"La astronomía egipcia era muy de estar por casa. Es cierto que calcularon que el año tenía 365 días, pero no llegaron a mucho más. No calcularon ni equinoccios ni eclipses, como sí hicieron los mesopotámicos. Se dedicaban a mirar las estrellas y a calcular su movimiento."
José Miguel Parra
"Las pirámides han sido el edificio más alto del mundo hasta el siglo XIX. Los griegos pasaron a verlas, también los romanos… y siempre han suscitado preguntas. ¿Cómo construyeron algo así? ¿De verdad solo hay una habitación dentro? ¿Y todo esto para una pequeña habitación? Aún nos siguen fascinando. Cuando ves esa barbaridad de altura desde kilómetros de distancia, te sorprendes. Luego te pones a sus pies y pierdes la perspectiva. Parece una montaña. Es impresionante."
José Miguel Parra
"Los faraones intentaban proteger sus tumbas, en este caso las pirámides, con maldiciones para el que intentara entrar. Hay que tener en cuenta que, en el antiguo Egipto, las tumbas eran lugares que se visitaban, no son como las nuestras. El objetivo de un noble en el antiguo Egipto era que la gente entrara a la capilla dentro de su tumba, leyera sus textos y biografía y, sobre todo, las listas de ofrendas. Eso significa que la gente era animada a entrar, pero al mismo tiempo los egipcios sabían que no todo el mundo que entraba en la tumba lo hacía con el objetivo de leer esos textos y a hacer que el difunto recibiera una ofrenda en el más allá. De modo que, en algunas de esas tumbas, hay también avisos del tipo «Ten cuidado. Si entras aquí para hacer el bien, estupendo, pero si entras para hacer el mal, los dioses te perseguirán, yo te perseguiré y tu vida será un verdadero desastre». En algunos casos, eso también sucede en las pirámides. Los textos de las pirámides también contienen ese tipo de maldiciones. Aunque solo sucede a partir de la pirámide de Unis, el último faraón de la V dinastía, y en todos los faraones de la VI dinastía."
José Miguel Parra
Tomada del libro El colegio invisible de Lorenzo Fernández Bueno;Laura Falcó Lara;Jesús Ortega Rubio y Josep Guijarro Triadó, página 267
"Puede haber alguna pirámide aún por descubrir en Egipto."
José Miguel Parra
"Resulta más divertido pensar que hay un misterio en cómo se construyeron, pero hay 110 pirámides en Egipto y todas son diferentes. Las más grandes son las de Guiza, pero tenemos pirámides del Reino Medio que están construidas con ladrillos. Eso no tiene ningún misterio."
José Miguel Parra
"Sí hay maldiciones, pero no como la supuesta maldición de Tutankamón. Las tumbas egipcias están hechas para ser vistas. El muerto no está allí, sino por debajo, en un pozo. Hay relieves y textos, sobre todo en la cámara funeraria. Como los egipcios creían que todo lo que se leía cobraba vida, cuando leían la lista de ofrendas, pensaban que se las daban al difunto. Al mismo tiempo se sabe que las tumbas se robaban. De ahí que también haya llamadas de advertencia a los que pasan, pero no es una maldición en plan "dentro de 4.000 años vendrán a esta tumba y morirán en horribles sufrimientos". Es ridículo. Hace no muchos años un epidemiólogo, M.R. Nelson, estudió los fallecidos por la supuesta maldición de Tutankamón como si fueran una epidemia. Hubo 44 personas que participaron en el descubrimiento de la tumba, la apertura y el desvendado de la momia. Según los libros de los propagadores de la supuesta maldición, 25 de ellos murieron. La edad media a la que fallecieron era de 70 años y su muerte tuvo lugar una media de 28,9 años después del descubrimiento. Ni Howard Carter ni lady Evelyn, la hija de Lord Carnarvon, que participó en todos los pasos, fueron alcanzados por esta supuesta maldición. Esta última murió octogenaria en 1980. Y si investigas las muertes, no fallecieron como se cuenta. Cuando lo estudias, todo se derrumba como si fuera un azucarillo."
José Miguel Parra