He corrido hacia el mar...
He corrido hacia el mar, desesperado,
urgido por espasmos ancestrales
sin encontrar sus brazos fraternales
que fueron el vitral de mi pasado.
Quise hundirme en las aguas, impulsado
por intensos delirios demenciales
para unir a sus manos espectrales
mi corazón de bardo flagelado.
Arrastrando mi efigie vacilante,
mi proceso de lóbrego ambulante,
instinto funerario que me acosa,
rodé sobre el calvario de mi suerte.
Hoy quisiera fundirme con su muerte.
Si fui cuna en ayer, quiero ser fosa.
Rodolfo Virgilio Leiro
No me detengo (por la Paz)
¡No mi amiga! ¡Jamás! No me detengo
aunque lento devore mis senderos,
voy delante de antiguos compañeros
con el mismo fervor en que mantengo
esta intensa pasión, la que devengo
para esculpir la paz en los maderos,
en la roca, en la mar, en los alberos
que son huertos de luz cuando yo vengo!
Desde la nube azul donde provengo,
desde el asa mitral donde sostengo
esta tesis de un mundo sin frontera,
os invito a mi barca de salterio.
¡Lograremos la paz, sin improperio!
¡Es un mundo de madres el que espera!
Rodolfo Virgilio Leiro
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