"Me aplicaron anestesia local y vi cómo me cortaban el vientre con un serrucho, parecía que iban a matar a una vaca. Había dos médicos y dos enfermeras, y yo solo quería correr, pero me amarraron de los brazos y las piernas. Después ya solo recuerdo que me desperté en una sala y, cuando reaccioné a base de cachetazos en la cara, solo pude llorar. Al día siguiente nos volvieron a subir como animales en la misma camioneta. Éramos unas 20 mujeres y el dolor era insoportable, todas gritábamos."

Gloria Basilio
Superviviente de las esterilizaciones forzadas en Perú 


"¿Pero qué más pruebas quieren?"

Gloria Basilio


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