"Hace mucho tiempo que renuncié definitivamente a las pompas del mundo, y ciertamente no quisiera verlas reaparecer en el lecho en que voy a dar a luz, que para tantas mujeres es el lecho de muerte. No son las perlas y las joyas las que pueden hacerme agradable a Dios, quien se ha dignado librarme de la esterilidad, sino la entrega total a su voluntad y la conciencia de mi propia nada."
Eduviges I de Polonia
No hay comentarios:
Publicar un comentario