"A los hombres les va bien un aspecto
descuidado."
Ovidio
“A una inteligencia pervertida cualquier cosa la
corrompe.”
Publio Ovidio
Nasón
"Amor es un no sé qué que viene por no sé
dónde; le envía yo no sé quién; se engendra yo no sé cómo; conténtase no sé con
qué; se siente yo no sé cuando y mata no sé por qué."
Publio Ovidio
Nasón
"Era el estío; el día brillaba en la mitad de su carrera, y me
tendí en el lecho buscando reposar de mis fatigas. La
ventana de mi dormitorio, medio abierta, dejaba penetrar
una claridad semejante a la que reina en las opacas selvas,
o como luce el crepúsculo cuando Febo desaparece del
cielo, o la noche ha transcurrido sin presentarse el sol
todavía; luz tenue que conviene a las muchachas,
pudorosas, cuya timidez busca los sitios retirados. De pronto
llega Corina con la, túnica suelta, cubriendo con sus
cabellos por ambos lados la marmórea garganta, cual se
dice que la hermosa Semíramis se acercaba al tálamo
nupcial, y Lais acogía a sus innumerables pretendientes. Le
quité la túnica, cuya transparencia apenas ocultaba ninguno
de sus encantos; pero ella pugnó por conservarla, aunque
con la flojedad de la que ansía la victoria, y se aviene de
buen grado a caer vencida. Así que apareció a mis ojos
enteramente desnuda, confieso que no vi en todo su cuerpo
el más mínimo lunar. ¡Qué espalda!, ¡qué brazos pude ver y
tocar!, ¡qué lindos pechos oprimieron con avidez mis
manos! Bajo su seno delicioso, ¡qué vientre tan recogido!,
¡qué talle tan arrogante y esbelto!, ¡qué pierna tan juvenil y
bien formada! ¿A qué particularizar sus atractivos? Cuanto vi
en ella merecía fervorosas alabanzas, y oprimí contra el mío
su desnudo cuerpo. ¿Quién no adivina lo demás? Por fin,
agotados, nos entregamos los dos al descanso. ¡Ay!, ojalá
consiga saborear muchos mediodías semejantes."
Publio Ovidio Nasón
Amores
(I-V)"Era el estío; el día brillaba en la mitad de su carrera, y me
tendí en el lecho buscando reposar de mis fatigas. La
ventana de mi dormitorio, medio abierta, dejaba penetrar
una claridad semejante a la que reina en las opacas selvas,
o como luce el crepúsculo cuando Febo desaparece del
cielo, o la noche ha transcurrido sin presentarse el sol
todavía; luz tenue que conviene a las muchachas,
pudorosas, cuya timidez busca los sitios retirados. De pronto
llega Corina con la, túnica suelta, cubriendo con sus
cabellos por ambos lados la marmórea garganta, cual se
dice que la hermosa Semíramis se acercaba al tálamo
nupcial, y Lais acogía a sus innumerables pretendientes. Le
quité la túnica, cuya transparencia apenas ocultaba ninguno
de sus encantos; pero ella pugnó por conservarla, aunque
con la flojedad de la que ansía la victoria, y se aviene de
buen grado a caer vencida. Así que apareció a mis ojos
enteramente desnuda, confieso que no vi en todo su cuerpo
el más mínimo lunar. ¡Qué espalda!, ¡qué brazos pude ver y
tocar!, ¡qué lindos pechos oprimieron con avidez mis
manos! Bajo su seno delicioso, ¡qué vientre tan recogido!,
¡qué talle tan arrogante y esbelto!, ¡qué pierna tan juvenil y
bien formada! ¿A qué particularizar sus atractivos? Cuanto vi
en ella merecía fervorosas alabanzas, y oprimí contra el mío
su desnudo cuerpo. ¿Quién no adivina lo demás? Por fin,
agotados, nos entregamos los dos al descanso. ¡Ay!, ojalá
consiga saborear muchos mediodías semejantes."
Publio Ovidio Nasón
"Apresúrate; no te fíes de las horas venideras.
El que hoy no está dispuesto, menos lo estará mañana."
Ovidio
“Aquel que huye del pecado no más que por estar
prohibido, peca.”
Publio Ovidio
Nasón
“Aquí
soy extranjero porque nadie me entiende.”
Publio Ovidio
Nasón
“Así
corrompe el ocio al cuerpo humano, como se corrompen las aguas si están quedas.”
Publio Ovidio
Nasón
"Bien vive quien acierta a vivir en la oscuridad."
Ovidio
"Como le sucede al gladiador que, pese a sus heridas, vuelve a combatir o al marinero que, aun habiéndose salvado de un naufragio, no puede evitar hacerse de nuevo al mar."
Ovidio
Ovidio
“Compra lo necesario, no lo conveniente.”
Ovidio
"Cosa regia es, créeme, socorrer a los
desgraciados."
Ovidio
Ovidio
Metamorfosis
"Cuánta noche ciega hay en los pechos de los
hombres."
Ovidio
"Cuídate de los comienzos; el remedio se aplica tarde, cuando los males se desarrollan por excesivos retrasos."
Ovidio
"Cuídate de los comienzos; el remedio se aplica tarde, cuando los males se desarrollan por excesivos retrasos."
Ovidio
“El alma descansa cuando echa sus lágrimas; y el dolor se satisface
con su llanto.”
Ovidio
“El amor a la patria es más patente que la razón misma.”
Ovidio
"El amor furtivo es tan agradable para una mujer como para el
varón: el varón no sabe disimularlo, pero ella lo desea más
escondidamente."
Ovidio
“El cambio es siempre poderoso. Ten
siempre el anzuelo en el agua. En el remanso donde menos lo esperes, hallarás
un pez.”
Ovidio
"El camino más seguro es el del medio."
Ovidio
"El creador dio al hombre un rostro vuelto hacia el cielo, para
que pudiera contemplarlo frente a frente."
Ovidio
“El dulce reposo no sólo da vigor al cuerpo, sino también al espíritu,
pero el trabajo abrumador va corroyendo las fuerzas de uno y otro.”
Ovidio
“El egoísta tiene su corazón en la cabeza.”
Ovidio
“El éxito justifica la acción.”
Ovidio
"El hábito crea la costumbre."
Ovidio
“El hombre debe siempre esperar al último día y nadie puede decirse
feliz antes de su muerte y de sus funerales.”
Ovidio
"El placer más seguro es el menos
placentero."
Ovidio
“El que ha naufragado tiembla incluso ante las olas tranquilas.”
Ovidio
“El regalo tiene la categoría de quien lo hace.”
Ovidio
"El reposo restaura las fuerzas del espíritu y del cuerpo."
Ovidio
Ovidio
Ovidio
Ovidio
Ovidio
¿Hasta dónde no llegará el arte? Hay incluso quienes
aprenden a llorar con gracia.”
“Hay tantas penas en el amor como conchas en la
playa.”
“Huyo de lo que me sigue; voy detrás de lo que huye
de mí.”
"La abundancia me hizo
pobre."
"La belleza atrae al amor."
Ovidio
"La belleza es un bien
frágil."
Ovidio
"La casualidad es siempre
actual: ten siempre a punto el anzuelo. En la tranquilidad de las aguas, donde
menos lo esperas, estará tu pez."
Ovidio
“La conciencia del hombre recto se ríe de los engaños
de la fama.”
Ovidio
"La envidia, el más mezquino de los vicios, se
arrastra por el suelo como serpiente."
Ovidio
"La esperanza hace que agite el náufrago sus brazos en medio de
las aguas, aun cuando no vea tierra por ningún lado."
Ovidio
“La fortuna y el amor son amigos del audaz.”
Ovidio
"La gota horada la piedra y el uso consume el anillo."
Ovidio
“La gota horada la roca, no por su fuerza sino por su constancia.”
Ovidio
"La hermosura, bien frágil."
Ovidio
“La ira de los amantes hace renacer el amor.”
Ovidio
“La mejor ayuda para la mente es la que rompe de una sola vez los
mortificantes lazos que atan al corazón.”
Ovidio
“La noche es más triste que el día.”
Ovidio
"La palabra una vez emitida vuela irrecuperable."
Ovidio
"La palabra una vez emitida vuela irrecuperable."
Ovidio
"La tierra recibió a los animales, y el aire móvil, a los
pájaros, luego nació el hombre; mientras que los animales van con la cabeza
baja y clavan su mirada en el suelo, dio al hombre un rostro levantado para
elevar sus ojos al cielo."
Ovidio
"Las acciones humanas no engañan nunca a los dioses."
Ovidio
“Las causas están ocultas. Los efectos son visibles para todos.”
