"A ti de cómo es la masa de ese espíritu y de dónde se forma voy a seguir dándote razón con mis palabras.
Para empezar, digo que es bien tenue y que está hecho y formado de cuerpos más que menudos. Basta que luego prestes atención para que puedas muy bien comprender que ello es así. Nada parece producirse de una manera tan rápida como lo que la mente por su cuenta decide e inicia; luego el espíritu se agita mucho más rápidamente que cualquiera de las otras cosas que ante nuestros ojos y alcance presenta su ser; ahora bien, lo que es móvil en grado tan superlativo debe estar hecho de semillas más que redondeadas y más que menudas, para que al recibir un pequeño impulso puedan moverse. Se mueve, en efecto, el agua y con un impulso pequeño corre porque, claro es, está compuesta de formas rodantes y ligeras; en cambio la naturaleza de la miel es más consistente y su líquido más perezoso y más lento su manejo (pues entre sí se traba más todo el conjunto de su materia), debido sin duda a que no consta de cuerpos ni tan lisos ni tan tenues y redondos; tienes, en efecto, que una brisa somera y leve puede forzar que entero se desparrame un buen montón de adormidera; en cambio el cierzo sopla contra una pila de piedras y en ella nada puede. Y es que los cuerpos cuanto más pequeños y lisos son, de mayor movilidad disfrutan; y, al contrario cualesquiera que resulten ser de mucho mayor peso y más rugosos, son por ahí ellos más estables.
Ahora, pues, ya que hemos hallado que la naturaleza del espíritu es extremadamente móvil, es forzoso que esté formada de cuerpos sin duda pequeños, lisos y redondos. El conocimiento de tal cosa, buen amigo, te resultará provechoso en muchos puntos y se mostrará oportuno.
Otra cosa también llega a explicar la naturaleza del espíritu, de qué trama tan fina está hecho y en qué sitio tan pequeño se encierra si acaso se apelotona, y es que en cuanto se apodera del hombre el sueño tranquilo de la muerte y se retira la sustancia del espíritu y el alma, nada allí puedes descubrir que ni en la apariencia ni en la masa del entero cuerpo haya sufrido menoscabo: la muerte preserva todo salvo la sensibilidad de la vida y el vaho caliente."
Lucrecio
De Rerum Natura
“Así en vano se afana el hombre siempre
y de continuo se atormenta en vano,
y en cuidados superfluos gasta el tiempo,
porque no pone límite al deseo,
y porque no conoce hasta qué punto
el placer verdadero va creciendo.”
Lucrecio
"Como el sediento que en el sueño quiere beber y agota formas de agua que no lo sacian y perece abrasado por la sed en el medio de un río: así Venus engaña a los amantes con simulacros, y la vista de un cuerpo no les da hartura, y nada pueden desprender o guardar, aunque las manos indecisas y mutuas recorran todo el cuerpo. Al fin, cuando en los cuerpos hay presagio de dichas y Venus está a punto de sembrar los campos de la mujer, los amantes se aprietan con ansiedad, diente amoroso contra diente; del todo en vano, ya que no alcanzan a perderse en el otro ni a ser un mismo ser."
Lucrecio
"Como tiemblan los niños y lo temen todo en la ciega oscuridad, así nosotros en la luz tememos a veces lo que no es más temible, que lo que los niños en la oscuridad contemplan con terror… "
"De la fuente del placer brota cierta amargura que, en un lecho
de flores, nos angustia."
Lucrecio
Caro
"Demasiada religión puede fomentar el mal".
Lucrecio
“Desde la eternidad viven en lucha con el mismo poder ambos
principios: victorias y derrotas continuadas de unos y otros alternan...Juntos
andan.”
Lucrecio
“El amor es un producto del hábito.”
Lucrecio
"El tiempo cambia el aspecto del mundo, y un nuevo orden de cosas
acontecen al principio; ningún ser se mantiene siempre igual; todo atestigua
las vicisitudes, las revoluciones y las metamorfosis continuas de la
naturaleza."
