“A los puros todas las cosas les parecen puras.”

San Pablo


"Ahora no vemos sino a través de un cristal oscuro, pero luego veremos cara a cara."

San Pablo


"Aquel de vosotros que tenga queja de otro se guarda de invocar la ley ante el injusto... ¿por qué no os resignáis antes de ser defraudados?"

San Pablo



"Es muy duro dar patadas contra el aguijón."

San Pablo


“Hay un cuerpo material y un cuerpo espiritual; cuando esto se sepa, ¿qué será, ¡oh Muerte!, de tu mentira?”


San Pablo
Corintios, 1, XIV




"Hermanos, no quiero que ignoréis este misterio, a fin de que no presumáis de vosotros mismos: el endurecimiento de una parte de Israel durará hasta que haya entrado la totalidad de las naciones. Y entonces todo Israel será salvado (Rom 11, 25-26)."

San Pablo


"La muerte está absorbida en la victoria. ¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón?"

San Pablo
I Corintios


"La tribulación conduce a la paciencia, y la paciencia a la experiencia, y la experiencia a la esperanza".

San Pablo


“Mantenéos firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad y revestidos con la coraza de la justicia.”

San Pablo


"Mas alguno preguntará: —¿Cómo resucitarán los muertos? ¿En qué calidad o clase de cuerpo han ellos de resucitar? —y yo les respondo: —¡Necio!; lo que tú siembres, si antes no muere, no te reivindicará. Así, cuando siembras, no siembras ya hecha la planta que ha de ser, sino el grano desnudo, que es semilla. Mas Dios ha dado su propio cuerpo a cada una de las semillas, pues que no toda carne es una misma carne: una es la de los hombres, otra la de las aves y otra la de los peces. Hay, pues, cuerpos celestiales y cuerpos terrestres, y sus glorias respectivas son muy distintas. Una, en efecto, es la claridad del sol, otra la de la luna y otra la de las estrellas, y aun hay diferencia de estrella a estrella en la claridad. Así también la resurrección de los muertos: se siembra en corrupción, y se resucitará en incorruptibilidad; se es sembrado en vileza, y se resucitará en gloria; se es sembrado en flaqueza, y se resucitará en vigor; se es sembrado cuerpo animal, y se resucitará cuerpo espiritual; porque si hay cuerpo animal, lo hay también espiritual. Por eso está escrito: “Fue hecho el Adán primero en el alma viviente, y el postrer Adán en espíritu vivificante. El primer hombre hecho de la tierra es terreno y el segundo hombre, del cielo, es celestial; porque cual es la tierra, así es lo terreno, y cual es el cielo, así es lo celestial. Trajimos, pues, lo terreno, y llevaremos la imagen de lo celestial… He aquí que os digo un misterio: Todos ciertamente resucitaremos, mas no todos seremos mudados. En un abrir y cerrar de ojos sonará la final trompeta: los muertos resucitarán incorruptibles, y nosotros seremos mudados, porque es necesario que esto que es corruptible se vista de incorruptibilidad, y esto que es inmortal se vista de inmortalidad, y cuando esto que es inmortal fuese revestido de inmortalidad, se cumplirá la palabra que está escrita: “Tragada ha sido la muerte en la victoria. ¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde está, oh intrusa, tu aguijón?"



San Pablo


"No comprendo mis propios actos... Puedo querer lo que está bien, pero no puedo hacerlo. Pues no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero es lo que hago. Ahora bien, si hago lo que no quiero, ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que mora en mí."

San Pablo



“No hay poder que no venga de Dios.”

San Pablo


“No te damos una sierva, sino una compañera.”

San Pablo


"Nuestra lucha no es contra la carne ni contra la sangre, sino contra los Principados, contra las Potestades, contra los Dominadores de este mundo tenebroso, contra los Espíritus del mal que están en las alturas." 

San Pablo
Ef. 6,12


"Pero una cosa hago: olvido lo que dejé atrás y me lanzo a lo que está por delante."

San Pablo


"¿Qué diremos pues? ¿Es pecado la Ley? ¡De ninguna manera! Pero yo nunca habría conocido el pecado sin la Ley; pues no hubiera reconocido la codicia si la Ley no dijera: «No codiciarás». Mas habiendo sido revelado el pecado por medio del mandamiento, activo en todo tipo de deseos, pues sin la Ley el pecado está muerto [es decir, es inconsciente[20]]. Yo vivía sin Ley [en mi inocencia]; pero el mandamiento revivió el pecado y morí y descubrí que el mandamiento de vida portaba consigo la muerte. El pecado me sedujo por medio del mandamiento y me mató. Es por esa razón que la Ley es santa y el precepto santo, justo y bueno. ¿Acaso, entonces lo bueno es [la causa de] mi muerte? ¡De ninguna manera! Porque el pecado, para mostrarse pecado, me dio la muerte a través de lo bueno [el mandamiento]; un pecado que sólo puede tomarse sobremanera evidente por medio del mandamiento. Porque sabemos que la Ley es espiritual, aunque yo soy carnal y vendido al pecado. Porque no sé ni entiendo lo que hago. Ni lo que quiero hago, y aun hago lo que odio. Si, pues, hago lo que no quiero, reconozco [al menos] que la Ley es buena. Pero entonces ya no soy yo el que actúa, sino el pecado que mora en mí. Pues sé que nada bueno mora en mí, es decir, en mi carne. Porque el querer el bien está en mí, pero no así el hacerlo. No hago el bien que quiero sino el mal que no quiero. Pero si hago lo que no quiero, no soy yo quien lo hace, sino el pecado que habita en mí. Por consiguiente, tengo en mí esta ley: que al querer hacer el bien, es el mal el que está en mí; porque me deleito en la Ley de Dios según el hombre interior, pero siento otra ley en mis miembros que repugna a la ley de mi espíritu y me encadena a la ley del pecado que está en mis miembros. ¡Desdichado de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?"

San Pablo
Epístola a los romanos


"Todas las cosas son limpias para los hombres limpios."

San Pablo


"Todo aquello que sea verdadero, honorable, correcto, puro, adorable, todo aquello que goce de buena reputación, todo aquello que sea excelente y loable, debe ser ocasión de regocijo para tu mente."

San Pablo


“Veo los peligros de la vida presente; peligro en el mar, peligro en la tierra y peligro en los falsos hermanos.”

San Pablo

No hay comentarios: