Con Lispector aprendí
que una cucaracha puede
ser una puerta al conocimiento.

Ahora la veo, tan pequeña
y marrón, irse por el desagüe
y no puedo dejar de pensar
en lo desagradable y breve
que es nadar
a veces, por esas aguas
interiores.

Gabby De Cicco


"Creo que hay que escribir con lo que se tiene y con lo que se puede, y siempre estar alerta y cuestionar los cánones literarios: ¿quién dice que tal o cual libro está dentro del canon o afuera? Hay que tenerse confianza, y dejar que la voz vaya surgiendo. A veces, viene muy bien patear el tablero, para ver las fichas de qué juego estaban jugando. Y creo que todos los recursos sirven si te ayudan a decir lo que querés decir, en ese momento. Para mí habría como un carpe diem de los recursos poéticos. Cada unx debe encontrar el/ los recursos que le sirvan aquí y ahora, y saber que quizá para el futuro, aquellos podrían cambiar. Me parece que lo más importante es la búsqueda, y practicar una escucha atenta con nuestra voz, y saber de sus necesidades, que a veces, no nos son tan claras."

Gabby De Cicco


Cuando nos miramos en el espejo
en vez de ver oímos
un sordo resquebrajarse
de la materia

Podía oler el pus de tus heridas
Cómo supuraba tu corazón
de vieja madre encarcelada
en la estrecha cárcel de cuidar
a toda la familia

Pude oír el caer, gota a gota,
de la sangre de mi amada
Sus ojos se cruzaron con los míos
en la fría quietud del azogue hecho trizas

Y pude palpar en mi piel
cómo se abría allí donde alguna vez
la habían acariciado
Donde alguien supo depositar
sin interés, algo de amor

Y volvimos los ojos desesperados
hacia el espejo, intentando
recuperar esas imágenes de cada mañana
y no pudimos. Ya no había
mañana en esta república

Gabby De Cicco



En sombra insiste la evidencia
este jacarandá a la puerta
de la amiga.

Si desatiendo la palabra
perderé toda cuenta
o aquel hilo ganado
para volver sobre mí misma?

"Asistir a aquellas sin nadie!
también sin nadie
es abrir cauce,
instancia de la seda
disolviendo el vacío.

Gabby De Cicco


"Escribir es trabajar, sin duda alguna. No es que nos sentamos a la sombra de un sicomoro a esperar que venga la musa. Son horas, días, noches de leer, de búsquedas materiales de libros, de ver cómo comprarlos, de dónde sacarlos, de intercambios con otras personas. Cuando empecé a coordinar talleres fue porque sentí: me muero por compartir lo que sé. Obvio que por aquel momento era muy pichonx, pero mi pasión, mi deseo me llevó a abrir las puertas de mi casa y comenzar con talleres de lecturas. Es totalmente válido, y hasta diría necesario, considerarse sujetx de trabajo."

Gabby De Cicco



Estoy harta de las palabras
que se astillan en mi lengua
antes de salir
Hastiada del silencio impuesto
por el miedo

Estoy cansada de la invisibilidad,
y aún así no quiero llamar la atención
ni pasar tan desapercibida

Quiero girar sobre tu grupa
y que seamos, como antes, ríos salvajes
Quisiera poder nombrar, otra vez,
las palabras a las que desnudé de sus pudores

No fui
la primera, soy simplemente
la heredera
de las que abrieron surcos
para la siembra fecunda

Harta se escribe con H de humanidad
con muda letra de horror y holocausto
Harta es una palabra que aprendí
con la desesperación de mi paciencia:
cuando la hora
de la fuga
se me hizo, corazón adentro,
pura resistencia

Gabby De Cicco



Hay un instante en que lo puro
cambia
         quiebra su quieta razón de ser
ahí antes de la escritura: rasgo íntimo,
huella;

labriego que fecunda la tierra
y bebe tranquilo su leche
en el campo desconocido
de nadie;

apenas una luz que asegura
a su mano otra
forma de caricia.

Las acacias crecen lejos
de allí, y él mira ensimismado
el recorte de su reflejo
en la laguna.

