"Antes había una persecución y represión de la legua que hacía que solo hubiera una capa encima: el castellano. El catalán era una lengua tendente en la folklorización en el sentido más literal de la palabra, como lengua literaria y de cultura no existía. Después, como cuando llega la democracia recupera territorio y tiene una voz oficial y literatura y medios de comunicación, lo subvierte todo. Esta subversión el Estado no la puede tolerar fácilmente. Hay una tolerancia con el idioma porque sin concesiones de mala gana de este tipo, la Transición no se hubiera podido hacer, pero con el paso del tiempo evidentemente eso ha ido cambiando. La tercera capa es que políticamente hablando, no hemos triunfado con el Procés a ganar políticamente todo el terreno que habíamos abierto durante el franquismo, la transición e incluso el pujolismo. Llegará otro momento, estoy seguro."
Julià de Jòdar
"Hay un intento deliberado o una necesidad de expresarte a través del mundo que has vivido, eso nos pasa a todos los escritores. Los libros también son una lucha contra el olvido y la desmemoria."
Julià de Jòdar
"La clase obrera fue derrotada por la guerra y por lo tanto ya no pudo constituirse en enemiga de la orden existente. Los que quedaron derrotados bastante trabajo tuvieron con sobrevivir con la represión y la persecución que había. En este sentido, es víctima de la represión y la dictadura. En segundo lugar, es víctima de lo que podríamos denominar el desorden de las ciudades durante el franquismo. La parte del centro de la ciudad tiene escasa vinculación con estos barrios, que en realidad son vistos como peligrosos. Y tercera porque el centro de la ciudad es un centro administrativo y burocrático, de clases medias cultas pero a la clase obrera no la conocen. La desaparición de las fábricas no representa para ellos ningún trauma. Es como si la ciudad no se las hubiera hecho suyas y su desaparición sociológica, historia y familiar se hubiera olvidado. La paradoja es que ahora tiene mucha más supervivencia la Badalona romana de hace dos mil años que la Badalona real y viva de la gente que la hizo en el siglo XX."
Julià de Jòdar
"Lo que necesitamos son buenos análisis políticos, sinceros, descarnados y brutales, si hace falta; aceptar la realidad histórica, que se ha perdido una gran oportunidad, y ver en qué se ha fallado. Puede haber razones de trasfondo histórico, razones antropológicas o de carácter, como catalanes, de por qué hemos admitido determinadas cosas, si nos hemos movilizado tanto y no hemos sabido organizarnos para ir más allá. O crear un movimiento que arrasara con todo lo que habíamos recibido en estos 40 años de autonomismo. Volvemos a estar en el autonomismo, vergonzante, camuflado pero es así. Eso no se explica fácilmente. Y este análisis está por hacer."
Julià de Jòdar
"Maig, 17. Heus aquí les tres fotografíes que ens van "fixar" per primera vegada com a parella recognoscible als nostres propis ulls. Va ser, ¿te´n recordes?, en el "viatge de nuvis" a Peníscola, encara que tot havia començat a prendre cos a la llarga andana de l´estació de Sant Pol i a l´hotel Re, que (¿premonitòriament?) ja no hi és. No exactament una lluna de mel, a Peníscola, sinó un cap de setmana llarg. Calia pagar el préstec de l´entrada del pis amb finestra damunt d´aquell parc que escoltava assajar un Busquets consirós el solo de violoncel de Don Carlos; remembrar, un Tasis melangiós, diez feliços a París; cantar tangos un Barbat descregut; un Ràfols i una Maria Girona freqüentar Homer, i on encara no podíem gaudir igual que, trenta anys després, Comadira, que plagio, de tots els verds de xiprers i de pins, de palmeres i cedres, d´oliveres i eucaliptus, llavors que els baladres sense flors encara no hi dormien i les sàlvies no hi sabien fer mata grossa, el romaní no hi solia treure les floretes blaves ni les mimoses hi mostraven les tofes de flor polsinosa, la pluja no hi regalimava pels fénix i els ventalls de les washingtònies i els margallons, i no hi havia marfulls florits, espígols, acants ni pitòspors (ai Mimí Pitosporus!), i l´heura no encatifava els parterres -només, encimbellades lla dalt, les ruïnes d´una caserna antiaèria de quan la guerra, deien. No ens podíem permetre el luxàs d´estar-nos una setmana sencera en aquella pensió vora el castell del papa Luna, on no et va venir de gust fer l´amor ni un sol dia."
Julià de Jòdar
L'home que va estimar Natàlia Vidal
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