Ovidio
"Las leyes están para que el poderoso no pueda todo."
Ovidio
"Las leyes yacen vencidas bajo la espada guerrera."
Ovidio
“La muerte es menos dura que la espera de la muerte.”
Ovidio
“La muerte es menos dura que la espera de la muerte.”
Ovidio
"Las mujeres lo negaran o lo aceptaran, pero lo que siempre
quieren es que se lo pidamos."
Ovidio
"Lo lícito no me es grato; lo prohibido excita mi deseo."
Ovidio
“Los afectos son tan variados como las formas de las cosas en el
mundo.”
Ovidio
“Mi mano derecha no se atreve a escribir lo que ella misma ha osado
hacer.”
Ovidio
"Mientras seas feliz tendrás muchos amigos, Pero si el tiempo se
te hace adverso, te verás solo."
Ovidio
“Mucho amor germina en la casualidad; tened siempre dispuesto el
anzuelo, y en el sitio que menos lo esperáis encontraréis pesca.”
Ovidio
“Muy frágil es la belleza.”
Ovidio
"Nacemos con lágrimas, entre lágrimas transcurre nuestra vida y
cerramos con lágrimas nuestro último día."
Ovidio
Ovidio
Ovidio
Ovidio
Ovidio
Ovidio
Ovidio
Ovidio
“O no comiences una cosa, o condúcela a buen fin.”
Ovidio
“Ofrecer amistad al que pide amor es como dar pan al que muere de
sed.”
Ovidio
"¡Oh, que pueda ver yo los ojos de mi amante abandonados de la conciencia; que se sienta sin fuerzas y que me impida, largo rato, volverla a tocar!"
Ovidio
"¡Oh, que pueda ver yo los ojos de mi amante abandonados de la conciencia; que se sienta sin fuerzas y que me impida, largo rato, volverla a tocar!"
Ovidio
"Oponte en los principios; tarde se prepara el remedio, cuando los males aumentan por largas tardanzas."
Ovidio
"Para agradar debes olvidarte de ti mismo."
Ovidio
“Para no perder, el jugador no cesa nunca de
perder.”
Publio O. Nasón
"Para ser amado, sé amable."
Ovidio
“Persuádete de que estás enamorado, y te convertirás
en un amante elocuente... Muchas veces el que empezó fingiendo, acabó amando de
verás.”
Ovidio
El arte de amar
"Pierde el tiempo al antojo de tu amada."
Ovidio
“¡Pobre
de mí! El amor no se cura con hierbas.”
Ovidio
"Procura que tu anzuelo esté siempre preparado;
habrá un pez en el estanque donde menos lo esperes.”
Ovidio
"¿Qué cosa es más dura que una piedra y más blanda que el agua?
Y, sin embargo, el agua blanda horada la dura piedra."
Ovidio
“¿Qué es el sueño sino la
imagen fría de la muerte?”
Ovidio
“Que la mujer sienta el goce
en lo más íntimo de su ser y que el placer sea igual para los dos.”
Ovidio
"Quien es consciente de
lo recto se ríe de las mentiras de la fama."
Ovidio
“Se hace ligera la carga que se sabe llevar bien.”
Ovidio
“Sea cual sea el consejo, sé
breve.”
Ovidio
"Serás triste si te
encuentras solo..."
Ovidio
"Si quieres casarte
bien, despósate con una que se te parezca."
Ovidio
"Siempre tendremos con
fuerza a lo prohibido, y deseamos lo que se nos niega."
Ovidio
"Socorrer al caído es
acción digna de reyes."
Ovidio
“Soporta y persevera; cosas
mucho más graves soportaste.”
Publio Ovidio
Nasón
"Soporta y resiste; ese
esfuerzo te será útil un día."
Ovidio
“¡Sorpréndame la muerte en mi trabajo!”
