EL PERDON Y OTROS ACTOS DE AMOR



“Aceptar nuestra falibilidad y observar nuestros errores, no para desacreditarnos sino para aprender de ellos; escuchar los puntos de vista de otras personas respecto a las experiencias que hemos compartido, con curiosidad por lo que podamos aprender de ellas; observar los patrones de nuestras reacciones y acciones, para descubrir lo que nos revelan; examinando con cuidado las diferencias entre nuestras esperanzas o convicciones más preciadas, y los hechos que se presentan ante nosotros; desarrollar la intención de permanecer tan firmemente como nos sea posible en el momento presente, en lugar de apresurarnos a retroceder hacia el pasado o a avanzar hacia el futuro: todo esto nos respalda en nuestras intentos de encontrar y enfrentar nuestra verdad.”
No es tarea fácil. Nada de eso se puede llevar a cabo sin reflexionar. Nada de eso puede realizarse sin restricciones. Pero únicamente negándonos a aceptar algo inferior a la verdad podremos lograr sanarnos y “abrirnos a la vida tal y como es”. Y solamente abandonando nuestras “nociones preconcebidas” -por más preciadas y difíciles de obtener que hayan sido- podremos adaptar nuestras ilusiones subjetivas a la realidad objetiva, lograr la unión de nuestros mundos exterior e interior y concluir la infeliz batalla que suele tener lugar dentro de nuestras propias mentes.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 166-167. Ed. Edaf





“Cuanto más saludables, psicológicamente, son las personas, tanto más fácil es para ellos aceptar que, debido a que la vida misma es dinámica, el cambio es inevitable.”

Stephanie Dowrick



“Día tras día y para todos nosotros, el vivir una vida de trabajo, los amigos, el cuidado de los hijos o de los padres ancianos, el hacerse más viejo, el caer enfermo, el perder a un ser amado, el buscar a Dios, el reír, el llorar, el hacer el amor, el preparar la comida, el tener pareja, el no tenerla, el sentirse apreciados, el sentirse incomprendidos, el dormir, el despertar, el soportar, el trastornarse, el reponerse, el aprender algo nuevo, el preocuparse, el alegrarse, el sacar la basura, el prepararse para morir, el hacer lo mejor que podemos, en toda esa larga serie de cosas que se extiende desde nuestro nacimiento hasta la muerte, no es heroísmo sino valor lo que necesitamos (...) El valor es lo que necesitamos para ser plenamente humanos. Es lo que nos impulsa a sobrevivir en la travesía diaria entre lo conocido y lo desconocido; para habérnoslas con lo inevitable; para establecer distinciones válidas entre lo que puede cambiarse y lo que no se puede. Es lo que nos permitirá penetrar en nuestros infiernos particulares. Es lo que nos proporcionará fortaleza y gracia para resurgir y seguir encontrando la vida digna de ser vivida.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 74. Ed. Edaf


“El darse libremente no comienza ni termia con el acto de dar. Lo que precede a este acto es, al menos, cierto tipo de conciencia de que la generosidad es una expresión del amor. Y lo que debe seguir es una sensación de dejar pasar ese acto, desprenderse de él y avanzar hacia el momento siguiente, no quedarse esperando una recompensa, un premio, ni siquiera las gracias, como es habitual.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 189. Ed. Edaf


“El perdón, como acto e amor, se siente, no se alcanza. Puede ser otorgado, pero no siempre recibido. No puede ser concedido como un triunfo sobre otra persona, o como el medio de asegurarse su humillación o consentimiento.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 269. Ed. Edaf


“El valor se halla tan libremente disponible para todos y cada uno de nosotros como el sonido de las olas que rompen en el mar, o el viento en los altos árboles, el canto de los pájaros o la risa de los hombres.”

Stephanie Dowrick


“Incluso las personas intelectualmente más sofisticadas sufren de secuelas de un pensamiento mágico que les dice que pueden evitar una realidad desagradable siempre que su mente no la admita plenamente. Si no le presto atención a que mi marido raramente viene a casa para comer... Si no presto atención al hecho de ese extraño bulto que hay en mi ingle... Si paso por alto la reorganización laboral que recortará en dos tercios el equipo ejecutivo... Si me repito frecuentemente que mis ancianos padres pueden continuar viviendo independientemente... Estos son algunos de los modos habituales que tenemos para intentar mantener la realidad bajo control; pero, desgraciadamente, también resultan marcadamente ineficaces. La realidad tienen también sus mecanismos para insertarse en nuestro ser. Cuando la ignoramos, llevándola al dominio de lo inconsciente, entonces puede suceder que se haga notar incluso más drásticamente; quizá a través de dolores físicos, depresiones y ansiedades, un fallo en nuestra salud física o mental, o de una acumulación de estrés emocional, puesto que el esfuerzo de negar la realidad requiere un gran trabajo.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 52. Ed. Edaf

“La generosidad implica normalmente el escuchar y el “entrar en sintonía” en lugar de imponerse, y una voluntad de penetrar en la vida de otro ser humano como huésped honorable y respetuoso, y no como un invasor o un colonizador.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 186. Ed. Edaf


“Sólo arriesgándose a conocer lo complejo y contradictorio que es usted, y asumiendo todo cuanto esa persona es, podrá descubrir su capacidad para tolerar sus propios deseos, necesidades y emociones molestos, y que no necesita seguir creyendo que éstos suceden en cualquier otra parte. Este proceso se denomina “re apropiarse de sus proyecciones”. Probablemente involucre aprender algunas verdades desagradables acerca de sí mismo, aunque, por extraño que esto parezca, hace que deje de sentir que su vida es precaria, sino más segura; debido, en parte, a que de ese modo se encuentra más firmemente basada en los cimientos de la verdad, en lugar de estarlo en la débil base del querer ser. Al saber quién es usted, al sentirse responsable por lo que es y por lo que hace, le será posible tolerar la mayor parte de lo que la vida le depare, y sentir cada vez más confianza en lo que es capaz de hacer.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 237. Ed. Edaf


“Una de las particularidades más graciosas de la vida es que incluso el más interiorizador de nosotros encuentra extremadamente difícil discernir qué sucesos de nuestra vida se han podido convertir en nuestras mayores bendiciones. A veces suceden cosas maravillosas y se quedan en nada. Otras veces nos suceden cosas que daríamos lo que fuera por evitarlas, y sin embargo tienen el potencial de retarnos y de hacernos profundizar, puliéndonos para convertirnos en esa persona que necesitamos ser; para incrementar nuestro conocimiento de la vida y nuestro auténtico placer en ello.”

Stephanie Dowrick
El perdón y otros actos de amor, pág. 45. Ed. Edaf


1999 Editorial Edaf, S. A. Jorge Juan, 30 Madrid




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