La sudestada crece y algo muere
viniendo con el viento.

Gabriela de Cicco



"Hay una palabra básica: libertad. Leyéndola a ella, sus canciones, sus poemas, sus prosas, aprendí que se puede enunciar desde una zona que trascienda el hecho de si lo que decís cae bien o no, si tu palabra es aceptado o no, si te compran libros o no. Eso es decir de forma poética y digna. Patti es libre y me interesa reconocer en sus textos los patios de la bastardía, esa rebeldía que retumba en sus canciones y su capacidad literaria."

Gabriela de Cicco


"La soledad es donde soy. Es ese espacio donde me re-armo para crear, para pensarme, para curarme del contacto con la mierda que muchas veces es la realidad que nos rodea: lesbicidios, femicidos, travesticidios, masacres, asesinatos de defensoras de derechos humanos, la coyuntura política. Pero desde esa soledad pienso y me veo en lo colectivo, en lo político. Participo en marchas, apoyo acciones, y desde mi laburo de comunicación en una organización feminista sigo al tanto de lo que pasa en el mundo. Mis actividades colectivas pasan más por lo artístico, por lo poético, que para mí es político. Participar en lo colectivo me permite formar parte de redes amorosas, solidarias, cómplices que son las que me/nos nuestren en la diaria.
En mi soledad me prepara el espacio para leer, para escribir. Mates, sahumerios, libros por alrededor, casi como un pase rabdomántico de lecturas. Disfruto mucho cuando puedo conectarme en ese momento con el lado creativo, más íntimo."

Gabriela de Cicco


"Mi llegada al feminismo se dio de la mano de dos poetas lesbianas, Adrienne Rich y Diana Bellessi, a mediados de la década del 80. Sus poemas, sus búsquedas poéticas, en particular la realizada por Diana en su libro de poemas Eroica (1988) y en su antología de poetas norteamericanas (a las que tradujo) me abrieron una puerta para salir a jugar con la posible voz propia, para poder escribir desde mi deseo, desde mi visión del mundo. Yo me visibilizo como poeta lesbiana. En muchos de mis poemas se puede rastrear un yo poético que habla desde ese lugar. Desde mi escritura, digamos, periodísitica, bloguera, y por medio del activismo apuesto y trabajo por la visibilidad y por poder ser quien se es en libertad, intentando desmantelar el heteropatriarcado. Pero volviendo a la poesía, diría que esa marca identitaria no es lo único  que sustenta mis búsquedas poéticas."

Gabriela de Cicco


"Si hay algo que va a limitar mi escritura, mi arte, entonces no es mi revolución."

Gabriela de Cicco


"Si no hay amor, no habría poesía. Y es que unx aprende que la revolución no es solitaria. Para hacer la revolución tenés que confiar en quienes tenés al lado. Rich habla de las “revoluciones” con erre minúscula, las primeras, ésas que te pasan a vos y que luego empezás a compartir. No podés ir solx por el mundo. La escritura tiene esa instancia de soledad pero también tiene el encuentro con otrxs como correlato. Los feminismos nos enseñaron a tener el corazón empático. Intento no dejar de escuchar ese latido."

Gabriela de Cicco


Vengo a reclamar mi sangre. Las palabras
que pienso usar de ahora en más la necesitan.
Aliento largo como ese vuelo que me llevó
a ver otras realidades, mezcla de ritos
y sueños amamantados con lecturas.

Mi sangre es un conjunto de aquello que puedo ser
sin esconderme. Todo lo que puedo dar
desde mi cabeza hasta mi sexo.

Ideas que fluyan y sirvan para dar sentido
a otras ideas con las que nos estábamos buscando.

Salmo de las posibilidades.
Salmo de las que queremos romper las cadenas.
De las que queremos tener con qué alimentarnos
y alimentar a quienes amamos.

La farmacia, mercantil, cierra sus puertas.
La fábrica, vaciada, cierra sus puertas.

y la “f” de nuestra fe se esfuma
con cada índice de mortalidad
que conocemos.

Gabriela de Cicco





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