DAVID MILN SMITH & SANDRA LEICESTER
ABRAZA AL MONSTRUO
Gaia Ediciones, 1997, Madrid


Mi definición de la aventura pura es: cuando el resultado es desconocido y sucede lo inesperado.




Vivimos tiempos muy acelerados que exigen maneras de vivir y de relacionarnos que no pudo imaginar jamás ni el más sabio de los filósofos. Es posible que la tecnología nos esté volviendo más listos en lo intelectual, pero ¿quién de entre nosotros afirmaría que somos más felices y estamos más sanos? Los indicadores sociales de modos de vida y de enfermedades indican que los sentimientos de fragmentación, de aislamiento, de pérdida de control y de conflicto están en aumento, a pesar de que estamos mejor educados y de que disfrutamos de más comodidades materiales que nunca. ¿Qué pasa aquí?
No podemos llegar a ser aquello a lo que estamos destinados si nos quedamos en quienes somos y en lo que somos. Esto es, a la vez, un desafío de la evolución y una paradoja del cambio. Aprender a controlar el cambio supone que aprendamos también a dominarnos a nosotros mismos. Es posible que nuestros máximos destinos, individuales y colectivos, estén conformados por nuestra capacidad para tomar decisiones sanas, valerosas y sabias. Resulta que todo trabajo es un trabajo personal. La calidad del conocimiento que aportamos a nuestras vidas diarias es mucho más importante que lo que hemos conocido nunca hasta ahora.

Pág. 22-23


Hacer caso omiso de nuestros espíritus creativos o descuidarlos lleva aparejado un precio alto, pues afecta profundamente a nuestra visión de lo que es posible en la vida. Cuando no hacemos uso de nuestros recursos creativos, tendemos a confiar en que otras personas nos faciliten las soluciones. En vez de encontrar soluciones dentro de nosotros mismos, esperamos que otra persona sea la autoridad. Por fin, dejamos de hacernos preguntas de todo tipo, lo que representa la muerte segura de nuestros antiguos espíritus dispuestos y aventureros. Es especialmente difícil prestar atención a esto en una era de la información en la que abundan los expertos y las autoridades. El impulso creativo es como una llama piloto que alimenta en nuestro interior otra llama que se vuelve más brillante, más cálida y más importante cuando se le presta atención. No basta con sólo pensar en pasar a la acción. Y tampoco tiene tanta importancia juzgar el resultado. ¿Qué importancia tiene que no te vuelvas una estrella, o rico, o famoso? ¿O que tus dibujos al carboncillo no ganen un premio cuando los presentes en una exposición colectiva? Mantente en contacto con el proceso de la creación, no con su resultado.

Pág. 106


Cuando empezamos a sentirnos ahogados por el status quo de nuestras vidas, cuando nuestra imaginación está dormida y embotada, cuando se ha introducido el escepticismo en nuestros puntos de vista, entonces es que ha llegado el momento de emprender una búsqueda general de alguien que nos impulse hacia nuevos niveles de realización y de servicio.

Pág. 108


"Vivir de una manera no censurada en absoluto, ser tú mismo en todos los momentos, requiere atención, disciplina y mantenerte en contacto con tu corazón. También exige un poco de valor, algo de habilidad y bastante práctica, sobre todo en nuestras relaciones con los más allegados a nosotros en las que las cosas se dan por supuestas, las palabras se callan y se deja a los corazones que se las arreglen solos.

Pág. 130


A lo largo de los momentos culminantes y bajos que contribuyen a la manifestación de nuestras vidas (nuestros logros profesionales, nuestro despliegue espiritual, nuestro florecimiento como personas), cada uno de nosotros podemos volver la vista atrás y encontrar, quizás, a alguna persona que estaba detrás de nosotros cuando llegamos a una encrucijada, confusos, mal preparados o incapaces de reconocer que el momento era crucial. Estas personas, compañeros de viaje sin duda, pueden seguir enseñándonos, con su presencia en nuestros corazones, que nunca estamos solos. Podemos recuperar en cualquier momento el recuerdo de cómo nos vino la ayuda y de la importancia que tuvo. De cómo, cuando surgió una brecha en nuestra conciencia, el posible adelanto se alcanzó contando precisamente con lo que se necesitaba en el momento preciso en que hacía falta. Esta ayuda y este apoyo es algo que nos prestamos mutuamente, muchas veces sin saberlo. Quizás sea posible multiplicar la velocidad y la magnitud de lo que parece ser un fenómeno natural de nuestra humanidad. Si podemos aprender a abrirnos a la posibilidad (a la probabilidad, incluso) de que la ayuda necesaria está siempre disponible, ¿quién sabe de qué otra cosa podemos ser capaces?.

Pág. 140-141


Prácticamente todo lo que hay en la vida se reduce a la motivación.






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