Lucrecio
“El universo se renueva siempre, y se prestan la vida los mortales;
crecen unas especies y se acaban: y en poco tiempo las generaciones se mudan y
la antorcha de la vida cual ágiles cursores se transmiten.”
Lucrecio
"En el caso de que haya dioses, no se ocupan para nada de los hombres."
"En el caso de que haya dioses, no se ocupan para nada de los hombres."
Lucrecio
"En momentos de crisis es cuando hay que juzgar
a un hombre, y la adversidad nos da a conocer su carácter; pues, entonces, son
sinceras las voces que brotan del fondo de su pecho; se arranca la máscara y
queda la realidad."
Lucrecio Caro
"Es preciso confesar que hay otras regiones del espacio, otras tierras distintas de la nuestra, y razas de hombres diferentes, y otras especies salvajes."
Lucrecio Caro
De Rerum Natura
Tomado del libro de Louis Pauwels & Jacques Bergier, La rebelión de los brujos, página 122
Lucrecio Caro
De Rerum Natura
Tomado del libro de Louis Pauwels & Jacques Bergier, La rebelión de los brujos, página 122
“Es una gran riqueza para el hombre vivir parcamente y con ánimo,
porque así no tendrá jamás penuria del poco.”
Lucrecio
“(...) Eternamente los principios giran: un efecto vulgar puede servirnos
de modelo y de guía en cosas grandes.”
Lucrecio
"Hay otros mundos en otras regiones del universo, y razas diferentes de humanos y de especies animales."
Lucrecio
Religio peperit scelerosa atque impia facta
Lucrecio
"La tierra, en su novedad, empezó por hacer crecer las hierbas y los arbustos, para crear luego las especies vivas, que nacieron entonces en gran número, de mil maneras, bajo aspectos diversos."
Lucrecio
"Hay otros mundos en otras regiones del universo, y razas diferentes de humanos y de especies animales."
Lucrecio
De la naturaleza de las cosas
"La religión ha parido empresas pérfidas e impías."
Lucrecio
"La tierra, en su novedad, empezó por hacer crecer las hierbas y los arbustos, para crear luego las especies vivas, que nacieron entonces en gran número, de mil maneras, bajo aspectos diversos."
Lucrecio
Tomada del libro Dios-la-ciencia-las-pruebas-el-albor-de-una-revolucion de Michel-Yves Bolloré y Olivier Bonnassies, página 213
"Lo que a unos alimenta es veneno para
otros."
Lucrecio Caro
"Locos, ¡por qué teméis lo que nunca podrá afligiros? Mientras vivís, la muerte está ausente, y cuando estáis muertos, lo estáis hasta el punto de que no podéis saberlo y lamentaros por ello. estaréis tan tranquilos como antes de nacer. ¿O es que tal vez os acongoja el pueril temor de tener frío bajo la tierra, de sentiros ahogados por su peso? Pero vosotros no estaréis allí; los átomos, inconscientes de vuestra alma, avanzarán muy lejos, en algún rayo de sol, y no estaréis en parte alguna. No existiréis en absoluto. La muerte es, por definición, un estado que excluye la experiencia. Si la teméis, estáis temiendo a una mera palabra."
Lucrecio
De la naturaleza de las cosas
“Los átomos que cruzan el vacío sin peligro de obstáculos externos.
Forman ellos un solo y mismo todo.”
Lucrecio
“Nada es tan grande, ni tan admirable en un principio, que después no deje de sorprender.”
Lucrecio
“Nada es tan grande, ni tan admirable en un principio, que después no deje de sorprender.”
Lucrecio
“¿No veis que hasta las piedras ceden al poder del tiempo, que las
torres más altas llegan a caer y que las rocas se desmoronan? Los templos y las
estatuas de los dioses se convierten en ruinas y ni siquiera los mismos dioses
pueden librarse del Destino.”