Ovidio
“Surgió primero la edad de oro, que, sin autoridad ninguna, de forma espontánea, sin leyes, practicaba la lealtad y la rectitud. No existía el castigo, ni el miedo, ni se leían amenazas en placas de bronce expuestas en público, ni la masa en actitud suplicante temía la mirada de su juez, sino que estaba protegida sin que nadie la defendiera. El pino aún no había sido derribado en sus montes de origen, ni había descendido hasta las aguas transparentes para recorrer el universo desconocido, y los seres humanos no conocían más riberas que las propias. Los escarpados fosos no rodeaban aún las ciudades; no existían rectas trompas de bronce, ni cuernos en espiral, ni cascos, ni espadas; los pueblos, sin necesidad de guerreros, disfrutaban tranquilamente la dulzura de la paz. La propia tierra, libre, sin que la azada la tocase ni la desgarrase el arado, lo ofrecía todo espontáneamente; contentos con los alimentos que nacían sin que nadie los obligase, cogían los frutos del madroño, las fresas silvestres, los frutos del cornejo, las moras adheridas a las ásperas zarzas y las bellotas que caían del copudo árbol de Júpiter. Era una eterna primavera, y los suaves Céfiros acariciaban con sus brisas templadas las flores que nacían sin semilla. Enseguida, la tierra producía cosechas sin ser arada, y el campo amarilleaba de espigas cargadas de grano sin que lo dejasen en barbecho; corrían ríos de leche, ríos de néctar y de las encinas de verde follaje brotaban doradas gotas de miel. Cuando el mundo quedó bajo el dominio de Júpiter, tras ser arrojado Saturno al tenebroso Tártaro, apareció la estirpe de plata, inferior a la de oro, más preciosa que la de amarillo bronce. Júpiter acortó el tiempo de la antigua primavera y distribuyó el año en cuatro épocas con inviernos, veranos, otoños variables y una breve primavera. Entonces el aire refulgió por vez primera, agostado por la sequedad del calor, y colgaron los carámbanos congelados por los vientos. Entonces empezaron a refugiarse en 120 casas (casas fueron las cuevas, y la espesura de los arbustos, y las estacas unidas con corteza de árbol). Entonces fueron enterradas en los surcos alargados las primeras semillas de Ceres, y los novillos empezaron a gemir, oprimidos por el yugo. A aquélla le sucedió una tercera estirpe, de bronce, de naturaleza más cruel y más inclinada a las espantosas armas, pero no perversa. La última es de duro hierro; inmediatamente, en esa edad de metal inferior surgió todo el mal; huyeron el pudor, la verdad y la lealtad, y ocuparon su lugar el engaño y la trampa, la insidia y la violencia, y el deseo perverso de poseer. Daba el marino su vela a los vientos sin conocerlos aún, y la madera de las quillas, que había permanecido largo tiempo en lo alto de los montes, brincaba sobre mares desconocidos, y un agrimensor precavido marcó con una larga linde la tierra, antes común como la luz del sol y las brisas. Y no sólo reclamaron al suelo pródigo las cosechas y el alimento necesario, sino que penetraron en las entrañas de la tierra y excavaron lo que provoca desgracias, las riquezas que ella había ocultado situándolas junto a la tenebrosa Estigia. El pernicioso hierro y el oro más pernicioso que el hierro ya habían aparecido; aparece la guerra, que utiliza a ambos para luchar, y agita en su mano ensangrentada las resonantes armas. Se vive del saqueo; el huésped no está a salvo de su anfitrión, ni el suegro de su yerno; incluso entre hermanos escasea la buena disposición. El hombre ansía la muerte de su esposa, ésta, la de su marido; malvadas madrastras mezclan brebajes de acónito que hacen palidecer, el hijo pregunta antes de tiempo por la edad de su padre. El amor filial yace derrotado, y la virgen Astrea abandona, la última de los inmortales, la tierra empapada en sangre.”
Ovidio
Las Metamorfosis
Las Metamorfosis
“También el llanto tiene cierta voluptuosidad.”
Ovidio
"Tanto las que acceden como las que rehúsan, gustan de ser
solicitadas."
Ovidio
“Todo amante es un soldado en guerra.”
Ovidio
"Veo lo que es bueno y lo apruebo; pero hago lo peor."
Ovidio
"Vive pues, pero cuelga, aun así, malvada, y esta ley misma de tu castigo, para que no estés libre de inquietud, en el futuro declarada para tu descendencia y tus tardíos nietos sea."
Ovidio
Las Metamorfosis
"Vive pues, pero cuelga, aun así, malvada, y esta ley misma de tu castigo, para que no estés libre de inquietud, en el futuro declarada para tu descendencia y tus tardíos nietos sea."
Ovidio
Las Metamorfosis
"Yo no siento ningún amor por algo
que no me da ninguna vez molestias."
que no me da ninguna vez molestias."
Ovidio