedes medir el Este, el Oeste, el Norte y el Sur,
Subhuti?"
"No, Señor."
"Pues tampoco puedes medir el mérito de alguien capaz
de ayudar a los demás sin pensar en sí mismo."
5. "¡Subhuti! ¿Puede alguien reconocer a un Buda en
base a sus características físicas?"
"No, Señor. Tú nos has enseñado que ser un Buda no
depende de características físicas."
"Así pues, alguien que se preocupe por las apariencias
jamás reconocerá a un Buda, pero alguien que no se preocupe por ellas quizá sí
pueda."
6. Subhuti preguntó: "Señor, ¿habrá siempre gente que
entienda tu mensaje?"
Buda respondió: "¡No lo dudes, Subhuti! Siempre habrá
gente que, habiendo escuchado el mensaje, aceptará sus preceptos y practicará
nuestro camino. ¡Nuestro mensaje llegará a la gente simplemente porque es
verdadero! Llegará un momento en que la mayoría ni siquiera necesitarán las
palabras, sino que estarán más allá de ellas. Todos debemos esforzarnos en ir
más allá de las palabras, porque uno puede sentir apego por ellas, y no debemos
sentir apego por nada. Debes comprender que mis palabras son como una balsa que
se emplea para cruzar un río. Cuando su utilidad ha sido satisfecha, debe ser
dejada atrás si queremos llegar más lejos.
7. "Así que dime, Subhuti. ¿He enseñado mi lección
final?"
"No, Señor. La lección final no es algo que pueda ser
enseñado, porque la lección final no es una cosa que se pueda agarrar o
estrechar."
8. Buda dijo: "Dime, Subhuti. Si alguien se desprende
de un universo lleno de tesoros para ayudar a los demás, ¿tendrá esto algún
mérito?"
"Sí, Señor. Su mérito será grande. Pero tú también nos
has enseñado que, para que este acto de generosidad sea genuino, debe haber
sido hecho sin pensar en obtener mérito alguno. De hecho, ¡este hombre no
debería haber pensado en sí mismo lo más mínimo!
Buda dijo: "Entonces, si alguien comprende y comparte
con otro cuatro frases de mi mensaje, su generosidad será incluso mayor. Él no
está simplemente dando una cosa, ¡está ayudando a crear futuros Budas!"
9. "Dime, Subhuti. ¿Alguien que está empezando a comprender
mi mensaje se diría a sí mismo: 'He conseguido algo grande'?"
"No, Señor. Decir algo así implicaría que el
principiante no comprende que no existe ningún ego que pueda arrogarse ningún
mérito."
"¿Y alguien que esté muy avanzado en la comprensión de mi
mensaje se diría a sí mismo: 'He conseguido algo grande'?"
"No, Señor. Alguien que dijera algo así, estaría
también diciendo que existe un ego que alcanza algo, y que existe algo que
alcanzar. Éstos no son los pensamientos de alguien que entiende tu mensaje.
"Señor, tú has dicho que he logrado alcanzar la paz y
me he liberado de las pasiones. De hecho, ya no anhelo tener el estatus de un
santo. Si lo hiciera, estoy seguro de que tú no pensarías tan bien de mí."
10. "Subhuti, si yo te dijera, 'los Bodhisattvas
adornan los cielos', ¿estaría en lo cierto?"
"No, Señor, los adornos son ilusiones, y las ilusiones
no tienen lugar en los cielos."
"Y, por tanto, los Bodhisattvas tienen que liberar su
mente del ego, y dejar de preferir un olor u otro, un sonido u otro, una vista
a otra. Un Bodhisattva no debe sentir deseo o aversión por nada."
Buda preguntó: "Subhuti, si un hombre tiene un cuerpo
tan grande como una montaña, ¿es un gran hombre?"
"No, Señor. Porque un "gran hombre" son sólo
palabras, y ser un gran hombre es tan solo una ilusión, originada por la
creencia en el ego."
...
13. Entonces Subhuti le preguntó a Buda, "Señor, ¿cómo
llamaremos a este sermón?"
Buda respondió: "Llámalo ‘El Sutra del Diamante del
Entendimiento Perfecto’. Como un filo de diamante, puede cortar todo tipo de
ilusiones."
...
14. Tras esto, Subhuti tuvo una conciencia plena del
significado del sermón y comenzó a llorar. "Señor, gracias por este
sermón. Cualquier ser que con una mente pura lo escuche y lo entienda será
conmovido por él. Dentro de cientos de años su claridad seguirá siendo
apreciada."
...
32. "Subhuti, si alguien se desprendiera de tesoros
suficientes como para llenar un universo, no tendría tanto mérito como alguien
que comprendiera y compartiera unas pocas líneas de este sermón.
"Por lo tanto, ¿qué debería tener en cuenta alguien que
comenzara a seguir el camino del Bodhisattva?
"Como una estrella fugaz, como una burbuja en un
torrente, Como una llama al viento, como la escarcha bajo el sol, Como un
destello de luz o un sueño fugaz, Así debemos entender el mundo del ego."
Subhuti y el resto de los monjes se llenaron de gozo al
escuchar el sermón de Buda.
El Sutra del Diamante
Traducción: José Silvestre Montesinos