Robert Bauval

Citas a los libros de Robert Bauval:




"En el 10450 a. C. —y sólo en esa fecha— hallamos que el esquema de las pirámides en el suelo refleja de forma perfecta el esquema de las estrellas en el cielo. Me refiero a que es una copia perfecta, impecable, y no se puede tratar de una coincidencia porque refleja dos hechos celestes insólitos que ocurrieron por aquella época. En primer lugar, y por pura casualidad, la Vía Láctea, según era visible desde Gizeh en el 10450 a. C., era una copia exacta del curso meridional del valle del Nilo; segundo, al oeste de la Vía Láctea, las tres estrellas del cinturón de Orión habían alcanzado su altitud más baja en el ciclo precesional, y Al Nitak, la estrella representada por la Gran Pirámide, atravesaba el meridiano a 11° 08′."

Robert Bauval
Tomada del libro de Graham Hancock, Las huellas de los dioses, página 516



"¿Era la necrópolis de Gizeh, y específicamente, la Gran Pirámide y sus pozos, un gran marcador de tiempo, una especie de reloj estelar que tenía la misión de señalar las épocas de Osiris y, sobre todo, su Primera Vez?"




Robert Bauval
El misterio de Orión
Tomado del libro de Colin Wilson El Mensaje Oculto de La Esfinge, página 139


"—¡La máquina son las pirámides!—. En realidad, toda la necrópolis de Gizeh. Fíjate en nosotros. ¿Qué es lo que hacemos? Formular preguntas. Aquí estamos, a una hora intempestiva, tiritando de frío mientras contemplamos el amanecer y lanzamos una pregunta tras otra, tal como estaba programado que hiciéramos. Nos encontramos en manos de unos magos, y los magos saben que por medio de símbolos (unos símbolos adecuados, unas preguntas adecuadas) pueden conseguir que te inicies, siempre y cuando seas una persona curiosa y te guste formular preguntas. En tal caso, en cuanto comiences a lanzar preguntas sobre las pirámides empezarás a obtener una serie de respuestas que te conducirán a nuevas preguntas y a más respuestas, hasta que te inicies…"

Robert Bauval
Tomada del libro de Graham Hancock, Las huellas de los dioses, página 526


"Lo que contemplamos en la meseta de Gizeh es la configuración exacta de las estrellas del cinturón de Orión en el 10450 a. C., como si un maestro arquitecto que llegara aquí en esa época hubiera decidido trazar un inmenso mapa en el suelo utilizando una mezcla de elementos naturales y artificiales. Empleó el curso meridional del valle del Nilo para representar la Vía Láctea, tal como aparecía entonces; construyó tres pirámides que representaban las tres estrellas, justo como aparecían entonces; y colocó las tres pirámides exactamente en la misma relación con el valle del Nilo que guardaban las tres estrellas con la Vía Láctea. Fue una forma muy ingeniosa, muy ambiciosa, muy exacta de marcar una época, de inmortalizar, por así decirlo, una determinada fecha en una obra arquitectónica…"

Robert Bauval
Tomada del libro de Graham Hancock, Las huellas de los dioses, página 517


"—No puede ser una coincidencia que una alineación tan perfecta de lo terrestre y lo celestial se produjera en torno al 10450 a. C.. De hecho, el problema de si se trata o no de una coincidencia, para mí no existe. Lo que me intriga es: ¿por qué? ¿Por qué lo hicieron? ¿Por qué se esforzaron tanto en subrayar algo con respecto al undécimo milenio antes de nuestra era? —Evidentemente, porque fue una época importante para ellos —terció Santha. —Debió de ser muy, pero que muy importante para ellos. No haces una cosa así, me refiero a crear unos colosales marcadores precesionales como éstos, tallar una Esfinge, levantar tres pirámides que suman un total de casi quince millones de toneladas, a menos que tengas una razón verdaderamente importante. De modo que la pregunta es: ¿Cuál era esa razón? Nos obligan a formular esta pregunta al subrayar de forma tan potente e imperativa la fecha del 10450 a. C. Es una pregunta obligada. Quieren atraer nuestra atención sobre esa fecha y nosotros debemos preguntarnos por qué."

Robert Bauval
Tomada del libro de Graham Hancock, Las huellas de los dioses, página 531