Lucrecio
“Nos causa júbilo observar los males de los que estamos exentos.”
Lucrecio
Lucrecio
"Pero si tu deseas siempre lo que no tienes, y desprecias lo que tienes, tu vida se ha desarrollado, en consecuencia, sin plenitud y sin encanto; y de repente la muerte se halla a los pies de tu cama sin que puedas sentirte listo para partir, contento y satisfecho."
Lucrecio
"Por lo menos diremos precisados que el cielo, tierra, mar, el sol y luna, y todo cuanto existe no son cuerpos e individuos únicos aislados; antes llegan a ser innumerables."
Lucrecio
De la naturaleza de las cosas
“¿Por qué no salir de esta vida como sale de un banquete el convidado
harto?”
Lucrecio
"Si alguno decide llamar Neptuno al mar, y Ceres al trigo, y aplicar inapropiadamente el nombre de Baco en vez de darle al licor su nombre propio, que así sea; y que llame al mundo 'Madre de los Dioses', siempre que tenga cuidado de no infestar su mente con supersticiones vulgares."
"Si alguno decide llamar Neptuno al mar, y Ceres al trigo, y aplicar inapropiadamente el nombre de Baco en vez de darle al licor su nombre propio, que así sea; y que llame al mundo 'Madre de los Dioses', siempre que tenga cuidado de no infestar su mente con supersticiones vulgares."
“Si el alma es de inmortal naturaleza, si al nacer en el cuerpo se
insinúa, ¿Cómo es que no podemos acordarnos de la vida pasada, ni tenemos de
los antiguos hechos resto alguno?”
Lucrecio
“Si los sentidos son veraces, toda nuestra razón es falsa.”
Lucrecio
“Siempre nos parece que el mayor bien es el que nos falta; si logramos
alcanzarlo, suspiraremos por otro bien, con el mismo ardor.”
Lucrecio
“Tanto es así que una fuerza secreta arrasa todo poder humano y se complace en pisotear las crueles hachas y los nobles pabellones consulares.”
Lucrecio
“Tanto es así que una fuerza secreta arrasa todo poder humano y se complace en pisotear las crueles hachas y los nobles pabellones consulares.”
Lucrecio
"Todo lo que tu naturaleza anhela es un cuerpo libre de dolor,
Y, para disfrutar del placer, una mente alejada del miedo y de la preocupación
Y así vemos que las necesidades del cuerpo son a fin de cuentas pocas
Solo lo mínimo para mantener el sufrimiento alejado..."
Lucrecio
“Vemos cuán pocas cosas son precisas
para ahuyentar del cuerpo los dolores,
y bañarle en delicias abundantes,
que en la naturaleza economiza.
Si no se ven magníficas estatuas,
de cuyas diestras juveniles cuelguen
lámparas encendidas por las salas
que nocturnos banquetes iluminan,
ni el palacio con plata resplandece,
ni reluce con oro, ni retumba
el artesón dorado con liras;
se desquitan, no obstante, allá tendidos
en tierna grama, cerca de un arroyo,
de algún árbol copudo sombreados,
a cuyo pie disfrutan los placeres
que cuestan poco; señaladamente
si el tiempo ríe y primavera esparce
flores en la verdura de los campos.”
Lucrecio
"Y así la fuerza viva de su mente
ha roto todas las barreras,
y ha ido mucho más lejos
de los duros muros del mundo,
y con la mente y el espíritu
ha atravesado el universo infinito."
Lucrecio
“Ya que tú sola eres la que gobiernas la naturaleza de las cosas y sin
ti nada emerge a las resplandecientes riberas de la luz y nada se pone contento
ni amable, deseo que tú seas mi aliada para escribir estos versos, que yo
intento componer acerca de la naturaleza de las cosas.”
Lucrecio