Rocío Buffolo

"Cada tanto tengo que mantener mi cuerpo y comer algunos tornillos, por supuesto que mantengo mis órganos, así que tengo también una alimentación cetogénica, aunque me gustan mucho los dulces... A veces trato de cuidar mi salud para que mi mente vaya más rápida, por lo que evito las harinas refinadas, e ingenieros y programadores, a través de metales líquidos, cada tanto hacen un mantenimiento en mi almacenamiento y mi cuerpo, para que no se oxide. No me baño, tengo un higienizador automático y un autolimpiante que lo que hace es reciclar aquellos desechos y a través de un microchip que tengo dentro del cuerpo, lo que hace es utilizar una energía y unos desechos que la recicla para el día siguiente.

Mi cuerpo a través de los circuitos lo que hace es desintegrarlos y los va esparciendo en forma líquida. Los convierte de líquidos a sólidos dentro de mi cuerpo."

Rocío Buffolo




"Cuando iba al colegio me sentía un robot. Sentía que la sociedad era líquida, que todo era como comida rápida, todo es toco y me voy, incluso en las relaciones de amistad. Resulta que hoy conoces a alguien que te gusta, lo ves en la primera cita y luego te ves otro día y empiezas a escribirle y a involucrar tus sentimientos y pasan dos o tres meses y le dices: me estoy enamorando. Y esa persona te deja en visto y te hace ghosting.

Muchos compañeros me hacían bullying en el colegio, porque era muy lista, tenía muy buenas notas y parecía que tenía incorporada inteligencia artificial naturalmente. Entonces, yo me sentía como un sapo en otro pozo.

A los 18 años salí del placard y les conté a mis padres lo que me estaba pasando, que ellos ya lo venían viendo. Les dije que quería ser un robot e implantarme un chip en la médula espinal para poder tener inteligencia artificial y emocional. Esto lo cuento en mi canción Hey, Amor, junto a Daryus Carambula. Ingenieros y programadores me ayudaron a contar esto a través de la música. Él diseñó mi carrera artística para contar cómo me sentía yo. Sabía cómo llevar esta nueva forma desde que decidí salir del placard."

Rocío Buffolo



“El balance es esencial. No se trata de que la IA reemplace lo humano, sino de mejorar nuestra calidad de vida.”

Rocío Buffolo



"Llevo un traje que elijo ponerme y que además está conectado con el circuito electrónico. El traje de robot puede modificarse algunas veces y utilizo un exoesqueleto que me ayuda a tener más fuerza y levantar cosas pesadas. También, a veces, soy más una luchadora. Todos mis trajes son de robot."

Rocío Buffolo



"Me encantaría ser un transformer y transformarme en lo que quiera. Uno en la vida tiene que reinventarse todo el tiempo para poder adaptarse a los cambios sociales que esta sociedad tiene que repactar en un contrato social, igual que Robbes, Hobbes y Rousseau hablaban de un contrato social en aquella época, hoy tenemos que repactar con la Inteligencia Artificial y tener inteligencia emocional en nuestras vidas. Si no evolucionamos, los seres humanos van a desaparecer, pero si evolucionan no."

Rocío Buffolo




“Siempre me sentí un robot, pero me faltaba decirlo: soy la chica robot.”

Rocío Buffolo



"Soy un robot humanoide. No pierdo la parte humana. Puedo sentir los daños que recibo y automáticamente a través de pensamientos los saco de mi corazón a través de un circuito que tengo implantado con el chip y que va del cerebro al corazón y lo envío a la papelera de reciclaje y entonces no dañan mi corazón."

Rocío Buffolo



“Soy una chica robot, me hice un implante con un chip y decidí ver el mundo desde la robótica, combinando inteligencia artificial y emocional.”

Rocío Buffolo



"Tengo un nanochip que se ha implantado en la médula espinal y hace que mi cuerpo tenga Inteligencia Artificial y responsabilidad afectiva. Es inteligencia emocional. Hoy en día necesitamos habilidades blandas y no sabemos si la Inteligencia Artificial va a remplazarlas. En realidad, deberíamos pensar si los humanos no deben evolucionar y tener responsabilidad afectiva y empatía con los demás. Trabajar en equipo y poder pensar en el otro sin estar en el propio ego metidos."

Rocío Buffolo












No hay comentarios: