Greene Liz El lado oscuro del alma

 EL PSICÓPATA
 
 
Una de las cuestiones que vamos a tratar a lo largo del día es si el comportamiento psicopático se genera por el ambiente o es algo innato y exacerbado por el ambiente, pero siempre presente como potencial. Si es algo innato, debería reflejarse de algún modo en el horóscopo.
 
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El lado oscuro del alma, página 16
 
 
Las raíces de esta palabra son psyche y pathos: el sufrimiento del alma. En la práctica parece más bien que son las almas de los demás las que sufren a manos del psicópata en vez del alma de éste, aspecto sobre el cual todavía conocemos muy poco. Más recientemente parece haberse impuesto el término «sociópata», cuya implicación nos lleva a que lo relevante son los rasgos antisociales de la psicopatía, no el estado interno del psicópata. Este cambio está relacionado con el Zeitgeist que vivimos, mucho más interesado en el colectivo que en el mundo interior del individuo.
 
¿Enfermedad o desorden de la personalidad?
 
En Inglaterra todavía se usa el término «sociópata», aunque cada vez más se ve sustituido por el término estadounidense «TPA», abreviatura de «trastorno de personalidad antisocial». Se trata de un término muy específico. Cuando la psiquiatría se refiere a algo como un trastorno de personalidad, lo hace distinguiendo cuidadosamente entre enfermedad y algo que forma parte fundamental del carácter. La enfermedad es algo “exterior”, que perturba el carácter básico y que puede implicar la posibilidad de una “cura” o sanación. La enfermedad puede estar vinculada a causas tanto físicas como psicológicas o ambas, pero es fundamentalmente un “estado alterado” más que innato. A diferencia de la enfermedad, los rasgos inherentes de la personalidad no son «curables» debido a que es así como está construida la personalidad del individuo. En nuestros días la opinión general es que la psicopatía no es “curable” porque no hay enfermedad que curar. La distinción nos introduce inmediatamente en terreno resbaladizo. Una de las cuestiones que vamos a tratar a lo largo del día es si el comportamiento psicopático se genera por ¿cuál de ellos afecta al otro? Como en el caso del huevo y la gallina, cuando analizamos al ser humano y sus relaciones de causa-efecto, acabamos siempre dando vueltas en círculo. ¿Afecta (o incluso ordena) el cerebro la psicología humana y el comportamiento? ¿O son la psicología humana y el comportamiento los que provocan modificaciones en el cerebro? ¿O forman parte ambos de un único paquete, la indivisible realidad psíquica, y ésta es la perspectiva que, como astrólogos, también deberemos tender a adoptar? Un símbolo astrológico describe ambos niveles de la existencia humana y a menudo no es posible diferenciar, provistos únicamente con la carta natal, en qué nivel se va a expresar una configuración astrológica particular. No se trata de que el cuerpo afecte a la mente o a la inversa. Se trata, más bien, de que ambos funcionan como espejo del otro, de forma simultánea y sincronizada y como parte de la realidad unificada individual.
 
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El lado oscuro del alma, página 17
 
 
Aparentemente no podemos trabajar desde un punto de vista terapéutico con la psicopatía, cualquiera que sea el enfoque que usemos. Lo único que sucede es que el psicópata manipula sin ningún tipo de escrúpulos al terapeuta y rehúsa formar con él lo que suele denominarse como «alianza de trabajo». No existe un deseo verdadero de ser ayudado. Alguna vez se pensaba que el psicópata no llegará a padecer crisis de ansiedad ni caerá en la depresión, pero no es éste realmente el caso. Si un psicópata es acorralado y no puede saltar de la «silla caliente» debido a la manipulación, cae a menudo en la depresión y puede incluso llegar al intento de suicidio como forma de escapar de la trampa. Pero esto, evidentemente, no refleja ni sufrimiento ni remordimiento. Cuando estas personas salen de la prisión, tienden a repetir sus crímenes. Nada cambia; no hay mejora. El castigo, ya sea en forma de privaciones o de dolor físico, no les hace mella, como tampoco las recompensas por buen comportamiento. No hay un «detonante del miedo».
 
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El lado oscuro del alma, página 19
 
 
No creo que encontremos nunca una «configuración astrológica de la psicopatía» en la carta natal. Pero sí podemos hacernos alguna idea de los factores astrológicos generales hacia los cuales deberemos dirigir nuestra búsqueda.
 
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El lado oscuro del alma, página 22
 
 
El signo en que esté emplazado Mercurio y los aspectos de éste pueden reflejar ciertamente el grado de flexibilidad mental de uno. A Mercurio en signos mutables le encanta la variedad, mientras que en los signos fijos posee una mayor capacidad de concentración. Los aspectos Mercurio-Neptuno requieren una estimulación y una expresión imaginativa, mientras que los aspectos Mercurio-Saturno se relacionan mejor con los hechos y las estructuras en el mundo material. Pero ningún problema mercurial, en sí mismo, hace de nadie un psicópata.
 
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El lado oscuro del alma, página 27
 
 
Demasiadas presiones externas pueden alimentar estructuras psicopáticas del carácter. Pero tenemos que considerar por qué determinados sujetos son particularmente receptivos a esa clase de presiones, pues de otro modo todos seríamos psicópatas. Quizá lo somos, en algún nivel u otro. Pero si lo fuésemos, exhibiríamos esas características de una forma más aparatosa. Explorar los factores sociales siempre es útil; pero al final, incluso si somos capaces de hacer todo lo que podamos a nivel práctico, siempre nos perderemos el misterio del carácter individual. Algunas personas reaccionan ante los problemas sociales más violentamente que otros; y eso es lo que necesitamos determinar astrológicamente.
 
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El lado oscuro del alma, página 28
 
 
El astrólogo no puede tratar a la sociedad como un todo; aunque exploremos las tendencias colectivas, finalmente y de todos modos tendremos que tratar con personas individuales si queremos realizar cualquier clase de contribución creativa a través de nuestro trabajo.
 
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El lado oscuro del alma, página 28
 
 
La capacidad de comprender a otra persona es bastante aguda en el psicópata, pero no hay remordimiento, no hay lástima por la otra persona. Es como si al psicópata le faltara un órgano. Por eso la psicopatía es tan aterradora. Cuando nos enfrentamos a la ira o la potencial violencia de alguien, intentamos apelar a su sentido de la decencia o a su empatía. Queremos creer que incluso una persona violenta puede rehabilitarse, en vez de ser simplemente condenada a un brutal tratamiento en prisión. Pero la rehabilitación depende de que exista algo en lo más profundo del ser que responda con remordimiento. ¿Cómo pretendéis ayudar a alguien a aceptar una responsabilidad emocional por lo que ha hecho cuando apenas le importa? Es esa inexpresividad, ese vacío interior lo que resulta aterrador. Debido al encanto y a la habilidad de mentir convincentemente, eso no se percibe desde fuera; y no lo vemos porque el psicópata es un experto en convencernos. Por eso encontramos al psicópata en la política, especialmente cuando un país es débil y busca un líder fuerte que le devuelva su orgullo. No sólo es nuestra credulidad la que abre las puertas al engaño, sino también nuestra desesperada necesidad de encontrar algo o a alguien fuera de nosotros que nos redima.
 
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El lado oscuro del alma, página 35
 
 
La siguiente característica de la lista, la falta de empatía, está estrechamente relacionada con la falta de remordimiento, como ya he explicado. Hay otro titular en la lista llamado «crueldad»; pero la crueldad, junto con la falta de remordimiento y la de empatía, forma parte del mismo paquete. Desde el punto de vista astrológico, creo que es un paquete lunar.
 
Como astrólogos, podemos determinar que esa crueldad, falta de empatía y de remordimiento están conectados con la respuesta emocional y la capacidad de identificarse con los sentimientos de los demás. La empatía pertenece al reino lunar. A pesar de la importancia del Sol en los problemas narcisistas, a lo largo del día descubriremos que esas perturbaciones lunares, más que de cualquier otro factor astrológico, subyacen en el núcleo de todo comportamiento psicopático.
 
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El lado oscuro del alma, página 36
 
 
La falta de un elemento no significa que la persona no sea capaz de experimentar ese elemento. La falta de Tierra, por ejemplo, no significa que uno carezca de sensualidad; o la falta de Aire, que uno carezca de inteligencia. Normalmente sucede lo contrario; pero con un elemento débil o inexistente, las reacciones no están adaptadas a la persona y, por lo tanto, son primarias y arcaicas. A veces el ego intenta desconectar debido al poder del elemento ausente, aunque la desconexión nunca es total. Va y viene de forma autónoma.
 
La falta de agua en la carta describe la falta de adaptación de la función sentimental, más que la incapacidad de sentir empatía. Las funciones de la conciencia no describen nuestros impulsos humanos fundamentales.
 
La falta de agua en la carta describe la falta de adaptación de la función sentimental, más que la incapacidad de sentir empatía. Las funciones de la conciencia no describen nuestros impulsos humanos fundamentales. Describen más bien cómo nos adaptamos a la vida de acuerdo con nuestras fortalezas y debilidades innatas.
 
Una falta de agua indica unas reacciones emocionales tremendamente potentes y los sentimientos de empatía pueden ser tan poderosos que pueden llegar a abrumar. Los sentimientos no están tamizados por el ego, sino que éste se encuentra a su merced. Vienen y van como quieren, no como deseos conscientes, y muchas veces muestran una cualidad inflexible, intensa y bastante primitiva.
 
Es importante recordar que los signos del zodiaco describen cualidades de expresión, no motivaciones psicológicas. Los signos de agua no describen nuestra capacidad de sentir, sino la manera en que cada planeta es experimentado y expresado. Mercurio o Saturno en Agua no nos dirá si un individuo es capaz o no de sentir empatía. Mercurio en agua proporciona un enunciado acerca de la forma en que procesamos y comprendemos la información que recibimos. Este proceso se lleva a cabo mediante la función sentimental, más que a través de conceptos abstractos, que sería el caso de Aire, o de corazonadas, como en el caso de Fuego, o hechos observables, como es el caso de Tierra. La Luna, en cambio, es el órgano a través del cual establecemos contacto con los demás, cualquiera que sea su signo, y el medio por el cual empatizamos con los demás en un nivel emocional. Por eso las experiencias con nuestra madre causan un profundo efecto en la forma en que la Luna se expresa posteriormente en la vida. La madre es nuestro primer contacto con otra persona a un nivel emocional; aprendemos así a usar (o abusar de) nuestra Luna a través de este vínculo primordial.
 
Las personas con un fuerte elemento Agua son habitualmente conscientes de lo que sienten, aunque no siempre sean capaces de verbalizarlo de una forma lógica cuando se les pide que lo expresen. Aunque cabe que expresen sus emociones de una forma dramática frente al público adecuado, el ego controla los sentimientos —no de una manera racional y calculada, pero sí consciente—. Las personas de Agua usan sus sentimientos como herramienta para adaptarse a la vida. Por eso sobresalen en cuanto a diplomacia y también por eso muchas veces hacen lo contrario. Si la situación emocional requiere cólera o una postura de rebeldía, también con el mismo sofisticado sentido de la oportunidad. Cuando falta el Agua, el ego no puede usar los sentimientos; son éstos los que usan el ego. Simplemente explotan y uno se ve arrastrado por ellos. Manan en bruto y sin pulir.
 
Una persona a la que le falte Aire puede ser muy brillante y las ideas pueden surgir con increíble claridad y creatividad. Pero a menudo falta la capacidad de sentarse tranquilamente y planificar la rutina cotidiana, y a veces falta también la perspectiva.
 
Lo mismo puede decirse de la falta de Agua. Esto es algo completamente distinto del estado descrito por la lista clínica de características de la psicopatía. Después, cuando ponga ejemplos de cartas, veremos cómo el agua predomina en las cartas de muchos de los grandes psicópatas. De alguna manera, la Luna no funciona. Por alguna razón, algo fue terriblemente mal en el terreno de las reacciones lunares y la capacidad de conectar empáticamente con otro ser humano no existe o está muy dañada.
 
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El lado oscuro del alma, página 16
 
 
Cuando hablas de «falta de adaptación», ¿quieres decir que la persona no sabe cómo usar ese elemento?
 
Sí, eso es lo que quiero decir. No está bajo control consciente del ego. Si en una carta hay mucho Aire, la capacidad de razonar lógicamente se siente como algo natural a la persona. En otras palabras: la función pensante está controlada por el ego y es, por tanto, un medio principal de adaptación. Pero esto no nos dice nada acerca de su inteligencia.
 
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El lado oscuro del alma, página 37
 
 
La incapacidad de tolerar la frustración es una función saturnina.
 
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El lado oscuro del alma, página 39
 
 
Un psicópata no tolera la frustración. Si otro conductor se cuela y se pone delante de él en la autopista, el psicópata puede mostrar un comportamiento típico de «furia al volante». En vez de dar bocinazos, quejarse a gritos del abuso y después olvidarlo, el psicópata forzará al otro conductor a salirse de la carretera y después le rebanará el pescuezo. No sentirá ningún remordimiento por haber matado a otro ser humano. Se trataba solamente de un gilipollas que se coló y al que el psicópata dio su merecido. Esta rabia desproporcionada en relación a las pequeñas frustraciones de la vida es característica de las reacciones psicopáticas. Es enorme e incontrolable. No hay capacidad de contar hasta diez ni tampoco la de decirse a uno mismo «¿Por qué me molesta tanto? ¿Cuál es el verdadero problema?». Esa incapacidad para tolerar la frustración, combinada con la incapacidad de controlar los impulsos propios, posee implicaciones aterradoras. Podéis ver la estrecha relación entre psicopatía y violencia, así como con el exagerado sentido de autoestima: «¿Por qué debo soportar estas frustraciones?», dice el psicópata. «Yo soy mucho más importante que cualquier otra persona». La gente corriente puede esperar pacientemente en una cola o tolerar la estupidez de otros. ¿Por qué debería someterse a las mismas reglas un ser manifiestamente superior?
 
Oyente: Pero ahí está actuando algo mucho más profundo.
 
Liz: Sí, hay algo más profundo que está actuando ahí. La inflación narcisista enmascara un sentimiento de completa inutilidad, vaciedad e impotencia. A partir de ahí, cualquier pequeña frustración es un martillazo sobre esos sentimientos terribles de vacío e impotencia. La reacción violenta y asesina es la manera del psicópata de restaurar una ilusoria sensación de poder. Y en ello se involucran temas relacionados con la madre,
 
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El lado oscuro del alma, página 39
 
 
Cualquier proceso terapéutico eficaz depende de que el paciente asuma su responsabilidad. Tiene que existir un punto en que éste diga: «He contribuido a mi propia desgracia. Pude elegir libremente y elegí mal. Soy parte de la ecuación, consciente o inconscientemente, aunque hayan intervenido otras personas». El psicópata nunca llega a este punto. Culpará a la sociedad, a la policía, al gobierno, al sistema educativo, a su familia, a los ricos, a los pobres, a los cristianos, a los judíos, a los musulmanes, a los orientales, blancos, negros, inmigrantes, homosexuales, fumadores, laboratorios farmacéuticos, revistas de moda… Cualquier cosa que tenga a mano. Como la longitud de la falda, la percepción colectiva de las enfermedades sociales va variando según la moda; y el psicópata es normalmente lo bastante listo como para seleccionar un grupo, ley, hábito o ideología determinados que le sirvan de chivo expiatorio.
 
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El lado oscuro del alma, página 42
 
 
El Sol, Saturno y Marte son obviamente importantes; pero la Luna es de una importancia crucial dado que muchos de los temas ligados a la psicopatía se conectan también con la incapacidad de establecer relaciones y la ausencia de empatía. Si pensamos en términos de problemas de desarrollo y buscamos en la carta cualquier factor que indique que una determinada reacción al sufrimiento en la infancia puede arrastrar a la psicopatía más que otras reacciones, debemos mantener nuestra vista fijada en la Luna.
 
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El lado oscuro del alma, página 43
 
 
Cualesquiera que sean las conclusiones a las que lleguemos tras examinar la carta, nos encontraremos siempre con una mezcla de personalidad inherente y entorno. Eso es lo normal en todos los patrones psicológicos. Cualquiera que sea la naturaleza del sufrimiento o patología personales, la carta, que describe el carácter innato, interactúa siempre con el entorno, tanto familiar como social. ¿El psicópata nace o se hace? Quizá ambas respuestas sean correctas. Y si lo son ambas, es necesaria cierta influencia del entorno combinada con cierto tipo de carácter. El temperamento puede ser similar al de muchas otras personas que no muestran un comportamiento psicopático. Pero si ese temperamento se mezcla con el tipo adecuado de ambiente social y familiar, la mezcla resultante puede producir eso que llamamos psicopatía. Puede existir también un componente genético. ¿Pero qué significa esto? ¿Qué significa “predisposición genética”? ¿Es fisiológica o psicológica? Y si es psicológica, ¿por qué la investigación actual se centra únicamente en la dimensión fisiológica de la herencia genética? Como astrólogos, no sabemos aún si las configuraciones astrológicas que asociamos con el temperamento innato describen también la herencia genética de tipo psicológico; si bien, dada la forma en que se repiten los patrones astrológicos en las familias, es muy probable que sea así.
 
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El lado oscuro del alma, página 16
 
 
 
Lista de características que, de acuerdo con el estamento psiquiátrico, definen entre nosotros la psicopatía:
 
Encanto
Sentido exagerado de la autoestima
Bajo umbral de aburrimiento
Mentiras patológicas
Capacidad de ganarse la confianza de los demás
Ausencia de remordimiento
Falta de empatía
Estilo de vida parasitario
Falta de autocontrol
Incapacidad de aceptar la propia responsabilidad
 
 
¿El comportamiento psicopático incluye siempre todos los factores de la lista o bastan tres o cuatro de ellos para considerar el comportamiento como psicopático?
 
Todos los factores de la lista están presentes en la psicopatía. Es muy probable que exista al menos uno, si no más, de esos factores en nuestra naturaleza, pero es el cuadro completo el que revela la existencia de la psicopatía. Hay una característica que no he incluido, pero que también es habitual en el cuadro clínico: incumplimiento frecuente de la ley, o actividad criminal violenta. No la he incluido porque, aunque es común en el comportamiento psicopático, no es inevitable. De lo contrario, cada una de las características estará presente en mayor o menor grado. Obviamente debemos ser cuidadosos con este cuadro clínico. El que alguien carezca de autocontrol, o tole-re mal la frustración, o tienda a vivir de los demás, o no muestre empatía con ciertas clases de personas, no significa que ese alguien sea un psicópata. Cientos de personas con un fogoso Marte en aspecto con Urano no pueden tolerar la frustración y montones de gente con aspectos difíciles Sol-Neptuno, han adoptado un estilo de vida parasitario, a personas con aspectos Mercurio-Júpiter les cuesta concentrarse, o las personas con aspectos Venus-Saturno pueden ser muy selectivos en cuanto a mostrar empatía. Estos aspectos describen simplemente cualidades del carácter que pueden expresarse a diferentes niveles, tanto positiva como negativamente. En sí mismos no son indicadores de psicopatía.
 
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El lado oscuro del alma, página 44
 
 
La Luna parece jugar un papel crucial en las cartas de los psicópatas.
 
Esto se conecta con la falta de empatía y la incapacidad de relacionarse con los demás. Mucha gente es capaz de disociarse de sus sentimientos, pero eso no les convierte en psicópatas por mucho que la disociación sea una característica fundamental de la psicopatía. Quizá sea una cuestión de grado, así como la cuestión de si uno puede «re-asociarse» tras la disociación o si, por el contrario, estamos ante un estado permanente de disociación, lo cual sería el caso de la psicopatía. Los estudios clínicos indican que parecen existir dos desencadenantes que provocan la disociación: el miedo a ser devorado y el miedo al abandono. Ambas cuestiones son propias del territorio lunar
 
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El lado oscuro del alma, página 46
 
 
Mirad los aspectos hacia esa conjunción. Venus y Saturno están ambos en trígono a Júpiter, que se halla en Leo en la casa V.
 
Oyente: Esa mezcla puede ser bastante incendiaria.
 
Liz: ¿Por qué incendiaria? Una vez más, pensad en la manera en que expresáis vuestras interpretaciones. Si este seminario tratara del arte 43 y de los artistas, ni se os ocurriría pensar en términos de psicopatía. Diríais: «¡Eh, observa esos encantadores trígonos hacia Júpiter en la casa V! ¡Cuánta inspiración creativa!». Tened mucho cuidado. Ver las cosas a posteriori es al mismo tiempo una gran ayuda y un gran obstáculo para una buena interpretación astrológica. Cierta vez, durante un seminario, puse de ejemplo la carta del Papa7. Comentábamos la cuadratura Mercurio-Neptuno en su carta y alguien en el grupo que abiertamente no sentía ningún aprecio por la Iglesia Católica dijo: «Está claro que de esa cuadratura Mercurio-Neptuno puede deducirse que es un mentiroso». Si yo hubiera puesto de ejemplo la carta de Proust o de Goethe y hubierais visto esa misma cuadratura, habríais dicho: «¡Una imaginación maravillosa!». O si vierais la carta de Dane Rudhyar, también podríais decir: «¡Qué intuición y percepción espiritual más afinadas!». Todo esto, por supuesto, puede ser verdad en esas personas, pero son colores de un espectro más amplio y no sabemos qué parte de ese espectro es la que expresará la personalidad individual.
 
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El lado oscuro del alma, página 16
 
 
Las personas con una conjunción Venus-Saturno tienen o suelen tener una autoestima muy baja.
 
Hay un ellas dolor y aislamiento muy profundos; un sentimiento de no tener valor alguno y de no ser capaz de encontrarlo, porque su sensación de impotencia es demasiado grande.
 
Además, si esta conjunción exacta Venus-Saturno se ubica en la casa XII, la casa de los antepasados. el patrón de aislamiento, inhibición de los afectos y amor limitado o sometido a condición que tienen estas personas ha actuado sobre la psique familiar durante generaciones.
 
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El lado oscuro del alma, página 49
 
 
Los trígonos son aspectos hermosos, pero a veces facilitan demasiado las cosas e impiden la necesaria lucha para la formación del ego.
 
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El lado oscuro del alma, página 16
 
 
Los aspectos Júpiter-Neptuno poseen un amplio abanico de expresiones. Se le asocia a menudo con una propensión al misticismo. Puede ser bastante crédulo y firme creyente en la redención: para estas personas los milagros existen y o bien pueden intentar ser salvadores o buscar a alguien que los salve. Estos aspectos pueden suponer una influencia muy positiva en personas que buscan algún tipo de realidad trascendente a la que ofrendarse. Reflejan una cualidad devocional y necesitan servir a un propósito unificador más elevado. No es un aspecto negativo en sí mismo. Como los demás aspectos, es neutral y todo depende cómo esté asentado el ego. Si el ego es débil y las reacciones emocionales se distorsionan, los contactos Júpiter-Neptuno pueden producir un elemento mesiánico que, combinado con otros factores, puede ser muy problemático e incluso peligroso tanto para sí mismo como para los demás.
 
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El lado oscuro del alma, página 49
 
 
No se puede dar por sentado que ninguna persona nacida con la Luna en un aspecto difícil con la conjunción Urano-Plutón no fuera nunca acu-nada o acariciada, dejando aparte el hecho de que sean psicópatas o no.
 
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El lado oscuro del alma, página 50
 
 
Urano y Plutón forman una combinación bastante anarquista, que refleja una necesidad urgente de cambio, renovación, de salvar el medio ambiente y transformar la conciencia mundial.
 
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El lado oscuro del alma, página 52
 
 
¿Os suena la descripción de Winnicott acerca de la madre que alternativamente se muestra demasiado posesiva y luego demasiado indiferente?
 
Es la descripción perfecta de la Luna en oposición a la conjunción Urano-Plutón. Primero se come al niño a besos y después lo abandona, luego otra vez se lo come a besos y otra vez lo abandona. Esto no ocurre porque la madre sea «mala» o poco amorosa. Puede deberse a determinadas circunstancias o a su propia inseguridad. Y tenemos que recordar que ello también denota algo en el interior del niño: una tendencia a la extrema necesidad y también a la extrema independencia, y que esto se experimenta primeramente a través de la madre: el niño se siente alternativamente devorado y rechazado, engullido y abandonado. Este ciclo crea una enorme ansiedad, agravada por la tensión ya existente en el mundo exterior. Si el vínculo con la madre es «suficientemente bueno», un patrón así genera estados cíclicos de ansiedad y diversos tipos de problemas en las relaciones; pero no es «causa», desde luego, de la psicopatía.
 
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El lado oscuro del alma, página 53
 
 
¿Qué ocurrirá si las necesidades de la Luna se bloquean, se lesionan o se ven amenazadas?
 
Se disociarían.
 
Los aspectos lunares problemáticos reflejan normalmente tanto la reacción emocional del individuo como una imagen objetiva del entorno. Pero no sabemos a qué nivel objetivo funcionará esa imagen del entorno.
 
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El lado oscuro del alma, página 56
 
 
La Luna y Neptuno
 
Hay en la personalidad psicopática algo que se disocia del sentimiento y la Luna está conectada de algún modo con esa disociación. Ahora bien: tenemos que preguntarnos si es posible ver esa propensión a la disociación absoluta en un horóscopo. El distanciamiento emocional, cuando es consciente, proporciona indiferencia y esa cualidad no es en sí negativa; puede ser, por el contrario, muy valiosa en el momento y en el lugar adecuado. Pero llevada al extremo, se convierte en disociación permanente o, tal como afirmaba Bowlby, en permanente incapacidad de establecer relaciones a un nivel emocional.
 
¿Qué es lo que buscaríamos en términos astrológicos?
 
La Luna describe nuestra capacidad de establecer contactos a nivel emocional, de empatizar, de identificarnos emocionalmente con alguien. Pensad en lo que probablemente ocurriría si dicho «órgano» de relación con los demás es sometido a una enorme presión. ¿Cómo reaccionáis cuando os veis acorralados emocionalmente, o bajo la amenaza de pasar por una experiencia sumamente dolorosa como el rechazo, el abandono o la muerte de alguien a quien amáis? Cada ser humano posee su propia manera de enfrentarse a esta clase de tensión y la Luna de cada persona responderá de forma diferente según su posición y aspectos. Podemos aprender muchísimo de cualquier planeta de la carta imaginándonos cómo respondería si la persona en cuestión se halla en una situación en que el planeta se ve amenazado o no puede satisfacer sus necesidades.
 
La Luna en aspecto con Urano tiende a desconectar bajo presión.
 
La Luna opuesta a Plutón no se disocia, como tampoco lo hace la Luna en Piscis.
 
Una Luna neptuniana crea fácilmente un mundo de fantasía como alternativa a la realidad. Por eso está ligada tan a menudo al talento creativo. Además, una Luna pisciana adopta de buena gana la posición de víctima. Algunas personas, cuando les hacen daño, se enfurecen y devuelven el daño con creces. Es lo que haría una Luna en Aries o en Escorpio, aunque ésta última suele esperar un tiempo antes de vengarse. En Piscis, por el contrario, la Luna dice: «Claro que me han hecho daño. Todos se dedican a hacerme daño. Es la historia de mi vida». La pasividad y la victimización surgen 52 naturalmente en una Luna pisciana lastimada, especialmente si está en trígono con Neptuno.
 
Un rasgo característico de una Luna en Piscis, al ser otra expresión del patrón de la víctima. La culpa subyace bien en la propia inutilidad, bien en la crueldad de los demás; pero a menudo existe un mínimo sentido de la responsabilidad real basado en la libertad de elección. Sin embargo, la Luna en Piscis no tiende en modo alguno a disociarse.
 
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El lado oscuro del alma, página 58
 
 
La Luna y Urano
 
Los aspectos Luna-Urano no «hacen» de una persona un psicópata. Pero sí indican una tendencia de la naturaleza emocional a desconectar cuando se la somete a una presión extrema.
 
… ésa puede ser una cualidad extremadamente positiva si es consciente. Las personas con aspectos Luna-Urano que son heridos en sus primeros años de vida buscan un mundo uraniano para entender por qué les han hecho daño. Quieren desengancharse de los sentimientos personales provocados por la herida y adquirir un atisbo de un plan mayor en acción, al efecto de poder ubicar su infelicidad en un contexto que haga que la herida no sólo sea soportable sino también comprensible.
 
Éste es el potencial creativo de los aspectos Luna-Urano: buscar un 53 sistema universal en orden a detener el dolor de verse abrumado y adquirir una perspectiva más amplia o más inclusiva en la que cada hombre que sufre llega a encontrar un sentido.
 
Un individuo con un aspecto Luna-Urano intentará extrapolar su sufrimiento personal al contexto de un sistema más amplio.
 
De este extremo del espectro de los aspectos Luna-Urano encontraremos muchos sociólogos, físicos, psicólogos y astrólogos y también muchas personas involucradas en causas humanitarias. Aunque esta expresión de Luna-Urano puede provocar indiferencia, la disociación no es ni absoluta ni permanente en circunstancias normales. Del otro tenemos a aquellos individuos que desconectan de cualquier sentimiento de empatía o de identificación con los demás, así como aquellos que culpan siempre «al sistema» de su propia y fría brutalidad.
 
Esto es una forma de proyección: el propio McVeigh muestra en sí mismo las cualidades que dice odiar en el gobierno. La disociación puede convertirse en el primer mecanismo de autodefensa en determinados casos, y puede volverse permanente y absoluta. No podemos saber únicamente a través de la carta si ese aspecto tomará una dirección creativa o destructiva o una mezcla de ambas. ¿Describe este aspecto a alguien que, sometido a una presión emocional extrema, simplemente debe tener espacio para respirar y distanciarse al efecto de poder manejar la situación? Eso es bastante común;
 
Si los padres no pueden comprometerse, el niño Venus-Saturno aprenderá a devaluar los sentimientos, particularmente los suyos propios. Si los padres acostumbran a mentir, el niño Mercurio-Júpiter o Mercurio-Neptuno aprende igualmente a mentir y devaluar la importancia de la verdad en los intercambios sociales. Si los padres cuidan al niño realmente poco, ¿para qué iba el niño Luna-Urano a aprender a cuidar? Todo lo que interiorizamos del ambiente de nuestros primeros años se pega como una lapa a las configuraciones de nuestra carta y las corporeiza, poniendo carne en los huesos de las mismas. A veces esa carne está corrupta, aunque los huesos no lo estén.
 
La polaridad extrema de Luna-Urano parce ser un gran problema: miedo a ser engullido y miedo al abandono, ambos a la vez.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 59
 
 
La Luna y Plutón
 
¿Qué hacen las personas Luna-Plutón cuando se ven sometidas al dolor y a una presión intolerable?
 
Destruir.
 
Todo se convierte en una lucha por la supervivencia para las personas Luna-Plutón, y la vida es experimentada como algo muy peligroso en el mejor de los casos. Luna-Plutón es agudamente consciente de la mortalidad en la vida, así como de los inevitables finales y nuevos comienzos. Las reacciones emocionales son intensas y es virtualmente imposible responder de una forma blanda o superficial ante cualquier cosa que experimentamos como dolor o amenaza. Esto puede ser muy creativo cuando lo encontramos en una persona que puede utilizar esa percepción de lo que hay debajo de la superficie de las personas de una forma creativa. Puede convertir a alguien en un excelente psicoterapeuta o sanador, o un soberbio actor, artista o escritor que aporta profundidad, nervio y pasión en su trabajo creativo. Éste es el lado positivo del espectro de Luna-Plutón.
 
Las personas Luna-Plutón son psicólogos natos.
Prácticamente desde el inicio de la vida existe una gran sensibilidad a lo que no se ve ni se oye. El mundo invisible es percibido primeramente en el ámbito familiar y los niños Luna-Plutón son siempre conscientes de las dinámicas inconscientes que operan en el trasfondo de la familia.
 
Es un gran error que los padres intenten engañar al niño Luna-Plutón acerca del real estado de las cosas, puesto que las mentiras son percibidas como traiciones amenazantes para la vida.
 
El lado negativo de Luna-Plutón es la paranoia.
 
La vida está tan llena de peligros que la única opción es golpear primero antes de ser derribado. Los agravios se acumulan y cuidan amorosamente y la venganza parece ser la única manera de liberar la presión.
 
Como ocurre con todos los aspectos, no podemos decir basándonos sólo en la carta si los aspectos Luna-Plutón se expresarán de forma positiva, negativa o de ambas.
 
Los aspectos Luna-Plutón pueden reflejar a una madre poderosa, muy perceptiva, que expresaba sentimientos y pasiones intensas de una forma muy sincera. También puede reflejar a una madre manipuladora y destructiva, necesitada de mantener un poder absoluto sobre el niño. Puede reflejar a una madre afectuosa y cariñosa pero muy deprimida por la situación de la economía familiar, por una enfermedad crónica, la pérdida de alguien muy querido o un matrimonio infeliz. No podemos saberlo basándonos sólo en la carta.
 
Muchas personas poseen esta misma imagen psicológica y la expresan dentro de unos límites relativamente estables y unas relaciones más o menos cariñosas, o a través de una amplia variedad de rabietas, manipulación, luchas de poder, celos intensos y rencorosas tácticas «de castigo» cuando se sienten agraviados. Todas ellas son bastante desagradables, pero muy humanas. Sé que es difícil realizar estas distinciones, pero es importante que lo intentemos.
 
Los niños Luna-Plutón son siempre muy sensibles a cualquier amenaza velada en el entorno, porque son muy receptivos a los niveles profundos y oscuros de la vida. Debido a que sus propias emociones poseen una fuerza aterradora, a menudo las proyectan y son fácilmente engullidos por un progenitor posesivo o emocionalmente exigente. ¿Pero qué es un progenitor «emocionalmente exigente»? ¿Y de quién son las exigencias? ¿Del hijo o de la madre?
 
La astrología nos está diciendo que esa madre que engulle descrita por el aspecto Luna-Plutón es también una cualidad presente en el niño, quizá compartida por ambos, pero de ninguna «originada» por la madre. Reconocer esto puede ayudar a cualquier persona a aceptar la responsabilidad por sus actos y usar el habitual ciclo Luna-Plutón de resentimiento y depresión para algo más creativo. Pero si la madre de carne y hueso —no la descrita por la carta— muestra lo peor de Plutón en su comportamiento, entonces un entorno hiriente exacerbará los miedos de Luna-Plutón y los hará aparecer como muy reales. Si el entorno es extremo, el resultado puede ser muy destructivo.
 
La polaridad extrema de Luna-Plutón parce ser un gran problema: miedo a ser engullido y miedo al abandono, ambos a la vez.
 
Cuando la identificación con la madre se representa a través de un aspecto Luna-Plutón, puede resultar algo complicada. Si él es capaz de sentir lo que ella siente, si se identifica con ella y las emociones de ella son salvajes, él se siente al mismo tiempo víctima y amante-confesor sustituto. Por tanto, él tiene problemas graves porque ha interiorizado algo profundamente venenoso y perturbador; y así, el mundo de «ahí fuera» posee ese mismo carácter venenoso y amenazador.
 
La oposición Luna-Plutón es un aspecto separativo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 56-65
 
 
 
 
 
 
 
 
Si alguien nos ataca, nuestra reacción será la que describa Marte, porque Marte es el combatiente, el que moviliza todos los factores de la carta para asegurar nuestra supervivencia. La posición por signo y casa y los aspectos de Marte nos dirán cómo encajaremos el ataque. Marte en Aries opuesto a Plutón reaccionará de forma distinta a Marte en Piscis en cuadratura con Neptuno.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 16
 
 
Normalmente el narcisismo está vinculado con una grave perturbación del vínculo con la madre, combinada con un Sol y una Luna afligidos en la carta natal. Es el conjunto de esos factores el que sugiere que hay dificultades en la formación de un contenedor del ego sólido.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 64
 
 
Si los padres no pueden comprometerse, el niño Venus-Saturno aprenderá a devaluar los sentimientos, particularmente los suyos propios. Si los padres acostumbran a mentir, el niño Mercurio-Júpiter o Mercurio-Neptuno aprende igualmente a mentir y devaluar la importancia de la verdad en los intercambios sociales. Si los padres cuidan al niño realmente poco, ¿para qué iba el niño Luna-Urano a aprender a cuidar? Todo lo que interiorizamos del ambiente de nuestros primeros años se pega como una lapa a las configuraciones de nuestra carta y las corporeiza, poniendo carne en los huesos de las mismas. A veces esa carne está corrupta, aunque los huesos no lo estén.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 66
 
 
Un Marte en ebullición necesita de disciplina. Marte-Júpiter y Marte-Urano necesitan que les enseñen dónde están los límites, porque al ser personas muy fogosas, presionarán al límite todo el tiempo.
Si los límites son como una mousse de chocolate y los límites cambian de un día para otro porque los padres son demasiado cómodos para aguantar la rabieta del niño, o los esfuerzos por imponer una disciplina se alternan entre lo pegajoso y lo brutal, el niño nunca descubrirá sus propios límites. Un día el niño hace algo y le dan una bofetada y al día siguiente por el mismo comportamiento le dan un dulce. ¿Cómo puede el niño desarrollar así un sentido del autocontrol?
Scott Peck denomina sin tapujos «mal» a lo que en realidad son actos de cobardía de los padres. Finalmente, la suma de esos pequeños males se asienta en la psique familiar para producir, al cabo de algunas generaciones, algunos males realmente enormes.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 68
 
 
La forma en que los padres desarrollan su propio temperamento innato proporciona el modelo para que el niño desarrolle su propio temperamento interno. No es que los padres escriban sobre una página en blanco y sean los «causantes» de la psicopatía. Se trata de que los padres proporcionen un modelo de cómo vivir con integridad, lo cual puede ayudar a compensar hasta la más difícil configuración de una carta natal. Todos los padres cometen errores, y muchos de ellos no valen para criar niños, incluso con la mejor de las intenciones. Algunos son verdaderamente horribles. Pero no todos esos padres horribles crían psicópatas, aunque todos los psicópatas suelen venir de unos padres horribles —como señala Masterson, uno o ambos padres ya son psicópatas ellos mismos—, de manera que el niño no encuentra una manera de enfrentar los elementos destructivos inherentes en su naturaleza.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 69
 
 
El mal causado por el hombre es el tema que en realidad tratamos cuando hablamos de psicopatía. No hablo del mal en un sentido teológico. Ésa es una cuestión completamente diferente e incluso más difícil. No obstante, en nuestra cultura puede ser apropiado llamar «mal» a la psicopatía porque la psicopatía destruye a gente inocente, física o psicológicamente, o ambas.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 70
 
 
Cuando un individuo muestra un comportamiento violento es bueno preguntarnos qué es lo que se ha activado en la carta. Si podemos encontrar la configuración que se activa y el tránsito por el cual lo hace, podremos llegar a entender algo del significado de esa configuración.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 71
 
 
Muchas personas que cometen abusos sexuales lo hacen porque de niños fueron víctimas de los mismos abusos. Esto no es sorprendente. ¿Pero por qué ciertas personas, fuera de quienes sufrieron abusos durante su infancia, se convierten en abusadores? Es un gran misterio el que una persona que sufrió abusos busque sanar esas heridas y se convierta en sanador él mismo, mientras que otra persona sigue con su vida y muestra reacciones de miedo o agresividad en áreas específicas de la vida y una tercera se convierte en un terrorista o en un asesino en serie sin remordimiento alguno. Como astrólogos debemos mirar la carta y preguntarnos: «¿Hay algo aquí que nos dé una pista?». La carta natal nos dice mucho tanto de cómo reaccionamos a nuestras experiencias como de lo que somos nosotros por naturaleza, dado que ambas cosas son realmente lo mismo. Pero no tengo idea de si la carta contiene en sí misma suficientes pistas como para responder a las cuestiones más profundas.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 72
 
 
La polaridad extrema de Luna-Urano y Luna-Plutón parce ser un gran problema: miedo a ser engullido y miedo al abandono, ambos a la vez.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 73
 
 
La capacidad de utilizar los sentimientos como instrumento de adaptación al medio es específicamente un don del elemento Agua, si bien este don suele ir de la mano de la empatía en la mayoría de la gente con un fuerte elemento Agua. Dicha capacidad, combinada con la falta de empatía, en cambio, da como resultado a un cruel manipulador.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 74
 
 
Ciertamente Manson se acerca más al prototipo «clásico» de psicópata en la línea de Hannibal el Caníbal. Pero incluso en este caso no podemos mirar la carta de Manson y decir: «He aquí a un psicópata». Podemos decir, ciertamente: «He aquí a alguien que es probable que padezca serios problemas emocionales».
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 75
 
 
Marte-Neptuno es un aspecto corriente entre actores y músicos dotados y puede otorgar el don de crear verdadera magia a cualquier intérprete a causa de su capacidad de «convertirse» en otras personas e intuir por dónde van sus sentimientos y anhelos. Como cualquier otro aspecto planetario, posee un doble filo. Pero hemos de examinar con cuidado el tema de la crueldad potencial en relación a Marte-Neptuno. El aspecto en sí no hace cruel a la gente, pero uno de los factores principales de la crueldad es la necesidad de transferir a otros los sentimientos propios de debilidad e impotencia. El comportamiento psicopático está conectado con la crueldad. El psicópata siente placer al humillar a otros. Hay una especial delectación en saber que uno tiene poder sobre los demás, lo que a su vez está conectado con insoportables sentimientos interiores de impotencia. Si uno se siente impotente, tiende a compensar ese sentimiento teniendo poder sobre alguien más. Uno de los aspectos menos atractivos de este sentimiento es la pedofilia. La razón es que los niños son pequeños y vulnerables; y si uno se siente una víctima infantil dentro de un cuerpo de adulto, una forma de sentirse mayor y más fuerte es abusar de un niño. Es una proyección de la sensación de desamparo sobre otra persona. Si uno puede librarse de ese sentimiento, se puede hinchar y parecer más grande. Una de las raíces de la crueldad es el sentimiento interior de ser una víctima desde niño.
 
Por supuesto que Marte-Neptuno puede ser un aspecto tremendamente creativo, siempre que uno sea suficientemente consciente para reconocer y contener los sentimientos de debilidad que se presentarán cíclicamente y sienta el suficiente compromiso y aplique la disciplina necesaria para expresar la energía a través de canales imaginativos. Pero si el aspecto se combina con otros factores como una estructura de la personalidad infantil y una propensión a la desconexión emocional, puede volverse muy cruel. En esa forma, Marte-Neptuno puede ser tanto víctima como victimario, pero ambos tienen la misma raíz. Son dos caras de la misma moneda.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 75
 
 
La frecuencia estadística del abuso durante la infancia en los psicópatas nos dice claramente acerca de esa victimización que, sea de uno u otro tipo, es un componente fundamental de la personalidad psicopática. Aunque debemos recordar que no todos los que han sufrido abusos se convierten en psicópatas, es un importante factor ambiental. Normalmente estas personas han sido humilladas y sometidas a actos crueles desde la más tierna edad y llevan la pesada carga de esos sentimientos. Estas personas no curan y no creen tener poder alguno, de manera que han de crear la ilusión de que sí lo tienen, aunque sea de la forma más despiadada. Todo lo que hace falta para provocar su rabia y sentimientos de humillación es una pequeña frustración. La intolerancia a la frustración es, como hemos visto, una de las características principales del psicópata. Es insoportable, absolutamente humillante que uno tenga que pedir trabajo, como no lo es menos trabajar a las órdenes de alguien porque ese horrible sentimiento de impotencia se ve activado una y otra vez. La crueldad es así un intento de equilibrar la balanza.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 76
 
 
Marte-Neptuno se siente víctima porque se siente débil, no al revés.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 77
 
 
La Luna en la casa X indica una poderosa identificación emocional con la madre.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 77
 
 
Mucha gente con la Luna en la casa X se sienten vinculados al colectivo, con la «gente corriente» y quieren aportar algo al colectivo de una forma que alimente o apoye el cambio creativo en el mundo. Esto se relaciona con la madre porque, desde el inicio de la vida, la madre es el mundo. Más que describir la Luna en la casa X como la necesidad de ser alguien importante en el mundo exterior, yo diría que es la necesidad de pertenecer, de sentirse parte de la sociedad, de ver los sentimientos propios reconocidos y gratificados por la gente de «ahí fuera».
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
Los psicópatas son con frecuencia mediadores de aquellos aspectos rabiosos y destructivos del colectivo que permanecen en éste de forma inconsciente y sin ser integrados.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
Al igual que los aspectos natales, los aspectos progresados nos hablan de cómo reaccionamos a las experiencias, así como de la forma en que se simboliza la naturaleza de la experiencia.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 81
 
 
Un único aspecto no es la causa de la psicopatía.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 81
 
 
El regente del Ascendente es la personificación del signo en el cual cae éste. Utilizando un lenguaje mítico, diríamos que es el dios que preside el nacimiento de uno.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 82
 
 
En muchos cuentos de hadas aparece un ser sobrenatural o deidad presente en el nacimiento del niño, que derrama sobre él sus particulares bendiciones. Pero el niño debe crecer y buscar conscientemente esas bendiciones, o luchar por obtenerlas, o esperar pacientemente hasta el momento adecuado. La idea de que un determinado espíritu, hada o dios preside el nacimiento de cada uno es muy antigua. Es una deidad tutelar y esta deidad —que en astrología llamamos «planeta»— es el gobernador del sendero individual en el mundo exterior.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 82
 
 
Cualquier persona con un signo regido por Venus en el Ascendente ansía la belleza, el placer y el contacto con los demás. Las personas regidas por Venus anhelan gustar. Son criaturas sociables, tanto si es Tauro como si es Libra el signo ascendente. Quieren que la vida sea fácil y encantadora. La definición de la belleza y los niveles en que ésta se busca, difieren para Tauro y Libra; pero el ideal sigue siendo la belleza. Este es el mundo que las personas venusinas desean al nacer.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 82
 
 
Sobre Saturno
 
Ahí donde esté Saturno emplazado, sentiremos que nunca obtenemos lo que deseamos. El signo y casa en que Saturno se ubica describe cualidades y experiencias que nos importan profundamente. Esas cualidades y experiencias nos hacen sentir más fuertes y seguros. Esto forma la base de nuestro sentido de la realidad encarnada.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 83
 
 
Saturno en la XI busca la encarnación a través del grupo, pero de algún modo el grupo nunca parece acogerle bien. Parte de las razones para que esto ocurra es que las expectativas de Saturno no pueden ser satisfechas por los demás. Ser querido por todos no es una meta hacia la que Saturno nos permita caminar, «El grupo» debe ser algo más serio que un entorno superficial para alternar y pasarlo bien.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 83
 
 
Las personas con Saturno en la casa XI necesitan una profundidad en el contacto humano que sólo llegará con la madurez. Necesitan aprender a ser autosuficientes y valorar a aquellas personas con las que pueden comunicarse auténticamente, más que simplemente ser populares. En algunas culturas esto se dificulta mucho debido a los valores colectivos. Un niño estadounidense con Saturno en la casa XI puede sufrir más que un europeo con el mismo emplazamiento, porque se considera la extroversión como norma en la cultura de Estados Unidos. Se entiende que un niño es inadaptado o problemático si no tiene cientos de amigos. En Europa un niño puede ser introvertido, introspectivo y solitario y no por ello se le tacha de anormal. He aquí un ejemplo de la difícil mezcla entre entorno externo y naturaleza interna del niño en una mezcla difícil.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 84
 
 
Si queremos explorar las raíces de la psicopatía, debemos desandar el camino y volver incluso a momentos anteriores al nacimiento.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 85
 
 
 
 
 
La Luna y Quirón
 
Quirón se relaciona con un sentimiento de herida incurable, una herida que proviene del colectivo pero que se siente de forma muy personal. No debería sorprendernos encontrar conjunciones, cuadraturas u oposiciones Luna-Quirón en cartas como la de Hitler.
 
¿Pero qué hay en los trígonos Luna-Quirón que se refleja de algún modo en la personalidad psicopática?
 
El trígono sugiere que puede resultar fácil desconectar del dolor de los sentimientos, reemplazándolo por un frío cinismo. Uno se puede identificar pasivamente con el papel de víctima: «Estoy herido y no tiene remedio». Las experiencias quironianas, como las de todos los demás planetas, implican un proceso de desarrollo y tienen el potencial de atravesar diferentes fases. Hay una fase inicial de rabia y culpa: el sentimiento de haber sido injustamente herido, dañado o lisiado, y llenado de negra amargura por su causa. Con una mayor conciencia esta etapa puede transformarse en una experiencia de sufrimiento sin rabia, y finalmente uno puede llegar a un lugar de profunda compasión y aceptación filosófica. Mucha gente se queda atascada en la fase de rabia y culpa y, debido a un trígono, pueden ser perfectamente inconscientes de ello. Quirón puede ser muy destructivo si uno no abandona el ideal contra el cual se mide la propia herida. En el mito, Quirón es medio dios y medio animal. El lado divino, que refleja al maestro y al sanador, conlleva una visión de un mundo perfecto, un ideal de evolución humana y de sabiduría final. El lado del caballo, que proporciona la energía vital, es instintivo y vulnerable. Aquí es donde Quirón es 82 herido y envenenado por la sangre de la Hidra. La Hidra representa las dimensiones más oscuras y destructivas de la psique; y el sufrimiento de Quirón se conecta con la brecha aparentemente insalvable entre lo que los seres humanos quieren en realidad y esa noble y hermosa visión de la civilización humana gobernada por la razón divina. La herida refleja nuestra desesperación al enfrentarnos al dilema entre lo que queremos y en lo que creemos, y lo que experimentamos en la vida a través de la ceguera humana. Tener un trígono Luna-Quirón puede significar que el veneno sigue en el sistema y que no hay ímpetu para luchar contra él. Un buen paralelismo se puede ver en la forma en que el cuerpo humano lucha contra la infección. Los abscesos son la forma que tiene el cuerpo humano de expulsar la inflación. Son muy dolorosos, pero son una señal de que la infección ha sido localizada y el pus puede ser eliminado y así la sanación puede tener lugar. Pero a veces la infección permanece oculta en el sistema, causando una fiebre debilitante, pero de pocas décimas y sin provocar suficiente incomodidad como para que la persona busque tratamiento. No duele, pero la energía vital es drenada constantemente. Si pensáis en esta analogía desde el punto de vista psicológico, veréis que un trígono Luna-Quirón puede operar como una infección psíquica de carácter leve. Hay una gran amargura oculta en el alma que nos arrebata toda la alegría y la esperanza, pero la amargura nunca se muestra claramente. Todo ello conduce al cinismo y la desconexión, más que a la clase de sufrimiento que puede llevar a la compasión y a la liberación. Por supuesto, esto no significa que todos aquellos que poseen un trígono o sextil Luna-Quirón en su carta vayan a pasar por este proceso, ni tampoco que los aspectos difíciles generen automáticamente conciencia del problema. Tanto los aspectos fluidos como los difíciles pueden llevar a la capacidad de comprender y empatizar con el sufrimiento. Pero si la amargura pasiva del aspecto fluido se combina con otros factores destructivos de la carta y el individuo no es consciente de ninguno de los dos, el resultado puede abarcar gran parte de lo que es terreno reconocido de la dinámica interna de la psicopatía. Ésta puede ser la razón de que 83 los aspectos Luna-Quirón aparezcan con tanta frecuencia en las cartas de los asesinos en serie.
 
Como Luna-Urano o Luna-Saturno, Luna-Quirón tiene la habilidad de desconectarse de los sentimientos dolorosos.
A veces esto parece justificarse por el hecho de haber sido chivo expiatorio: «¿Por qué debería sentir nada por esas personas después de todo lo que me han hecho?».
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 86
 
 
La Luna y Saturno
 
¿Por qué son tan frecuentes los aspectos Luna-Saturno en las cartas de los asesinos psicópatas?
 
Éste es un aspecto que puede reflejar un fuerte sentido de la responsabilidad y capacidad para enfrentarse a una frustración considerable. No obstante, en nuestra lista clínica la incapacidad de aceptar responsabilidades y de enfrentarse a la frustración son factores muy importantes de la personalidad psicopática.
 
¿Qué hacemos con esta contradicción?
 
A menudo nos encontramos con un problema de falta de cuidados durante la infancia. La autosuficiencia de Luna-Saturno es una defensa. Si nunca te has sentido cuidado emocionalmente, la frustración será siempre una acusación contra el mundo.
 
Mucha gente con aspectos Luna-Saturno en su carta se siente profundamente aislada. Como no se sintieron cui-dadas emocionalmente durante su infancia, no esperan la generosidad de los demás y por tanto les resulta difícil pedir ayuda o expresar sentimientos de vulnerabilidad. Esto puede generar una gran cantidad de resentimiento y sentimientos de ser despreciado o maltratado por el mundo; aunque, como tú dices, esto se esconde tras una fachada de autosuficiencia.
 
Las personas Luna-Saturno se manejan muy bien con los límites.
 
Las personas con aspectos Luna-Saturno son a veces muy fuertes y autosuficientes, y se defienden muy bien de quienes pretenden aprovecharse de ellos. En mucha gente funciona de forma muy positiva si es un aspecto integrado. Estas personas saben contener sus emociones y enfrentarse a sus propios problemas. Saben que nadie regala nada y son realistas respecto de sus propios límites y de los de los demás. No obstante, al igual que los aspectos Luna-Quirón, pueden crear un sentimiento de ser víctima. Si el aspecto no está integra-84 do y Saturno se proyecta sobre los demás, escucharemos por parte de estas personas un lloriqueo continuo: «Nadie me va a ayudar nunca. Tengo que hacerlo todo por mí mismo. La gente es egoísta y fría. La vida me ha tratado con dureza». Como los aspectos Luna-Quirón, los aspectos Luna-Saturno describen un proceso y pueden moverse dentro de un espectro bastante amplio: desde el resentimiento infantil hacia la fuerza que dan la sabiduría y el conocimiento de la naturaleza humana. También y como ocurre con todas las combinaciones planetarias, mucha gente exhibe una mezcla de ambas y no podemos determinar, solamente con la carta, lo que cada persona acabará haciendo con ese aspecto.
 
Los aspectos Luna-Saturno pueden sentir que todo el mundo se aprovecha de ellos y sentirse terriblemente vulnerables, porque existe una dificultad en interiorizar una imagen positiva de la madre. La madre puede haber sido percibida como fría e inaccesible. La persona puede haber sido el hijo mayor, cargando con la tarea de cuidar de sus hermanos pequeños, o tal vez ha sido el hijo único, sin hermanos con los cuales poder entablar una comunicación. A menudo también nos encontramos con una gran soledad en la infancia y no hay oportunidad de mostrarse alegre e irresponsable. A veces Luna-Saturno es el retrato de un niño que ha sido abandonado literalmente; incluso en los casos en que los padres puedan estar presentes, la perspectiva interior es con frecuencia de orfandad. Si el dolor es lo suficientemente grande, Saturno puede reprimir la necesidad lunar de contacto con los demás. Saturno le dice entonces a la Luna: «Ni se te ocurra pensar en pedir nada a nadie. Esos bastardos volverán a darte con la puerta en las narices».
 
El individuo Luna-Saturno puede ser terroríficamente orgulloso y puede acabar adoptando el aislamiento como estilo de vida.
 
Si una persona Luna-Saturno se siente profundamente herida, ¿cuál podría ser su reacción más característica?
 
Podría confirmar su cínica visión respecto de los demás.
 
Nunca más volverían a confiar en nadie.
 
La desconfianza y el resentimiento serían la norma a partir de entonces. Así, la persona Luna-Saturno dirá: «Nunca más volveré a necesitar a nadie ni dejaré que nadie se acerque demasiado a mí. Nunca más dependeré de nadie. Nunca nadie volverá a tener el poder de controlarme».
 
Los aspectos Luna-Saturno hacen que uno sea muy autoprotector. Puedo percibir este aspecto inmediatamente al conocer a personas que lo tienen, porque siempre me hacen sentir que no les hago ninguna falta. Son tan fríos… Te mandan el mensaje de «No quiero tener nada que ver contigo».
 
Las personas Luna-Saturno se ponen rápidamente a la defensiva. Defenderse de la vulnerabilidad puede llevar, en ciertos casos, a la total disociación de los sentimientos.
 
Estas personas rechazan porque tienen miedo de ser rechazados y ésa es la potencial tragedia de este aspecto. La persona Luna-Saturno a menudo crea sin quererlo la situación que más teme y no se da cuenta de que es la causante de su propio aislamiento. Están tan aterrados por el rechazo y la humillación que levantan muros muy espesos entre ellos y los demás, o exigen tantas garantías a una pareja que ésta sale corriendo. La desconfianza de una persona Luna-Saturno puede ser muy dolorosa. Cualquier esfuerzo por ofrecerles calidez y apoyo puede terminar en crítica despiadada o la acusación de que uno no ha ofrecido suficiente. Finalmente, uno deja de intentarlo. Las personas Luna-Saturno son a menudo responsables de sus problemas de relación. Una persona Luna-Saturno común, aunque no tenga nada que ver con una persona Luna-Saturno psicópata, puede tener miedo de expresar sus necesidades emocionales y eso hace que tanto amigos y parejas comiencen a sentirse de más y que no son necesarios.
 
Este aspecto contribuye a la formación de un perfil psicopático si confluyen otros factores.
 
Una de las maneras más creativas de trabajar con los aspectos Luna-Saturno es darse permiso para sentirse deprimido, solo y aislado. Desconectar de esos sentimientos no es una buena idea, si bien puede ser inevitable desconectar de vez en cuando.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 86-91
 
 
Por debajo de la desconexión encontramos la más terrible de las soledades y aislamiento. El psicópata preferirá mantener las cosas como están; y este espléndido aislamiento se vuelve parte del sentimiento grandioso de ser alguien especial y superior al resto de seres humanos con sus patéticas necesidades emocionales. Otros podrán dejarse manipular a través de sus necesidades; pero el psicópata está decidido a no ser vulnerable de ninguna manera.
 
Cuanto más socialmente conscientes somos, más nos disociamos de los sentimientos destructivos.
 
Cuanto más nos horrorizamos de cualquier tipo de crimen violento, tanto si es a nivel individual como colectivo, más psicópatas parecen llevarlo a cabo por nosotros.
 
No estoy sugiriendo que no deberíamos sentirnos profundamente perturbados por la violencia, la crueldad gratuita y la falta de remordimiento. Pero sí tenemos que ser honestos respecto de la existencia esos elementos en nosotros mismos.
 
Hemos llegado en la actualidad a tal extremo en la corrección política que la proliferación de crímenes particularmente brutales que salen en las noticias puede constituir la sombra que arrastramos tras nosotros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 91
 
 
Laing tenía la teoría de que los esquizofrénicos eran los portavoces de la sociedad: ellos escenifican la locura en nuestro lugar mientras nosotros perpetuamos la ilusión de que somos personas sanas15. En determinados enfoques de terapia familiar se reconoce que en el contexto de una familia perturbada o disfuncional a menudo existe el «paciente identificado», que escenifica los conflictos presentes en la psique familiar. El «paciente identificado» es entonces forzado a seguir un tratamiento, mientras todos los demás se congratulan de seguir siendo normales. Lang creía que la esquizofrenia no es sólo un asunto de familia, sino que involucraba a toda la sociedad porque en el nivel inconsciente colectivo todos formamos una unidad. Es posible que el psicópata, que no es considerado un loco como el esquizofrénico, tenga no obstante la misma función que el esquizofrénico en un nivel colectivo y escenifica algo de lo que como colectivo no admitimos como propio y a lo que no nos queremos enfrentar. Los psicópatas son supervivientes: se han adaptado a la cara más brutal de la vida de una forma que les ha permitido desconectar emocionalmente. Su método nos parece horriblemente frío y cruel. A pesar de ello, podemos tener un vínculo cuyo reconocimiento podemos soportar y eso puede verse reflejado en nuestra fascinación por novelas y películas que tratan del tema. Es como mirar un espejo aterradoramente distorsionado y ver nuestras caras reflejadas en él. Esto se hace evidente al analizar sus cartas y observar la prominencia de los planetas exteriores tanto como configuraciones que reflejan sufrimiento personal y disociación.
 
El lado oscuro del alma, página 94
 
 
Muchos grandes dictadores encajan en la descripción clínica de la psicopatía. Algunas personalidades psicopáticas se convierten en portavoces del colectivo de forma pública, debido a que ese colectivo específico se halla en estado de descomposición física e identifica al psicópata como redentor. No podemos entender la trayectoria de determinados individuos sólo a través de su historia personal
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 95
 
 
Los ciclos en que intervienen los planetas exteriores, o de Saturno o Quirón con un planeta exterior son sumamente importantes en el nivel colectivo porque reflejan crisis o puntos de inflexión en la psique colectiva.
 
Aquellos que han nacido bajo configuraciones como éstas a menudo dan cuerpo a la tensión y el conflicto activos en el mundo que les rodeaba al nacer.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 95
 
 
Los ciclos Quirón-Plutón abarcan sesenta años desde su conjunción. He investigado un poco sobre ese tema y he llegado a la conclusión de que los brotes colectivos de caza de brujas tienen lugar cada vez que estos dos planetas inician un nuevo ciclo. Cuando el instinto de supervivencia colectivo plutoniano se alía con el sentimiento quironiano de herida incurable, parece irrumpir en el colectivo un mecanismo de defensa: hay que purgar al chivo expiatorio. Este mecanismo, tanto en personas como en colectivos, es un intento de zafarse del sentimiento de inferioridad de Quirón proyectándolo —y por tanto eliminando— a aquellos que, por su raza o tradición cultural o religiosa, son percibidos como «diferentes». El contexto mítico del chivo expiatorio nos dice que, como símbolo, el chivo expiatorio carga con los pecados de la sociedad. Si el chivo expiatorio es purgado, la sociedad entera es purificada y vuelve a ser una unidad. Las conjunciones Quirón-Plutón se vinculan a episodios históricos en que el colectivo se ve arrastrado por la compulsión de purgarse a sí mismo y se localizan dependiendo de la carta nacional en que esta conjunción se desencadena. Procesada mediante la mentalidad de un líder psicópata, una compulsión como ésa puede llevar al genocidio. También puede ser una configuración en que se lleve a cabo una profunda transformación. Pero ese potencial es más fácil de alcanzar a través de individuos conscientes de ese potencial que no mediante colectivos que han permitido llegar al poder a un psicópata.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 96
 
 
Los dictadores psicópatas como Stalin, Hitler y Milošević alcanzan el poder político cuando su patria los necesita.
 
¿Cuándo necesita un país un gobernante psicópata? Quizá esas personas llegan al poder cuando el conjunto de la nación se siente humillado e impotente y cree que su supervivencia está amenazada. Ésa es la posición de un niño que ha sufrido abusos sexuales. Incluso si la humillación y la amenaza no son reales, lo importante es el sentimiento subjetivo. Cuando un psicópata mata no está amenazado por su víctima; pero la necesidad interior de aquél dictamina que todo el mundo es enemigo y por tanto golpea antes de ser golpeado. Una nación, lo mismo que un individuo, puede reaccionar ante el abuso real o imaginario de la misma manera y puede, por un tiempo, exhibir un gran odio y tendencias destructivas y no sentir ningún remordimiento a posteriori. Así ha ocurrido a lo largo de la historia y aún hoy a muchas naciones —incluidas Inglaterra y Estados Unidos, a quienes no se les caen de la boca los «elevados principios morales»— les resulta difícil reconocer y procesar su propia destructividad a un nivel interno e individual.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 98
 
 
Hay un gusto por la experimentación en Marte-Urano que, de ordinario, podemos considerar sumamente creativo. La persona Marte-Urano es un inventor: le encanta probar cosas nuevas y aceptar retos que le fuercen a descubrir algo nuevo. Pero si esta cualidad inventiva es autónoma respecto de la empatía, se parece más a quitarle las alas a una mosca para ver qué sucede. Marte-Urano no es, en sí mismo, un rasgo propio de la psicopatía, ni muestra tampoco una crueldad innata. Pero cuando se presenta en la carta de un psicópata, puede expresarse de la forma en que lo hizo Mengele: experimentación sin remordimiento.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 101
 
 
Cuando la Luna está en la casa IV, existe un profundo arraigo con el colectivo nacional y una fuerte conexión con el lugar que a uno lo vio nacer. No se trata solamente del padre personal, que nos sirve como gancho para esa identificación. Es la tierra misma. Las personas con la Luna en la casa IV sufren muchísimo cuando se desarraigan, por más que deba ser una experiencia necesaria en orden a llegar a ser un individuo consciente y separado.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 103
 
 
El signo en que se halla el Plutón de cada generación nos dice algo acerca de lo que ese grupo considera importante para sobrevivir. Para la generación de Plutón en Géminis, la supervivencia implica saber tanto como fuera posible. La supervivencia supone también movilidad, la capacidad de escaparse, de disfrazarse, de ser más listo que los demás
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 106
 
 
Saturno representa algo sumamente valioso para la persona, algo que desea desesperadamente, aunque piensen que como nunca lo tuvo en la infancia ya nunca lo va a tener. Sienten que les han quitado algo precioso para ellos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 106
 
 
La Luna en Escorpio necesita mucha cercanía emocional de un tipo particularmente intenso.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
La Luna en la casa VI necesita que cada día haya orden y estructura para sentirse emocionalmente segura,
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 109
 
 
El Sol y la Luna
 
En la antigüedad se creía que el ojo derecho estaba regido por el Sol y el izquierdo por la Luna.
 
El trígono Sol-Luna es el aspecto que yo denomino «y vivieron felices para siempre jamás». Es muy benigno, pero suele haber mucha autocomplacencia y cierta petulancia tras él, así como un rechazo a mirar el lado desagradable de la vida. El trígono Sol-Luna describe el equilibrio entre el sentido de propósito individual y las necesidades emocionales. Trabajan conjuntamente y en armonía. La persona que posee un trígono o un sextil en su carta entre los luminares cree que en general la vida es —o debería ser— armoniosa. El don de este aspecto es que estas personas tienen el poder de generar armonía su alrededor. Pero esperan que la armonía florezca por doquier y se sienten terriblemente conmociona-dos cuando se han de enfrentar a una realidad menos armoniosa. De hecho, evitan enfrentarse con la realidad durante años, describiendo a un progenitor que fue violento o abusó de ellos como «maravilloso» y borrando voluntariamente el sufrimiento y humillación de su relato. Es un aspecto hermoso, a menos que los padres de uno le creen un infierno. En ese caso, la ceguera puede ser peligrosa y puede contribuir a una escisión entre una vida de fantasía propia de Disney y el horror de la experiencia real de uno.
 
El Sol y la Luna son significadores de los padres y, con el trígono, el sextil y la conjunción, es perceptible que los padres luchan por mantener una apariencia «normal». Pero tras esa fachada puede estar sucediendo cualquier cosa, incluyendo el abuso sexual de los propios hijos. Hay una creencia profundamente arraigada en la «familia feliz», tanto en los padres como en el hijo. En sí misma no es una creencia negativa; pero si la persona con ese trígono nace en una familia gravemente disfuncional, los padres pueden estar diciendo una cosa y sintiendo o haciendo otra distinta, aunque el niño no pueda creer que nada esté realmente mal y todo vaya perfectamente. Entran todos en lo que en la jerga psicológica se llama «estado de negación».
 
La persona con una cuadratura u oposición Sol-Luna dice: «Bueno, ya se están peleando otra vez. Las relaciones son un campo de batalla. Existe una innata asunción de que las relaciones requieren lucha para funcionar. Interiormente hay un conflicto entre metas personales y sentimientos y esto suele venir reflejado por el matrimonio de los padres. Se acepta el hecho de que uno debe luchar para tener un momento de verdadera paz y armonía. Pero cuando el Sol y la Luna están en trígono, sextil o conjunción, se asume además que todo tendrá un final feliz. Mamá y Papá volverán a vivir felices juntos y el mundo será entonces un lugar maravilloso. La naturaleza del trígono Sol-Luna es extremadamente agradable porque son personas esencialmente optimistas y quieren que la gente a su alrededor sea igualmente feliz.
 
Los eclipses son desencadenantes que liberan energía y se consideran catastróficos sólo cuando intervienen configuraciones ominosas en el eclipse. Y no todas las conjunciones Sol-Luna son eclipses. Los eclipses solares ocurren dos veces al año, cuando la Luna Nueva se alinea con cada extremo del eje nodal. Además, las conjunciones Sol-Luna ocurren una vez al mes. No hay nada de intrínsecamente siniestro en ellas.
 
Nuestras percepciones y reacciones ante la vida están basadas en nuestra díada Sol-Luna, que describe aquello a lo que aspiramos a convertirnos como individuos y lo que necesitamos en orden a sentirnos vinculados a otras personas. Observamos la vida a través de esas dos lentes —desarrollo individual y capacidad de establecer relaciones— y en la astrología clásica se entendía esto literalmente.
 
Si el Sol y la Luna no están en aspecto, estas dos motivaciones interiores funcionan de forma diferente, pero no interfieren la una en la otra. Si están en armonía, creemos que la vida es armoniosa porque no sufrimos ningún conflicto interno. Existe un acuerdo básico entre lo que necesitamos y lo que queremos. Si se forma una conjunción Sol-Luna nuestras aspiraciones y nuestras necesidades emocionales funcionan como una unidad.
 
La gente que ha nacido bajo una Luna Nueva es muy poderosa, porque sus metas y sus necesidades emocionales funcionan como una unidad.
 
La conjunción Sol-Luna es inmensamente creativa, porque la persona está muy concentrada en una sola idea y sin nada que la distraiga. No hay vacilaciones, no hay tensiones internas ni conflictos.
 
Por supuesto, otros aspectos natales pueden reflejar estrés y sufrimiento, pero en el nivel más básico el individuo no se cuestiona si está haciendo o no lo correcto, y espera que eso mismo se refleje en la vida.
 
En el momento de la conjunción Sol-Luna, la Luna se ve oscurecida —la «oscuridad lunar»—, lo que sugiere que la sensibilidad emocional hacia los demás se ve oscurecida por la intensidad del impulso hacia el desarrollo de la identidad. Por eso las personas nacidas bajo una Luna Nueva acaban metidas en problemas con frecuencia. Dan por sentado que todo debería encajar en su visión unificada. Cuando los demás dicen: «Perdona, pero yo también tengo una opinión y no es la misma que la tuya», se sienten desconcertados y molestos. Es una desagradable sorpresa descubrir que los demás son distintos a uno y que la vida no tiene por qué encajar necesariamente en nuestras expectativas. Esto no es en sí mismo negativo, pero sí puede denotar insensibilidad e inflexibilidad, Pero hemos de pensar siempre en los términos de la mezcla química entre una especie de concentración de energías y el ambiente de los primeros años de vida.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 116-119
 
 
Como sociedad, no sabemos qué hacer con los psicópatas. ¿Deberíamos sentir compasión por ellos, ejecutarlos, encerrarlos de por vida o creer en sus promesas de rehabilitación y perdonarlos? No puedo contestar a esa pregunta. Lo que estoy intentando hoy es profundizar en los patrones de comportamiento psicopático para llegar a entender las dinámicas emocionales que generan esos patrones que generan ese comportamiento. Esas dinámicas no están muy lejos de lo que se suele llamar vida interior de la gente corriente. La diferencia estriba en el grado de disociación, que en el caso del psicópata es completo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 117
 
 
¿Qué diferencia hay entre un aspecto Luna-Urano que se disocia completamente y un aspecto Luna-Urano que se desapega de una forma creativa? ¿Qué diferencia hay entre un aspecto Luna-Saturno completamente aislado y un aspecto Luna-Saturno que domina sus emociones, es autosuficiente y a pesar de ello, capaz de establecer relaciones verdaderas? ¿Qué diferencia hay entre un aspecto Marte-Quirón que muestra crueldad y un aspecto Marte-Quirón que trabaja con paciencia e integridad hacia la consecución de una meta positiva?
 
Los aspectos pueden ser idénticos; pero las diferencias existen, ya sea en la disposición de los ingredientes, ya sea en la existencia de un ingrediente extra que cambia por completo la imagen. O tal vez la diferencia estriba en el ambiente familiar en el que uno ha crecido, o en la actitud del individuo, o en su nivel de conciencia. Aún no sabemos de qué se trata y puede que no sepamos nunca. Pero tenemos que formular la cuestión, porque ahí es donde nosotros, como astrólogos, tenemos algo que ofrecer.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 122
 
 
Marte y Quirón
Marte-Quirón sufre siempre frustración, pero el ambiente puede añadir frustración también al punto en que se convierta en una carga insoportable.
 
En una carta natal Marte-Quirón no dice: «Sufriste abuso por parte de los padres y de tus iguales». Todo lo que dirá será: «Hay un sentimiento de frustración alrededor de la expresión de Marte, debido a factores no personales que no están vinculados con la culpa personal y parecen muy injustos». Pero si uno de los padres es un abusador violento, hay toda una gama de reacciones y patrones psicológicos que podrían vincularse a Marte-Quirón, los cuales no se desarrollarían si la experiencia durante los primeros años de vida fuese distinta.
 
La forma en que el entorno interactúa con tu Marte-Quirón es importante.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 122
 
 
La capacidad para elegir puede deberse en parte a algo innato que no figura en la carta. Las personas no nacen todas igual y un mayor grado de inteligencia o de conciencia pueden proporcionar ese «factor X» que no podemos ver en las configuraciones planetarias. Desde un punto de vista más esotérico, otras personas podrán hablar del alma en este contexto.
 
Otro factor relevante puede ser la exactitud de los aspectos difíciles hacia los planetas personales en las cartas de los psicópatas.
 
Claro que los aspectos tensos no crean por sí mismos una propensión a la psicopatía; pero dificultan enormemente a los planetas personales la obtención de espacio para respirar o encontrar vías flexibles de expresión cuando están siendo acorralados.
 
Cuanto más amplio sea el orbe, mayor es la flexibilidad.
 
Los aspectos difíciles entre Marte y Quirón aparecen con frecuencia en las cartas de los criminales violentos.
 
No obstante, muchas personas tienen esos contactos. ¿Cuál es la diferencia?
 
El signo y la casa en que caen esos planetas es claramente decisivo, al igual que la manera en que el aspecto se integra con el resto de la carta. Pero también tenemos que preguntarnos en qué medida interactuó el aspecto con el ambiente familiar temprano. Los padres nos proporcionan modelos; y si el modelo es muy destructivo demasiado pronto, crecemos sin ninguna otra percepción de cómo expresar lo que somos.
 
Los niños que expresan lo que eufemísticamente se denominan «tendencias antisociales» vienen a menudo de padres que todavía son niños. Esa clase de padres no saben cómo refrenar a sus hijos porque a ellos mismos tampoco se les marcó límite alguno en su niñez. Oscilan constantemente entre el desamparo y la violencia, pero son incapaces de poner unos límites definidos.
 
Los niños que expresan lo que eufemísticamente se denominan «tendencias antisociales» vienen a menudo de padres que todavía son niños. Esa clase de padres no saben cómo refrenar a sus hijos porque a ellos mismos tampoco se les marcó límite alguno en su niñez. Oscilan constantemente entre el desamparo y la violencia, pero son incapaces de poner unos límites definidos.
 
Los aspectos difíciles de Marte necesitan frecuentemente límites físicos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 125
 
 
Todos los aspectos planetarios vinculan a los planetas de la carta de por vida, pero si el orbe es amplio, la cuerda que los une es más larga. Cuando el aspecto es exacto, están atados espalda con espalda por los tobillos y las muñecas. Esto también puede ser positivo, pues hace falta un ego fuerte para crear el vehículo adecuado con el que manejar esa intensidad.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
Depende también mucho del carácter de cada uno, pero el ambiente familiar en que uno aterriza tiene una enorme influencia en la manera en que la persona maneja un determinado aspecto de su carta.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 126
 
 
Debió ser un Libra quien dijo que la discreción es la mejor parte del valor.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 128
 
 
Normalmente el psicópata está embarcado en una campaña solitaria contra la autoridad. Esto se relaciona con un comportamiento antisocial y a menudo delictivo.
 
No se siente deprimido, puesto que la disociación es tan completa que no siente nada en absoluto. A menudo abusan de sustancias como las drogas o la bebida, pero no se sienten deprimidos. La capacidad de sentir el dolor del aislamiento parece ser importante. Sentirlo significa que uno ya no está verdaderamente aislado, puesto que está en conexión con sus sentimientos.
 
Los psicópatas son incapaces de sentir su aislamiento.
 
Es una falta absoluta de conciencia.
Un autor lo denomina «ceguera emocional»- No hay conciencia alguna de lo que se siente. Los únicos sentimientos que se reconocen son la ira y la frustración.
 
Una de las características de la personalidad psicopática es que la depresión únicamente sobreviene cuando uno se siente acorralado.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 128
 
 
En la personalidad psicopática, junto a la ira negra y amarga, existe un miedo atroz a sentirse engullido o abrumado tanto por los sentimientos propios como por los de los demás,
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 130
 
 
La creatividad del psicópata se expresa a través de la manipulación.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 132
 
 
El lado oscuro de los signos de Agua era su capacidad de ser sensible con sus propios sentimientos, pero no con los de los demás.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
La idealización puede ser un problema Venus-Neptuno, pero el miedo a ser engullido está vinculado a los aspectos Luna-Neptuno y, a veces, con Luna-Plutón. El otro miedo asociado a la psicopatía es el miedo al abandono, como hemos visto. Los niños que viven con el terror a ser abandonados pueden hacer frente a ese miedo abandonando constantemente a los demás, dado que ellos no están realmente en peligro. Esto se conecta con la tendencia a disociarse. Hay algo en el interior de la personalidad psicopática que dice: «Ya no puedo enfrentarme a ese terror. Nunca más voy a depender de nadie».
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 130
 
 
El miedo al rechazo no es específico de ningún aspecto en particular. Si la carta contiene configuraciones en las que intervienen, de un lado, la Luna o Venus con Plutón o Neptuno, y Saturno, Quirón o Urano del otro, puede existir un gran conflicto entre sentimientos de dependencia y la necesidad de autonomía. Es un dilema bastante común y puede crear patrones de relaciones típicos. En el momento en que uno se siente demasiado apegado, da un paso atrás para recuperar el control.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 131
 
 
Si buscáramos indicios de crueldad y violencia extremas, esperaríamos encontrar una Luna muy afligida y un Marte muy incómodo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
Todas las cartas que hemos visto hoy, presentan en sus ángulos a planetas exteriores interviniendo en configuraciones poderosas con el Sol o la Luna y hemos visto que la receptividad al colectivo es también un factor importante. Una vez que estas personas se tuercen, no se pueden enderezar. Y eso ocurre verdaderamente pronto. No sé si existe un componente genético en la psicopatía. Ciertamente existen determinadas configuraciones astrológicas que reflejan un cierto tipo de sensibilidades y ciertos tipos de defensas, que en la mayoría de las personas conducen a las neurosis más normales que todos podemos padecer; pero por si no os habíais dado cuenta, aquí no existe «lo normal». No obstante, entre el comportamiento neurótico de lloriqueo de Luna-Saturno, la irritación de Marte-Quirón, la ansiedad de Luna-Urano o la desconfianza Venus-Plutón y la psicopatía hay un largo trecho. Las configuraciones astrológicas son las mismas y, sin embargo, al igual que las dinámicas psicológicas que la astrología retrata. Pero en el psicópata se opera una dislocación terrible de estos aspectos y se convierten en algo aterrador.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
CORDURA Y LOCURA
 
 
Como astrólogos vamos a encontrarnos con el tema de la locura constantemente en nuestro trabajo. Y aquellos de vosotros que estéis preparados para aguantar la verdad reconoceréis que nosotros mismos, al igual que todos los que trabajan en profesiones de ayuda, no siempre somos capaces de mantenernos dentro de lo que se entiende por cordura. Como dice el dicho: «Todo el mundo está loco menos tú y yo. A veces, incluso, dudo de ti».
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
¿Qué aspecto tiene la locura en el horóscopo? ¿Era inevitable en la gente que la padece? ¿Tiene algún potencial creativo? ¿Se puede ubicar en el tiempo? Necesitamos examinar cartas natales, sino también progresiones y tránsitos que pueden estar activos en el momento en que una persona entra en un estado de locura.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
Es verdad que hay determinadas configuraciones que podrían indicar dificultades al procesar cierto tipo de experiencias; y cuando esa vulnerabilidad se combina con las condiciones ambientales adecuadas, el resultado es que los estados psicológicos carecen de todo contacto con aquello que nos complacemos en llamar «realidad». Pero incluso una afirmación cautelosa como ésa está llena de dificultades. Aunque lleguemos a ver patrones muy interesantes en los horóscopos que vamos a examinar hoy, no vamos a ser capaces de todos modos de dictaminar sólo con la carta de alguien que ese alguien está o va a volverse loco.
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 141
 
 
En el siglo IV a. C., Hipócrates y sus discípulos «humanizaron» la locura y la hicieron descender del mundo de los dioses a los dominios del cuerpo humano —aunque también se entendía que el cuerpo estaba hecho de materia divina y que estaba bajo las correspondientes influencias astrológicas—- La medicina hipocrática explicaba la salud y la enfermedad en el contexto de los cuatro humores presentes en el cuerpo humano: sangre, bilis amarilla, flema y bilis negra. Estos fluidos influían en los ritmos del desarrollo y modificaban tanto el cuerpo como la psique. Los humores se correspondían en el macrocosmos con los cuatro elementos: aire (sangre, temperamento sanguíneo), fuego (bilis amarilla, temperamento colérico), tierra (bilis negra, temperamento melancólico) y agua (flema, temperamento flemático). Estos vínculos antiguos entre fisiología, psicología y astrología son de gran importancia para nosotros al efecto de entender la manera en que las imágenes planetarias reflejan todos los niveles del ser humano.
 
Se entendía que el hundimiento de la salud en la enfermedad física, psicológica, o ambas, ocurría cuando uno de los cuatro fluidos vitales se incrementaba o disminuía hasta niveles peligrosos. Los médicos griegos creían que la manía provenía de exceso de sangre o bilis amarilla, mientras que la depresión surgía de un exceso de bilis negra. Si traducimos eso a los términos de la carta natal, un exceso o una falta de énfasis en un elemento en particular puede ser uno de los factores que necesitamos tomar en consideración en términos de los posibles significadores de la locura.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 144
 
 
Areteo de Capadocia, un contemporáneo de Galeno que vivió en el siglo I de nuestra Era, se considera como el primer médico que identificó lo que hoy se conoce como depresión maníaca o trastorno bipolar.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 145
 
 
En el estado de éxtasis dionisíaco uno se quita su persona, su posición en la sociedad, su dignidad y su corrección política. Ciertas sociedades entienden estas situaciones, razón por la cual celebran anualmente su carnaval. Ya no existen las fiestas Dionisias ni las Saturnales, si bien el carnaval es su equivalente moderno. En tiempo de Carnaval, tanto en Río, como en Venecia, Zurich o Basilea la gente sale a la calle a emborracharse o a colocarse. Se visten con ropas extraordinarias y se comportan como no lo harían en toda otra circunstancia. Llevan máscaras para no ser identificados con su imagen del ego. Se abandonan a experiencias emocionales y sensuales y esa liberación les permite sentirse renovados. La música y la danza han sido siempre una parte fundamental de este tipo de liberación, desde los festivales del amor libre de 1960 hasta las modernas fiestas rave de la actualidad.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 155
 
 
El artista necesita vivir cerca del reino de lo arquetípico, porque esa es la fuente de la inspiración creativa. Sin ese contacto, el artista no puede canalizar las imágenes del inconsciente colectivo y la inspiración se marchita.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 159
 
 
Los contactos Venus-Saturno pueden reflejar una gran inseguridad y un bajo sentimiento de autoestima. Esto, por sí mismo, no conduce a la obsesión erótica. Pero los contactos Venus-Saturno pueden jugar un papel cuando el individuo se ve empujado a crear compulsivamente situaciones en las que es continuamente rechazado. Algunas obsesiones tienen base en esto, sobre todo cuando subyace un complejo de Edipo respecto de un progenitor que nunca estuvo disponible. Venus-Saturno parece aparecer de la nada cuando existe una obsesión con un objeto completamente fuera del alcance. No es un aspecto apasionado, pero sí puede ser un elemento importante de lo que Freud llamó «repetición compulsiva». En los casos de erotomanía hay otros aspectos que también están habitualmente presentes, a menudo involucrando a Neptuno y Plutón. La Luna en un aspecto difícil con Neptuno o Plutón puede ser relevante para la erotomanía y a veces la Luna es activada por los tránsitos de uno o de ambos planetas exteriores al inicio de una obsesión así. Esto ocurre así porque este tipo de locura está conectado con el cuerpo y los instintos, ambos parte de los dominios lunares. La Luna puede jugar un importante papel en la locura de Afrodita. Pero quiero recordaros una vez más a todos que estos aspectos, por sí solos, no son indicadores de locura. Es la aleación química entre carácter inherente y ambiente lo que parece proporcionar la clave.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 162
 
 
La obsesión está conectada con Plutón.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 162
 
 
El tema principal de la fantasía erotómana tiene relación con el amor román-tico y la unión espiritual más que con una genuina atracción sexual.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 164
 
 
El objeto de amor posee normalmente un status superior y es normalmente un completo desconocido para la persona erotómana, del que se tiene noticia únicamente a través de los medios. Son comunes los esfuerzos por contactar con el objeto de amor, y el resultado puede ser un acoso, aunque el erotómano puede mantener su fantasía en secreto,
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 164
 
 
El objeto de amor posee normalmente un status superior y es normalmente un completo desconocido para la persona erotómana, del que se tiene noticia únicamente a través de los medios. Son comunes los esfuerzos por contactar con el objeto de amor, y el resultado puede ser un acoso, aunque el erotómano puede mantener su fantasía en secreto.
De todos los casos reales que se han producido, se deduce que los hombres afectados por esta clase de locura infringen más la ley que las mujeres en la misma situación, normalmente durante la búsqueda errónea del ser amado para «rescatarlo» de algún peligro imaginario. Las mujeres pueden ser más tranquilas a ese respecto, aunque también pueden intentar ponerse en contacto con el objeto de amor mediante persistentes cartas y llamadas telefónicas. Lo que distingue este estado de la simple fascinación romántica es una inconmovible obsesión. El rechazo no la desanima, como tampoco la imposibilidad provocada por las circunstancias. La erotomanía puede ser terrorífica para la víctima debido a su carácter absoluto; y en casos extremos puede llegar hasta la violencia,
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 164
 
 
Los psicópatas no se creen ellos mismos enamorados de sus víctimas. No sienten nada en absoluto por las personas a las que destruyen. La erotomanía rebosa de sentimiento, aunque se trata de un sentimiento divorciado de la realidad.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 164
 
 
Las configuraciones planetarias nos hablan del contexto arquetípico, pero éste debe ser entendido en un marco de referencia mayor, que es el ambiente de sus primeros años de vida y las normas de la sociedad en la que la persona vive.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 171
 
 
Saturno también es una bella fuerza dadora de vida en la proporción y lugar adecuados; y astrológicamente este planeta refleja la integridad y la necesidad de estructuras y límites.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 174
 
 
Una nación, al igual que un individuo, puede sufrir debido a una estructura del yo dañada o sin formar que es incapaz de mantener un equilibrio entre dos poderes arquetípicos que colisionan. El origen de la locura en la familia, en la sociedad y, finalmente, en el individuo, no se puede reducir a la idea simple de que el ego está bloqueando algo proveniente del inconsciente. Dos impulsos arquetípicos, igualmente poderosos y válidos, están en guerra, y el ego debe encontrar la manera de mediar entre ellos. Cuando esto no es posible, aparece la psicosis. Por más que un ego rígido sea un componente importante de la locura, centrarse solamente en éste nos hará perder de vista la naturaleza arquetípica del conflicto.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 179
 
 
Ni siquiera, una persona víctima de una crianza terrible que dañó el desarrollo de su ego, carga con su propio conflicto arquetípico dentro de sí. La función del ego es mediar y, finalmente, transformar esas fuerzas dándoles una forma creativa. Puede que no seamos capaces de hacer esto porque no poseemos suficiente sentido del yo para mantener el equilibrio; y en cambio, podemos exagerar el conflicto tomando partido por uno de los poderes en detrimento del otro, incluso siendo conscientes de que ambos están dentro de nosotros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 179
 
 
Es bueno notar que el astrólogo romano Manilio, que estableció las regencias zodiacales más a los dioses que a los planetas, asignó Acuario a Hera, a la que los romanos llamaban Juno. Es interesante también saber que asignó Neptuno a Piscis, mil ochocientos años antes de que lo descubrieran. Aunque sus regencias zodiacales no son útiles en la práctica de interpretación astrológica, las connotaciones simbólicas son muy relevantes, debido a que esas deidades zodiacales contienen algo de la esencia del signo que rigen. Así, Acuario, como todos sabemos, está relacionado con el funcionamiento de un grupo a nivel social. Representa aquellas organizaciones sociales que se imponen al comportamiento del grupo, permitiendo así al individuo solar de la casa V relacionarse con sus semejantes en un contexto colectivo. El regente tradicional de Acuario es Saturno; y, de hecho, Hera muestra muchas características de Saturno.
 
Parece que tiene mucha relación con la posesividad.
 
La perspectiva de Hera funciona a un nivel muy profundo en todos los seres humanos. No tiene sentido discutir si esta perspectiva es «acertada» o «errónea». Es una perspectiva arquetípica y, como todas las perspectivas arquetípicas, es «correcta» en tanto en cuanto se mantenga en equilibrio con otras perspectivas. Como he dicho, éste es el verdadero tema de la imagen griega del panteón olímpico. Los dioses riñen y se pelean entre ellos, pero finalmente son una familia que busca formas creativas de resolver sus conflictos. Las discusiones acerca del patriarcado y de la inferioridad de la mujer son importantes respecto de las deidades masculinas, una de las cuales — Urano— muestra un particular disgusto por todo lo que se haya encarnado—. Pero esto tiene poco que ver con Hera. Si en nuestra cabeza no tenemos otra cosa que argumentos políticos sólo vamos a encontrar en Hera rasgos negativos. Por ello decimos que Hera es opresiva. Pero el término «opresión» se suele trompetear cuando uno no obtiene lo que quiere.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 181
 
 
Todos los dioses son injustos y sexistas de una forma u otra y podríamos decir lo mismo de los planetas. Éstos representan fuerzas naturales, y cada una de ellas busca satisfacer sus impulsos de acuerdo a su naturaleza, así que tarde o temprano entran en conflicto. Cada una de las energías representadas por los dioses se dirige a la completa expresión de su ser y todas ellas provocan desequilibrios. Cualquiera que sea el planeta o la deidad con la que nos identifiquemos, el resto parecerá equivocado o represivo cuando entre en conflicto con nuestros deseos. Este debate ha sido muy ilustrativo, porque subraya en qué punto nosotros tendemos a polarizarnos. La persona que se vuelve loca se ha polarizado en grado extremo y cualquiera que sea la deidad favorecida, las rechazadas siempre tomarán represalias exigiendo entrar por la fuerza en el mundo del ego. Naturalmente que esto es sexista, si queréis decirlo así. Podríamos decir también que Saturno es un paranoico, la Luna padece de trastorno alimenticio, Mercurio es un mentiroso compulsivo, Venus es promiscua y Júpiter un maníaco depresivo, Neptuno un drogata y Urano un psicópata. Todos ellos tienen problemas, como nosotros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 182
 
 
Los estados de locura, ya se deslicen hacia el destructivo dominio del crimen o que sean esencialmente benignos, reflejan la irrupción de fuerzas arquetípicas, que los griegos representa-ron como dioses. Ninguno de esos dioses es intrínsecamente malo o patológico, pero posee sus filias y fobias naturales y lucha siempre por la supremacía. El ego consciente se yergue en medio de todas esas poderosas fuerzas y actúa al mismo tiempo como pararrayos y como alambique alquímico. Si el ego se colapsa al enfrentarse a esas fuerzas colectivas, aparece lo que llamamos locura.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 182
 
 
Artemis, como Hera, a veces transforma a sus víctimas en animales cuando es ofendida. Normalmente se la conoce como deidad lunar; pero al igual que Hécate, una diosa ctónica del inframundo, es más plutoniana que lunar. Aunque Artemis es la diosa de los partos, desde luego no está relacionada con la tierna y nutricia imagen de la Luna que aparece en la mayoría de textos astrológicos tradicionales. La dimensión lunar relativa a los lazos familiares cae en los dominios de Hera, mientras que Artemis-Hécate es la cara salvaje y oscura de la Luna, la Señora de las Bestias. Su reino es el corazón del bosque primigenio, por donde se supone que no caminan los hombres. Artemis-Hécate se muestra a menudo en tríada, representando las tres fases de la Luna: creciente, llena y menguante. Artemis-Hécate preside la brujería, la magia, los secretos del inframundo y el reino de los muertos. Esos dominios están prohibidos para los humanos. Artemis es representada a veces como una diosa virgen, lo que significa que es inviolable.
 
Psicológicamente, ¿qué es lo que estamos observando?
 
Suena como si estuviera conectada con Lilith, la Luna Negra.
 
Sí, Artemis tiene un parecido con Lilith. Como me ocurre con otros planetas hipotéticos, tengo problemas para interpretar algo que no está realmente ahí, dado que eso genera dudas acerca de la fuente y de la validez del supuesto emplazamiento del «planeta». Yo asocio a Artemis-Hécate con cualidades plutonianas, o con una combinación de la Luna y Plutón. Artemis no es una deidad esencialmente perversa o destructiva. Otorga su benefactora protección a los niños y a los animales. Pero al igual que otras deidades que hemos explorado en el contexto de la locura, puede ser vengativa con quien se cruce en su camino. Su mayor enemigo en el mito son los hombres arrogantes…
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 183
 
 
Los tres planetas exteriores reflejan necesidades, aspiraciones e ideas colectivas. Simbolizan energías en la psique del grupo que son enormes e indiferenciadas. Cuando un individuo está fuertemente conectado con los planetas exteriores es fundamental que exista un ego consciente, porque el ego debe ser lo suficientemente fuerte como para contener y mediar entre el grupo y esas fuerzas colectivas. Si el ego no puede manejarse con esas energías, la personalidad se ve abrumada y el individuo está «poseído» por esas emociones e ideas colectivas tan arcaicas. El individuo deja de ser un individuo y se convierte en portavoz del colectivo. El artista también se convierte en portavoz del colectivo, así como muchos líderes políticos; y como todos sabemos, unos cuantos de entre ellos están locos. Pero mucha otra gente que no es política ni artista puede convertirse involuntariamente en portavoz de las energías colectivas porque el ego es incapaz de canalizarlas.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 188
 
 
La psicopatía uraniana
 
Urano simboliza nuestras ideas colectivas de progreso; y cuando se apodera del ego, refleja un tipo particular de locura que implica una visión global de un orden perfecto. En su mejor versión Urano, canalizado por un ego consciente con firmes valores individuales, puede contribuir con brillantez e inspiración creativa en esferas como la ciencia, la psicología, la sociología, todos ellos campos en los que una determinada filosofía refleja el progreso hacia unos perfectos orden y diseño cósmico. Si Urano se apodera del ego, el individuo seguirá siendo brillante, pero también puede ser exageradamente destructivo debido a que está muy desconectado de la realidad humana.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 188
 
 
En ocasiones puede atisbarse la visión uraniana en la esquizofrenia. Las fantasías de muchos esquizofrénicos están relacionadas con seres de un orden superior, usualmente extraterrestres, que dan instrucciones para erradicar todos los elementos pecaminosos y malvados de la sociedad humana. A veces esas fantasías son extravagantes pero inofensivas. Otras veces pueden conducir a la violencia, porque adoptan la forma de «voces» que exigen que determinados tipos de humanos sean eliminados en orden a mantener la pureza del planeta. En un nivel más creativo, el mundo uraniano también aletea tras el trabajo de los mejores escritores de ciencia ficción; aquí la locura uraniana encuentra su expresión más creativa a través de la mediación del artista. El monstruo de Frankenstein es una visión uraniana;
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 188
 
 
La locura uraniana refleja una visión cósmica de la perfección, desprovista de sentimiento y de contacto humano; o, en otras palabras, completamente disociada. Es posible que el estado que denominamos psicopatía, que en los viejos tiempos se solía llamar «inferioridad moral», se relaciona con estos estados de completa disociación, y a Urano, juntamente con Quirón y Saturno, parece sucederle con una frecuencia inusual cuando está conectado con la Luna en las cartas de los psicópatas27.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 189
 
 
En la actualidad la psicopatía es considerada como un desorden de la personalidad y normalmente no se considera como locura. Esto es así porque probablemente no es que el psicópata sea incapaz de enfrentarse con la realidad, sino todo lo contrario, que lo hace aterradoramente bien. Pero no hay absolutamente ninguna conexión con los demás seres vivos y por tanto el remordimiento es el gran ausente al cometer el psicópata esos actos destructivos. La psicopatía puede mostrarse en diversos grados y no todos los psicópatas son asesinos a sangre fría. Para que cualquier terapia con ellos sea eficaz debe crearse algún tipo de relación efectiva entre terapeuta y paciente, así como que exista en éste un deseo verdadero de ser ayudado. El psicópata ni desea ser ayudado ni parece capaz de establecer ningún tipo de relación absolutamente con nadie. Engañar al terapeuta forma parte de la diversión. La psicopatía es, por tanto, un estado de locura, quizá uno de los más potentes, pero a menudo es irreconocible como tal porque el individuo psicópata normalmente es encantador y creíble como persona. No parece un loco conforme a la definición predominante del término. El debate sobre si la psicopatía tiene un carácter genético o está vinculada a presiones del ambiente sigue en su apogeo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 189
 
 
Como astrólogos únicamente podemos reconocer que a menudo existe un elemento uraniano en la psicopatía, lo que significa que al menos una parte de la ecuación es inherente. La psicopatía uraniana es particularmente evidente en la práctica del genocidio. En el momento en que un líder político entiende que el fin justifica los medios (acudiendo al socorrido «no se puede hacer una tortilla sin romper unos cuantos huevos»), el ego ha sido eyectado y Urano ha tomado el control.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 190
 
 
¿Qué es lo que hace que Urano irrumpa como una deidad furiosa?
 
Un exceso de Saturno.
 
La raíz verdadera de la locura uraniana no es el idealismo. Es nuestro materialismo corto de vista y el deseo de controlar la vida.
 
La furia de Urano puede estallar también por un exceso de identificación con las emociones y los instintos. Si los instintos primarios han tomado el control y un colectivo se ha hundido en la oscuridad y la desesperación, el uraniano dictador loco surgirá como respuesta a la necesidad colectiva de un mundo perfecto.
 
Urano sobresale en esta clase de estallidos allí donde la energía vital es rígidamente retenida por estructuras saturninas o por las necesidades primordiales plutonianas de supervivencia.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 190
 
 
La perfección es la parte uraniana.
La obsesión es la parte plutoniana.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 192
 
 
La locura uraniana está conectada a menudo con una visión de la perfección tal que hace imposible aceptar la vida tal cual es.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 192
 
 
Venus-Quirón, como Venus-Saturno, carga a menudo con un sentimiento de inferioridad física o falta de atractivo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 192
 
 
a Luna nos habla acerca de lo que necesitamos para sentirnos seguros e instalados.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 193
 
 
Los pensamientos repetitivos y compulsivos son otra variedad de defensa saturnina y pueden ser mucho más aterradores; pero sólo cuando esos rituales o pensamientos se vuelven tan compulsivos que se apoderan de la vida de uno podemos decir con propiedad que eso es un estado de locura.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 201
 
 
Las características jupiterianas se hacen evidentes en los episodios maníacos del ciclo bipolar. Pero muchos jupiterianos son así todo el tiempo. Asumen riesgos, están en ebullición, rebosan confianza en sí mismos y confían en su intuición y su suerte sin razón aparente alguna; su inquietud y entusiasta búsqueda del placer reflejan la naturaleza esencia del mítico gran rey de los dioses. También ellos caen en una depresión de vez en cuando si sus sueños se revelan inalcanzables o son obligados a esperar resultados.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 204
 
 
Los aspectos difíciles entre Júpiter y Saturno, un Júpiter poderoso conviviendo en la misma carta con un Saturno igualmente poderoso, o un énfasis al mismo tiempo en Sagitario y Capricornio pueden tener su reflejo en los altibajos entre la euforia y la presión; y reconciliar ambos extremos puede llevar muchos años al individuo. Pero la depresión maníaca grave sí lleva al terreno de la locura y tanto el propio individuo como las personas que lo rodean la sufrirán profundamente. Tenemos que explorar por qué un grado «normal» de variación emocional que refleja una dicotomía específica en la carta natal, puede volverse tan extrema que ambos lados del espectro operan fuera de control e inundan el ego consciente. No hay acuerdo entre los psiquiatras acerca de las causas de la depresión maníaca, aunque se acepta generalmente que su origen se halla en una combinación de factores como el temperamento innato, la herencia genética y el ambiente de los primeros años de vida. El extremo orgánico del espectro psiquiátrico hace hincapié naturalmente en la inestabilidad de origen bioquímico, que se piensa interfiere en la transmisión de impulsos nerviosos desde el cerebro.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
Los aspectos Saturno-Neptuno, a menudo asociados con la creatividad, reflejan una creciente fricción entre el ego-máscara y las aguas caóticas de la psique colectiva. Estos aspectos pueden ser inmensamente creativos cuando Saturno proporción a estructura al reino neptuniano de la imaginación, pero pueden ser aterradores cuando Neptuno parece erosionar los sólidos muros creados por la realidad saturnina. Característica de estos aspectos es también una enorme ansiedad flotante y estos aspectos están conectados con frecuencia con fobias e hipocondría, las cuales reflejan el terror a ser invadido por poderes desconocidos e invisibles.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 78
 
 
La casa VI está relacionada con la integración entre la psique y el cuerpo; y allí donde hay conflicto o dificultades para adaptarse a la realidad cotidiana, los síntomas pueden aparecer mostrando hipersensibilidad física o psíquica.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 209
 
 
A veces un ego vulnerable está relacionado con un elemento ausente, pero también puede estarlo con unos planetas determinados.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 210
 
 
El ego como centro de la conciencia está simbolizado por el Sol en la carta natal, pero Saturno también es un factor muy importante, conectado con la capacidad del ego de contener emociones poderosas. Los planetas interiores también son relevantes para el ego,
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 210
 
 
Los planetas interiores también son relevantes para el ego, especialmente la Luna, que tiene sus raíces tanto en el cuerpo como en las relaciones con los demás.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 210
 
 
Las adicciones destructivas están normalmente conectadas con un ego dañado o sin madurar. Son una forma de compulsión. El individuo se siente desvalido y atrapado en algo incontrolable que emerge e inunda la conciencia. No es una locura en el sentido usual del término, aunque tampoco estoy usando la palabra «elección» en su sentido usual. A menudo el adicto elige rechazar la ayuda y justificar la adicción a través de racionalizaciones diversas.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 213
 
 
La conjunción Venus-Urano exige únicamente la perfección.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 215
 
 
La oposición Venus-Quirón nos muestra que la percepción de la belleza está dañada.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 215
 
 
Vivimos en un mundo enloquecido, y estamos locos nosotros mismos si esperamos que el mundo reaccione con cordura.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 215
 
 
Marte aislado es como un «misil despistado», conectado con unos impulsos agresivos profundamente inconscientes que bullen hasta desparramarse en una persona que normalmente no muestra ira o agresividad y que de ordinario es civilizada y moderada.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 216
 
 
Un planeta o configuración puede ser suprimida, pero no porque no tenga aspectos sino porque crea conflicto con otras áreas de la carta. Y a veces un planeta o configuración están bien integrados en la carta, pero la familia rechaza por completo esa faceta de uno. Sea cual sea la razón de esa disociación, ese componente inconsciente de la personalidad buscará, tarde o temprano, una salida en la vida del individuo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 218
 
 
Muchos estados de locura están conectados con la irrupción de un complejo. Pero a veces la energía del complejo no destruye la estructura del ego de una forma tan dramática. Se puede exteriorizar de una forma extrañamente sincronizada y terroríficamente persistente. La fobia parece atraer siempre el objeto causante del miedo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 221
 
 
Un complejo puede estar muy cargado y contener una enorme cantidad de energía; y si esta energía no tiene otra salida, puede frac-turar la personalidad y precipitar la caída en un brote psicótico. Inunda el ego y destruye la relación del individuo con la realidad externa.
 
Muchos estados de locura están conectados con la irrupción de un complejo. Pero a veces la energía del complejo no destruye la estructura del ego de una forma tan dramática. Se puede exteriorizar de una forma extrañamente sincronizada y terroríficamente persistente. La fobia parece atraer siempre el objeto causante del miedo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 210
 
 
La locura puede definirse como un complejo que ha irrumpido desde el inconsciente y se ha apoderado de la personalidad. Pero si el ego es suficientemente fuerte y el complejo no es completamente destructivo, la energía suprimida del complejo se puede exteriorizar.
 
En ese caso uno empieza a atraer situaciones externas que reflejan con exactitud la misma dinámica psicológica de un estado psicótico.
 
Cuando esto ocurre no llamamos loca a la persona, pero lo cierto es que en alguna parte del inconsciente hay un rincón de locura que se ha manifestado en el plano material. Los componentes arquetípicos de jun complejo parecen tener la capacidad de atraer objetos y acontecimientos físicos. Es como si hubiera conexiones energéticas entre todos los niveles de la realidad a través del significado simbólico, lo que incluye formas de vida tan básicas como los insectos. La idea tiene sus raíces en el antiguo concepto de sympatheia, en que se basa la astrología. Dado que todo en la vida forma parte de una unidad, todo está interconectado a través de cadenas de significado. Así, por ejemplo, tenemos el concepto de que el color rojo, el planeta Marte, las glándulas suprarrenales del cuerpo humano y la emoción de la agresión forman todos parte de la misma cadena de significados. Una avispa puede igualmente formar parte de esa cadena.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 222
 
 
La locura exteriorizada en las relaciones
 
Nuestra propia locura se puede exteriorizar por sí misma a través de la gente con la que nos relacionamos. Eso es muy común y nos permite sentirnos cuerdos porque vemos claramente que la otra persona está loca. Podemos casarnos con alguien que ya está loco o que puede volverse loco más tarde. O puede que un niño se comporte como un loco en lugar de los padres, que son los verdaderos dementes. En la práctica psiquiátrica suele ocurrir una broma muy pesada: los padres llevan a terapia al niño, al esposo o a la pareja, que se comporta como un demente. En el momento en que el paciente empieza a mejorar, la familia quiere arrancarle del tratamiento. Eso es porque el resto de la familia ha invertido energía en que uno de sus miembros exprese la locura que sienten todos en su lugar. Si ese individuo no la estuviera expresando, provendría del resto de personas que están contribuyendo inconscientemente a la situación. Si uno tiene tendencia a relacionarse con personas que están pasando por estados sumamente perturbados, es probablemente una buena idea ver lo que está pasando en el interior de uno. La presencia en la propia vida de una persona demente no significa que uno esté llegando al extremo también de volverse loco; pero sí es posible que la misma deidad furiosa que se expresa a través de la persona demente pertenezca también a uno mismo y que deba ser traída a la conciencia.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 223
 
 
El Sol es crucial para tener una clara comprensión del ego.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 225
 
 
Un trígono de Agua refleja un anhelo por la fusión y una apertura natural al inconsciente colectivo.
 
El gran trígono de Agua nos habla de un ego cuya estructura es, por naturaleza, bastante porosa, No es débil, pero sí fluida y fácilmente invadida.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 224
 
 
Marte es la clave de la supervivencia individual.
 
Marte parece ser importante para cualquier tipo de progreso.
 
Marte se muestra de forma taimada cuando no le dejan hacerlo abiertamente.
 
La ira marciana es uno de los cimientos del ego.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 227
 
 
Luna-Saturno tiende a percibir el rechazo en situaciones en que los demás realmente no le rechazan.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 228
 
 
Por más que pueda existir una situación objetiva representada por los significadores parentales en la carta, el significado real es subjetivo: así es como el niño percibe el entorno y hemos de entender la naturaleza y la finalidad de una tal percepción para dotar de sentido a los patrones de comportamiento que derivan de ella.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 228
 
 
Saturno siempre nos exige que encontremos en nuestro interior el alimento emocional; y cuando forma un aspecto difícil con la Luna no es fácil tomar conciencia del cariño y de los cuidados que nos proporcionan los demás.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 228
 
 
Ninguna cosa que demos a un niño Luna-Saturno será suficiente para calmar esa necesidad.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 230
 
 
Cuando la Luna se halla en Acuario, el signo de Urano hay una gran necesidad de distanciamiento y separación.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 231
 
 
Mucha gente experimenta una crisis en momentos puntuales señalados por determinados ciclos astrológicos: alrededor de los veintiún años, cuando Saturno forma cuadratura a su posición natal y Urano forma también cuadratura a su posición natal, a los veintinueve, con el retorno de Saturno; en mitad de la vida, cuando Urano se opone a su posición natal y Saturno hace igualmente lo propio con la suya. El papel de Saturno se volverá más evidente cuanto más profundamente exploremos lo que estos estados de crisis implican. Con frecuencia el individuo emerge reforzado y más integrado de lo que era antes de la crisis. Ésta es la razón de que en psicología transpersonal la crisis se considere una posibilidad de progreso con una finalidad positiva, en vez del reflejo de una «enfermedad mental».
 
Como astrólogos, nos encontraremos con clientes que están al borde de la crisis, en medio de una o saliendo de ella, o viviendo con alguien o en pareja con alguien que está en medio de una. A veces la crisis toma la forma de una depresión severa: el individuo está incapacitado por la depresión y ya no puede funcionar en el mundo. Puede existir un intento de suicidio o sobrevenir una apatía extrema y simplemente, no se quieren levantar de la cama. A veces la crisis es un estado más grave, que implica rabia extrema, gritos, lágrimas o alucinaciones incontrolables. Cualquiera que sea la forma que adopte, la conciencia del ego es hecha pedazos por la erupción de emociones inconscientes que ya no se pueden contener. Si la crisis es algo puntual y no parte de un problema mayor como la esquizofrenia, entonces es posible volver a casa mediante la activación de recursos internos. El individuo puede necesitar aislamiento del mundo en general y alguien que le escuche, más que medicación. La medicación es muy útil a corto plazo si se producen intentos sucesivos de suicidio, o si la persona está tan perturbada o asustada que es necesario forzar un estado más calmado previamente a una intervención terapéutica. La psiquiatría ortodoxa suele ignorar la importancia de la contención y confía mucho más en la medicación. Ésta puede tanto mejorar como empeorar la situación, porque hay personas muy sensibles a la medicación y acaban deprimiéndose mucho más de lo que estaban, puesto que se sienten físicamente hechos polvo. Desafortunadamente, hoy es casi una lotería y uno estar o no de suerte dependiendo del terapeuta en cuyas manos caiga.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 243
 
 
Una crisis suele ser un intento por parte de la psique de desmantelar una estructura de la personalidad que no es viable. Esto ocurre normalmente cuando se ha desarrollado un «falso yo» en vez de estructura del yo auténtica y sólida. El individuo es forzado a convertirse en otra persona, debido a que las presiones familiares o del entorno violan la personalidad real del sujeto. Se abre entonces una grieta intolerable entre los niveles profundos de la psique y el «falso yo» que se presenta ante el mundo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 244
 
 
Finalmente, el inconsciente emerge de las profundidades y hace añicos la falsa estructura, no porque la persona esté «enferma», sino porque algo sano y real exige que se le dé expresión. Hemos visto la cuestión en el contexto de los dioses griegos, que simbolizan profundos patrones propios del destino individual. Desafortunadamente, la familia puede ser la única que no lo entienda así, dado que son las expectativas familiares las que han llevado al individuo a construirse un «falso yo». Tristemente, puede ser la familia la que intente apartar o minar el trabajo terapéutico si eso significa enfrentar los conflictos familiares de una forma más honesta. Volvemos así a territorio de Ronnie Laing. Normalmente están implicadas emociones violentas e intensas, las cuales, una vez expresadas, permiten el inicio de la curación y de la integración. Si uno no se ha pasado con la medicación o está maniatado por un diagnóstico rígido, tras la crisis pueden surgir nuevos enunciados fundamentales, muchos de los cuales tienen relación con la identidad real de uno y de sus necesidades. Las crisis pueden conducir a la transformación y a la sanación, aunque en ese momento el individuo lo esté pasando realmente mal.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 244
 
 
Una persona con una dominante en Tierra o un Saturno poderoso puede inclinarse por el tipo depresivo de colapso, o volverse obsesivo-compulsivo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 245
 
 
Sea lo que sea lo que ocurra es algo profundamente personal, y depende tanto del temperamento básico y de lo que irrumpe desde el inconsciente. Anteriormente he hablado de la forma en que la locura toma la forma del carácter esencial de la persona. Cualesquiera que sean los síntomas, el individuo ya no puede enfrentarse a la vida cotidiana. Los síntomas, por sí mismo, son característicos de cada cual, aunque se manifiestan de una forma más suave. En estado de colapso se vuelven extremos y hacen virtualmente imposible que el individuo pueda funcionar.
 
Una persona con una dominante en Tierra o un Saturno poderoso puede inclinarse por el tipo depresivo de colapso, o volverse obsesivo-compulsivo
Un temperamento de Tierra puede verse invadido por fantasías a las que durante años negó la expresión porque le parecieron «irreales».
 
Una persona con una dominante en Fuego puede volverse extremadamente agitada y violenta, o sufrir alucinaciones o delirios de que ellos son Dios o han sido los ungidos por Él para salvar el planeta.
 
Un temperamento de Agua puede desintegrarse y caer en un estado de debilidad extrema que simplemente no puede parar y puede pasarse llorando sin parar durante semanas.
 
Un temperamento de Aire o fuertemente uraniano, puede verse totalmente obsesionado o invadido por una idea; o igualmente puede verse invadido por fantasías violentas.
 
Todos pasamos por períodos así en uno u otro momento. Pero si uno sigue en la cama sollozando después de seis semanas, es obvio que no puede funcionar. En estado de colapso, el ego ya no realiza la función de mediar entre la realidad externa y los niveles profundos de la psique. Se ha derrumbado como un edificio de cimientos débiles a la menor señal de un terremoto, porque estaba mal construido para empezar.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 245
 
 
Nunca subestiméis el impacto de los horrores colectivos en la psique familiar. Los sentimientos de terror, victimización, rabia y culpa se transmiten invariablemente a la generación siguiente e incluso a la posterior.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 251
 
 
Con Saturno en ascenso existe una considerable capacidad para la autosuficiencia.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 251
 
 
La oposición marca la culminación del proceso que comenzó con la conjunción.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 253
 
 
Una Luna en la Casa VIII se siente segura si uno está preparado para vivir y trabajar con el inconsciente. Esta casa describe lo que opera por debajo de la superficie de la vida.
La casa II es una casa material, pero la VIII se oculta por debajo o más allá del nivel material de la realidad. Sabemos que la Luna nos dice algo acerca de la experiencia de la madre.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 253
 
 
Casa VIII
 
Los elementos plutonianos de la vida siempre están bajo la superficie, pero la mayoría de la gente se las arregla para vivir sin tener que enfrentarse a ellos. A pesar de ello, quien posee planetas ubicados en la casa VIII está en una sintonía muy fina con ellos. El problema está en que no se nos ha educado para manejarnos en estos asuntos y no se nos ha enseñado cómo las tragedias del pasado se transmiten de generación en generación.
 
En la casa VIII la Luna puede ser un punto flaco, un canal para conflictos y perturbaciones heredados. Pero es importante entender tanto las dificultades de este emplazamiento como su potencial. Si uno está dispuesto a mirar en el Mundo de Abajo, puede encontrar muchísima serenidad al ser capaz de hacer las paces con él. Plutón posee su propia clase de seguridad, aunque no es la que la mayoría de la gente codicia. Es la seguridad que otorga el conocimiento del lado invisible de la vida, una fe indestructible en los niveles más profundos de la existencia. Si es posible explorar el mundo de la casa VIII, entonces esta Luna, con toda su vulnerabilidad psíquica, puede ser un emplazamiento enormemente valioso.
 
Pero un individuo que rechaza mirar ahí dentro (de la casa VIII) puede experimentar un espectro que va desde la depresión severa hasta periódicos estallidos emocionales.
 
Si la casa VIII es fuerte en la carta, no es buena idea ignorar la realidad de la psique inconsciente, porque ésta propende a irrumpir violentamente cuando no es reconocida.
 
Al igual que la XII, la casa VIII parece ser importante en relación a los estados de locura, ya sean temporales o permanentes —no porque alguien tenga planetas en esas casas se vuelve loco—; pero sí es una esfera de la vida relacionada con la psique familiar uno debe trabajar conscientemente con ella. La conciencia es necesaria en cualquier casa ocupada; pero las consecuencias de la inconsciencia respecto de los asuntos de esta casa son distintas a los de otras casas.
 
Seguramente nos será más fácil de reconocer la realidad de nuestras casas I, II o III; la IV es accesible hasta cierto punto; y la V, la VI y la VII son bastante visibles en el mundo exterior. Pero la VIII, en nuestra sociedad actual, es virtualmente invisible. Damos un salto y nos pasamos a la IX, la X o la XI. Y pretendemos que la XII tampoco existe.
 
Esas casas tienen relación con los estados de locura, pero no porque los planetas que las ocupan «provoquen» la locura, sino porque somos completamente ignorantes de lo que esos planetas conllevan.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 254
 
 
La cabra del Levítico es intercambiable con muchos otros portadores simbólicos del pecado. Y, por supuesto, la definición de «pecado» varía de una cultura a otra o de un individuo a otro. También nos detendremos en esta cuestión más tarde. En algunas culturas antiguas, el portador sagrado del pecado es humano en vez de animal.
 
—Los aztecas son buen ejemplo de ello— y es inevitable que lo encontremos repugnante debido a nuestra moderna conciencia y nuestra valoración de la vida humana. Pero hemos de recordar que, en el contexto de culturas como la azteca, la víctima propiciatoria no fue nunca una víctima esclavizada o tiranizada. Esos seres humanos eran santificados al ser elegidos y ellos aceptaban porque el sacrificio les ofrecía una vía directa de conexión con los dioses. Al examinar el ritual del chivo expiatorio en el contexto de una cultura así, es necesario dejar a un lado nuestra concepción moderna y recordar el contexto en el que ese ritual se insertaba, así como la muy diferente manera en que se consideraba la vida humana individual. En las comunidades tribales no es la vida lo que tiene el máximo valor, sino la tribu. En la cultura occidental moderna, la individualidad está en el centro de todo lo que hacemos y de todo a lo que aspiramos. No quiero decir que ésta sea una forma «buena» o «mala» de ser y estar en el mundo. Es simplemente como somos. En Occidente estamos
 
centrados en lo solar y así es como nos hemos desarrollado durante siglos. Presumiblemente existe un imperativo interno que ha hecho que nos desarrolláramos así. Pero si examinamos el ritual de la víctima propiciatoria en otras culturas, la individualidad no es ni siquiera un concepto. Uno pertenece a la tribu o a la comunidad. Ser escogido como víctima propiciatoria es, por consiguiente, un honor, porque uno se convierte en el agente purificador de la comunidad y es recompensado con la inmediata unión con la deidad.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 261
 
 
Neptuno anda cerca cuando hay problemas de sentimientos de impotencia, conscientes o inconscientes.
 
Neptuno es uno de los planetas más importantes del patrón del chivo expiatorio, aunque no es el único.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 275
 
 
Si uno acerca un imán a un montón de limaduras de hierro, las limaduras se pegarán al imán de acuerdo con su forma. Un patrón arquetípico, ya se trate de una persona o un colectivo, atrae magnéticamente la sustancia de la realidad material y el mundo exterior comienza a tomar la forma del patrón. Todos los comportamientos humanos, las acciones, ideas y creaciones toman la forma de la imagen arquetípica que se oculta tras el patrón. Aunque ese patrón sea invisible, podemos descubrirlo observando la forma de la realidad exterior.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 276
 
 
Las personas no pueden ser clasificadas como «diferentes» o «normales». Todos tenemos una parte de ambas. La individualidad es «diferente», mientras que la identificación con el colectivo es «normal». Y la identificación con un colectivo pequeño es «diferente» en el contexto de un colectivo mayor «normal». Ninguna de ellas es intrínsecamente «buena» o «mala», pero hace falta que reconozcamos a ambos y un esfuerzo consciente para mantener una relación entre ellos. De otro modo se creará una escisión y la sombra colectiva de la diferencia acabará proyectada sobre aquellos que «no se integran». El propósito del antiguo ritual del chivo expiatorio era reforzar esta relación mediante la dimensión religiosa que otorgaba el significado profundo del proceso. Perdida esa dimensión religiosa, todo lo que queda es la proyección de la sombra colectiva.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 244
 
 
Plutón está relacionado con la expresión más primitiva de los instintos colectivos de supervivencia, a menudo es «proscrito» en aquellas culturas que intentan ejercer un control riguroso sobre las pasiones humanas más intensas y oscuras.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 279
 
 
A Marte retrógrado en Escorpio no se le conoce por perdonar rápidamente los agravios.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 280
 
 
La corrección política es una fuerza increíblemente poderosa y está cambiando los objetos sobre los que proyectamos la sombra del chivo expiatorio.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 281
 
 
Saturno parece tener mucho que ver con lo que Freud llamó el superyó. Saturno puede interpretar el papel de chivo expiatorio, porque refleja esas áreas en que nos sentimos inferiores y excluidos.
 
Saturno juez y perseguidor se transforma con facilidad en Saturno víctima y chivo expiatorio, y viceversa.
 
Allí donde Saturno se emplaza somos particularmente vulnerables a la opinión pública porque justamente ahí es donde nos sentimos débiles e inútiles, y donde por ello buscamos la aprobación pública. Y cuanto menos conscientes seamos de esa dinámica, más rígido y moralista se vuelve Saturno.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 284
 
 
En la dinámica interna de cualquier complejo todos los papeles son secretamente intercambiables. Forman todos parte de una unidad. Al igual que un individuo una sociedad puede, al efecto de preservar su integridad, reprimir, excluir o expulsar aquellos elementos que constituyen una amenaza para ésta. El elemento rebelde, marginado, «diferente» o inferior —el chivo expiatorio— forma parte de la misma entidad que el perseguidor. Si queremos ser miembros respetables de nuestra sociedad y cumplir las expectativas de ésta sobre nosotros y si queremos ser buenos miembros de nuestra familia y ser respetados, amados y necesitados, debemos reprimir importantes facetas de nosotros mismos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 284
 
 
El chivo expiatorio de la familia
 
Ahora vamos a explorar las clases de experiencia personal que nutren el patrón arquetípico —las limaduras de hierro que han sido atraídas por el imán y han tomado la forma de éste—, para determinar por qué un individuo se identifica profundamente con el complejo. Lo primero en que nos hemos de fijar es en la familia, porque ahí es donde empieza todo desde un nivel personal. Una familia es una sociedad en miniatura y operan en ella las mismas leyes psíquicas que en la sociedad. A su vez, las mismas leyes psíquicas que operan en el individuo operan en la familia. De lo universal a lo personal, la dinámica de la energía básica de los patrones arquetípicos es la misma.
 
La existencia de una «oveja negra» en la familia conlleva el mismo significado de «oveja negra» o de «gobierno de canallas» en el seno de una comunidad o nación. La búsqueda de chivos expiatorios en el seno familiar es uno de los principales lugares en donde nos tropezamos con el arquetipo. Cuando un temperamento individual se conecta fuertemente con el patrón —y ahí es donde la carta natal puede proporcionar información—, la persecución proporciona a su vez la base «causal» para la repetición del patrón del chivo expiatorio en la vida adulta y da contenido y sustancia al patrón mítico esencial.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 286
 
 
Una familia, como una sociedad, basa su estabilidad y coherencia en determi-303 nados valores, estructuras y leyes. Eso significa que muchos componentes de la psique familiar han de ser suprimidos en orden a mantener un equilibrio. Lo mismo se aplica a un colectivo mayor: muchos ingredientes fundamentales de la naturaleza humana deben ser suprimidos si quiere mantenerse a la sociedad dentro de unos límites de coherencia y civilización. Si algún miembro de la familia es, por su temperamento inherente, receptivo a esos elementos suprimidos y los expresa abiertamente, ese miembro puede ser experimentado por el resto de la familia como una amenaza y la persona puede llegar a ser perseguida. ¿Qué clase de «pecados» es más probable que provoquen una respuesta semejante? A menudo se trata de un problema sexual.
 
Eso es debido parcialmente a que en nuestra cultura existen montones de tabúes. En muchísimas familias el individuo que parece estar más o menos motivado sexualmente o aquel cuya orientación sexual es diferente de la del resto de la familia, puede acabar cargando con el arquetipo del chivo expiatorio.
 
Con frecuencia hay motivos relativos a la apariencia física para ser perseguido dentro de la familia.
 
El chivo expiatorio recuerda a alguien que la familia preferiría olvidar. En un caso así debemos averiguar por qué ese otro miembro de la familia fue tan amenazador. Es evidente que tú eres quien ha tomado el relevo de alguien en la familia que en su momento fue un chivo expiatorio. A veces los motivos de la persecución tienen relación con la definición familiar de lo que es «bello» o «feo», aunque a menudo existe un trasfondo colectivo en esas definiciones. Convertir a un niño en un chivo expiatorio por un motivo como ése nos da la pista de que otros miembros anteriores de la familia lo fueron también por motivos físicos y que esos chivos expiatorios se acabaron convirtiendo a su vez en perseguidores.
 
Las historias que cuenta la gente acerca de sus experiencias de persecución dentro de la familia son muy dolorosas y a menudo trágicas. La familia percibió algo en el individuo que sintió como amenazador. A veces se trata de tendencias sexuales o de la energía sexual. A veces es el aspecto físico. Un niño discapacitado físico o psíquico puede convertirse en chivo expiatorio por los padres debido a que éstos no pueden soportar su propia fealdad o estupidez interior. Igualmente, un niño muy inteligente o superdotado puede ser macha-cado por unos padres envidiosos que no pueden soportar su propia mediocridad. A veces la persecución está motivada por la propia personalidad del niño. Así, en una familia en que el valor fundamental es la extroversión y el centrarse en el mundo exterior, el niño introvertido puede convertirse en chivo expiatorio. En una familia en que el éxito material sea lo más importante, el niño que no muestre interés por los logros externos puede acabar siendo el chivo expiatorio de la familia. El niño imaginativo puede ser percibido como una amenaza. El niño perspicaz y que es capaz de ver a través del proverbial traje nuevo del emperador puede ser una amenaza.
 
En todos esos casos nuestra comprensión del fenómeno aumentará a través de la sinastría entre las cartas del perseguidor y la víctima.
 
Os daréis cuenta de por qué Neptuno, Plutón, Saturno o Quirón son poderosos tanto en la carta del chivo expiatorio como en la sinastría con las cartas de aquellos que juegan el papel de perseguidores.
 
Las razones para convertir a alguien en chivo expiatorio en el seno familiar dependen de la estructura psicológica de la familia.
 
El chivo expiatorio parece amenazar el tejido familiar a través de su comportamiento, personalidad o apariencia. A veces, el hecho de que el niño nazca en un momento equivocado —por ejemplo, en un momento en que la familia está pasando por problemas económicos o por estar el país en guerra— es razón suficiente para que ese niño sea el chivo expiatorio de sus padres por derecho propio. A veces la razón está en que los padres tuvieron que casarse porque la madre quedó embarazada o porque ese embarazo cortó en seco una carrera profesional prometedora, o porque el padre metió la pata y tuvo una aventura mientras la madre estaba embarazada.
 
Pero tras los patrones familiares se hallan los temas míticos a los que hemos aludido anteriormente. Ahí se incluyen la diferencia, la extranjería, pertenencia a la realeza, la deformidad, la posesión de dones especiales que pueden volverse poderes especiales para hacer daño. Éstos son los motivos de carácter mítico que pueden fundamentar la antipatía de la familia por uno de sus miembros. Superficialmente, en cambio, puede ser que uno sea moreno en vez de rubio, como el resto, o porque las características de ese miembro recuerdan a las de otro que ya fue anteriormente chivo expiatorio. Cualquiera 305 que sea la razón, el chivo expiatorio parece amenazar el tejido familiar a través de su comportamiento, personalidad o apariencia. A veces, el hecho de que el niño nazca en un momento equivocado —por ejemplo, en un momento en que la familia está pasando por problemas económicos o por estar el país en guerra— es razón suficiente para que ese niño sea el chivo expiatorio de sus padres por derecho propio. A veces la razón está en que los padres tuvieron que casarse porque la madre quedó embarazada o porque ese embarazo cortó en seco una carrera profesional prometedora, o porque el padre metió la pata y tuvo una aventura mientras la madre estaba embarazada. Un mal momento es muchas veces una razón aparente para buscar un chivo expiatorio, aunque nunca es en realidad tan simple. Pero alimentar heridas como éstas y culpar a la familia que las ha infligido no es manera de sanarlas, porque el complejo recreará la situación original una y otra vez hasta que las raíces de la misma sean traídas a la conciencia, y el patrón arquetípico sea reconocido y canalizado de una forma creativa. Si no llegan a ser conscientes de ese patrón, los chivos expiatorios familiares pueden seguir siendo chivos expiatorios de adultos o, a su vez, convertirse en perseguidores de otros, que con frecuencia suelen ser sus propios hijos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 287-290
 
 
Los niños sometidos a algún tipo de violencia suelen exhibir violencia respecto de sus propios hijos. Obviamente no siempre ocurre así, pero es lo bastante frecuente como para ser una dinámica familiar reconocible. No todo el mundo que es señalado como chivo expiatorio se identifica con el arquetipo. Probablemente es necesario también que exista algún tipo de conflicto interno, reconocible en la carta natal, entre el poder y la vulnerabilidad.
 
Un ejemplo de esto podría ser alguien con la Luna opuesta a la conjunción Marte-Plutón y la conjunción Sol-Neptuno en ascenso.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 291
 
 
Allí donde se produce la identificación con el arquetipo del chivo expiatorio, los sentimientos de desamparo e impotencia van de la mano de una enorme rabia y voluntad de poder. Uno no puede expresar la rabia y el poder si es débil e indefenso, porque expresar la rabia puede suponer de vuelta un abuso mayor, por lo cual la rabia se en-tierra muy profundamente. Pero igualmente, en la edad adulta uno puede ser incapaz de soportar esos sentimientos de debilidad e impotencia, de forma que el amasijo entero de emociones conflictivas es enterrado también en lo más profundo. Allí, en lo profundo, es donde la persona siente que no merece vivir. Pero esos sentimientos, al igual que la rabia, son inconscientes. Entonces, al crecer la persona, el sentimiento de desvalimiento es proyectado sobre un gancho apropiado y de pronto el que una vez fuera chivo expiatorio empieza a acosar a otros. El que es acosado en el colegio lo es también en casa y sólo puede enfrentarse al dolor y a la humillación acosando a otro niño más débil que él.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 291
 
 
La rabia inconsciente del chivo expiatorio puede también volver-se contra uno mismo, resultando así un comportamiento autodestructivo en sentido psicológico o literal. El suicidio es la forma más extrema de identificación con el chivo expiatorio pecaminoso que no merece seguir viviendo, pero también existen otras formas más sutiles de comportamiento autodestructivo que no llevan al suicidio. Algunas personas cargan con mucho más que un sentimiento personal de pecado. Cargan con los pecados de la familia y a veces de un colectivo mayor. Los sentimientos de inutilidad pueden ser tan abrumadores que van más allá de una simple culpa o defecto individual.
 
Estamos aquí ante la identificación con la cabra sacrificial que carga con la expiación de la comunidad en su totalidad.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 291
 
 
Otro elemento del patrón del chivo expiatorio es la inflación: un sentimiento de autoengrandecimiento que suele ser de tipo religioso. Eso sucede porque el individuo que inconscientemente se identifica con el mito del chivo expiatorio cree en el carácter sagrado de ese papel. Como compensación por el dolor de ser una víctima impotente y humillada, el chivo expiatorio siente secretamente que es el elegido, el salvador o el sanador-redentor. Cuando no somos conscientes de esta dinámica acabamos atrapados en el patrón arquetípico, que empieza a dominar nuestra vida. El sentimiento de inflación corre parejo a los sentimientos de victimización y de desprecio hacia uno mismo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 292
 
 
No todos los chivos expiatorios son iguales.
 
Recordemos las dos cabras del antiguo ritual de expiación.
 
Una de las cabras es sacrificada. Ésa es la víctima indefensa, siempre al borde de la extinción.
 
La otra cabra es enviada al exilio y ha de sobrevivir en tierra salvaje.
 
Hay sentimientos y percepciones conectadas con la cabra exiliada distintas de las que provoca la cabra sacrificada. No todos los chivos expiatorios se sienten como víctimas indefensas.
 
La cabra exiliada puede compensar el dolor de ser separada de su comunidad intentando volver a ganar el favor de ésta mediante el servicio. La cabra exiliada no puede darse en un estado de parálisis psíquica, como la cabra indefensa esperando a ser sacrificada. Esta cabra es fuerte y se mueve, pero debe vivir siendo portadora de la carga del pecado de un colectivo entero. El ansia de reunirse de nuevo con el colectivo es intensa. Si somos exiliados, queremos volver a casa.
 
… en cierto nivel es el ansia de reunirse con Dios, porque el colectivo sigue el mandato divino. La razón de que esa cabra sea exiliada no es que a la comunidad no le gusten las cabras. Es porque la comunidad ha ofendido a Dios y el exilio es cargar con aquello que ha causado la ofensa. Esta cabra no sólo es castigada con el dolor de la alienación de su comunidad, sino también con el dolor del alejamiento de su fuente espiritual. La cabra exiliada de nuestro interior debe trabajar muy duro para recuperar la aceptación del colectivo a través del servicio a los demás y así es como obtenemos uno de los ingredientes principales de la psicología del profesional del campo de la ayuda. También es un ingrediente principal en la psicología de muchos líderes políticos, particularmente aquellos que se ven a sí mismos como salvadores de la patria.
 
El complejo del chivo expiatorio es con frecuencia muy importante para aquellos que buscan ayudar y servir a los demás como un medio de reconectar con el colectivo que les ha abandonado y con el dios que ha sido ofendido.
 
Pero la cabra exiliada puede también volver la espalda al colectivo. La rabia puede ser demasiado grande y el orgullo personal puede estar también involucrado. La cabra exiliada puede decir: «No los necesito para nada. Es más, voy a hacer todo lo que esté en mi mano para sabotear y destruir el colectivo que me ha rechazado».
 
La cabra exiliada puede volverse anarquista o revolucionaria.
 
Es el pistolero solitario, el marginado social que conscientemente elige estar fuera de la ley.
 
Estas cabras exiliadas son necesarias respecto de una comunidad que no es consciente de sus propios pecados, porque son portadoras de la sombra colectiva.
 
¿Qué quieres decir con «necesarias para una comunidad»? ¿Quieres decir que los creamos nosotros?
 
Sí, creo que lo hacemos.
 
Si la cabra exiliada es honrada como se merece, como la sagrada portadora del pecado comunitario reconocido conscientemente, no reaccionará con rabia. Si, por el contrario, es escarnecida y despreciada, y se le obliga a cargar con la proyección de elementos a los que los demás no se quieren enfrentar por sí mismos, puede responder con una violencia extrema. Para la comunidad es aceptable la cabra exiliada que presta servicio y sufre, y también es aceptable para propia imagen del chivo expiatorio. Todo el mundo se siente mejor. Pero para la cabra exiliada no es tan fácil reconocer la rabia, que usualmente va de la mano con la compulsión de ayudar al prójimo. La rabia oculta es muy activa en las profesiones de ayuda, pero habitualmente es profundamente inconsciente. Ésta es una de las razones por las que los terapeutas de orientación espiritual no pueden enfrentarse en crudo a la rabia primaria de sus pacientes y prefieren pasar el tiempo practicando edificantes ejercicios de fantasía guiada en su lugar. Es también otra de las razones por las que muchos profesionales de la ayuda son tan autodestructivos: ignoran sus propias necesidades y límites hasta el punto de que caen enfermos o acaban quemados.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 297
 
 
Un trígono Sol-Marte otorga una personalidad poderosa que expresa con facilidad su espíritu luchador.
 
Sugiere que la persona expresa con facilidad no sólo su propia rabia y agresividad, sino el espíritu de lucha del colectivo.
 
Marte en trígono al Sol puede mostrarnos a alguien vital, generoso, magnánimo y valeroso.
 
Marte se activa siempre que nos sentimos indefensos y amenazados.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 299
 
 
Los Leos dobles no tienden a verse a sí mismos como víctimas, como tampoco el Sol en trígono a Marte más bien se identifican con la fortaleza y el poder, porque esas cualidades son accesibles para el ego consciente.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 300
 
 
Todos los Leo tienden a imaginarse como héroes mitológicos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 300
 
 
Es una carta en la que falta el elemento Agua. Los sentimientos personales de vulnerabilidad y dolor no son aceptables para la conciencia. El mundo de los sentimientos es percibido como una amenaza.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 300
 
 
Marte en la casa XII es portador de una necesidad colectiva que lleva de vuelta a la psique ancestral. No sólo está expresando la rabia y la agresividad propias, sino las de toda una nación. No le impulsa únicamente una ambición personal, sino una misión heroica.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 301
 
 
Cualquier persona con un aspecto Sol-Saturno, particularmente los difíciles, tiende a ser muy vulnerable frente a la opinión colectiva.
 
Saturno actúa como un juez interior, una especie de superyó freudiano que constantemente critica y establece metas que exigen un enorme esfuerzo y lucha. A menudo existe un corrosivo sentimiento de fracaso, agravado ante la más mínima sugerencia de que uno no está suficientemente cualificado a los ojos de los demás. Ahora bien, eso puede resultar muy creativo. Una persona tan sensible a las necesidades y expectativas sociales puede construir una vida inmensamente útil y dinámica sirviendo al mundo de alguna forma.
 
Los aspectos Sol-Saturno pueden generar una enorme ambición y tenacidad y, si son vividos en vez de ser evitados, pueden aportar un considerable éxito social.
 
Los aspectos Sol-Saturno (principalmente los difíciles) pueden mostrar a una persona que, muy en el fondo (o no tan en el fondo), es alguien profundamente inseguro.
 
Los aspectos difíciles entre el Sol y Saturno pueden generar una ansiedad y dudas enormes.
El juez interno sentencia: «Esto es lo que deberías ser. Esto es lo que el mundo espera de ti. Esto es lo que la familia espera de ti. Si fracasas, el castigo será terrible». Las expectativas internas son increíblemente exigentes, pero se proyectan hacia fuera. Existe una gran necesidad de ser aceptado por el colectivo, razón por la cual las personas con aspectos Sol-Saturno encuentran a menudo satisfacción a través de algún tipo de servicio al colectivo.
 
Necesitan una posición de responsabilidad para dejar su huella en el mundo.
 
Los aspectos Sol-Saturno, reflejan gran receptividad al colectivo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 301
 
 
Saturno-Urano y el fanatismo ideológico
 
Urano es relevante para nuestro tema arquetípico y puede representar tanto al chivo expiatorio como al perseguidor.
Dado que Urano está conectado con nuestra visión colectiva de la sociedad perfecta, puede volverse dogmático y alardear de superioridad moral;
 
Los uranianos a menudo son cabezas de turco porque se identifican con ideas nuevas que aún no son colectivamente aceptadas. Afirman estar en posesión de la verdad absoluta y su tozudo rechazo a adaptarse a las normas colectivas puede ser tan problemático como el conservadurismo intratable del colectivo que los persigue.
 
Cuando Saturno y Urano forman una conjunción, como ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial, la visión de una sociedad perfecta puede ser muy poderosa, hasta el punto de convertirse en una creencia fanática. Se puede ver la conjunción que presidió esa guerra como el reflejo del fanatismo ideológico que impulsó la visión nazi de la pureza racial y el poder mundial. La generación de Saturno-Urano poseen una visión intensamente idealista de la sociedad. Ambos desean profundamente un mundo perfecto. Saturno quiere estabilidad, pero está dispuesto a aceptar rebajas. Urano, en cambio, aspira a la perfección total sin rebaja alguna. Las profundas energías colectivas que alimentaron la Segunda Guerra Mundial están, en gran medida, descritas por este aspecto.
 
Las cuadraturas y oposiciones entre Saturno y Urano son también importantes, pero no tan poderosas como la conjunción, que es el inicio de un nuevo ciclo.
 
La importancia del ciclo Saturno-Urano desde el punto de vista de las instituciones colectivas y las ideologías, y de cómo cualquier persona nacida bajo una conjunción vivirá el ciclo en su vida individual paralelamente al desarrollo del ciclo en el mundo exterior.
 
Los momentos críticos en la vida de la persona ocurrirán al mismo tiempo que los dos planetas del ciclo vayan formando la oposición o las cuadraturas en los cielos, aunque no formen aspectos directos con la carta individual.
 
Cuando Saturno forma un aspecto con un planeta exterior, existe una gran apertura hacia lo que ocurre en el colectivo en el momento del nacimiento y hay una sensación de estar siendo constantemente sacudido por energías colectivas aterradoramente poderosas. Uno puede ser poco consciente de ello, pero igualmente puede generar una gran ansiedad que, a su vez, puede degenerar en fanatismo.
 
Saturno-Urano pueden ser inmensamente creativos y pueden contribuir al pensamiento revolucionario en el mejor de los sentidos. Pero a menudo esta cualidad se mezcla con un fanatismo de todo punto intransigente, lo que conecta a esta combinación de planetas con el tema del chivo expiatorio a través de la imagen mítica del proscrito. Se trata de una imagen prometeica que provoca igualmente un castigo prometeico.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 303
 
 
Las personas con aspectos Sol-Urano, incluso sin la complicación añadida de Saturno, pueden sentirse carne de chivo expiatorio porque ven la forma que puede adoptar el futuro y sin embargo saben que nadie de los que les rodean les va a entender.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 304
 
 
La dinámica del chivo expiatorio no es tan poderosa en aquellos que no son profundamente sensibles a la psique colectiva. Eso es porque el chivo expiatorio es un símbolo de expiación colectiva. Este complejo está a su vez vinculado de alguna manera con el grupo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 305
 
 
La dinámica del chivo expiatorio no es tan poderosa en aquellos que no son profundamente sensibles a la psique colectiva. Eso es porque el chivo expiatorio es un símbolo de expiación colectiva. Este complejo está a su vez vinculado de alguna manera con el grupo. La sensibilidad al colectivo es un ingrediente esencial del patrón,
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 305
 
 
La Luna refleja nuestras necesidades más básicas: sentirnos seguros, a salvo, queridos y alimentados.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 306
 
 
Ahora vamos a examinar la dimensión corporal del complejo del chivo expiatorio. Los sentimientos destructivos relativos al cuerpo pueden ser una expresión poderosa de este complejo. De alguna manera, no se siente feo, deforme, enfermo o sucio. Es posible ver la relación entre esa imagen negativa del cuerpo y determinados patrones de comportamiento compulsivo, como la bulimia, la anorexia o la automutilación. El cuerpo se convierte en el chivo expiatorio y, por tanto, en el portador del pecado.
 
La casa VI tiene mucho que ver acerca de cómo nos sentimos con nuestro cuerpo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 308
 
 
Ningún aspecto es intrínsecamente «malo». Todo depende de cómo se expresa.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 308
 
 
Los aspectos Venus-Neptuno pueden describir una sensibilidad estética extrema.
Es un anhelo de encontrar la belleza perfecta, particularmente si se halla en Virgo. Es el aspecto de un artista, profundamente receptivo a la belleza en todas sus formas, y equipara el amor con el sufrimiento y el sacrificio. Pero al igual que cualquier otra configuración en una carta, esa predisposición se puede distorsionar y hacer que sirva al complejo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 308
 
 
Cuando un complejo se apodera de la psique, se apropia también de la carta y la expresión de los signos, aspectos y casas se tiñe del color del patrón arquetípico. Más que estar el individuo en el centro, es el complejo el que dirige el espectáculo. En cierto momento, el libre albedrío deja de tener significado y el destino se cumple a través de compulsiones inconscientes.
 
Las configuraciones planetarias reflejan la apertura de la persona a determinados patrones arquetípicos. Todos tenemos mitos diferentes, y no todo el mundo sigue el patrón del chivo expiatorio. Mucha gente no se siente acosada hasta ese punto, incluso si han sufrido experiencias difíciles en sus primeros años y tampoco necesitan acosar a nadie. En un grupo de astrólogos u otro grupo dentro de las profesiones de ayuda, es probable que dicho complejo sea potente. ¿Por qué ejercemos una profesión de ayuda? ¿Y por qué hemos escogido, dentro de las profesiones de ayuda, la que es considerada como más marginal, anormal o rara?
 
El grado en que estemos dominados por el complejo dependerá d lo conscientes que seamos de todos sus componentes. Si no tenemos conciencia, ya sea del perseguidor o de la víctima, podemos identificarnos con uno de ellos y proyectar el otro. En tal caso el complejo se apodera de la carta y usa todos sus recursos, incluyendo los aspectos benignos
 
La carta deja de reflejar el desarrollo de un ser humano completo, pues ha sido engullida por un complejo hambriento. Cuando las compulsiones inconscientes nos dominan, nuestros planetas ya no pueden convertirse en lo que podrían ser.
 
Un complejo inconsciente puede ser un enorme vórtice que succiona cualquier cosa que se halle cerca o un imán que atrae a las limaduras de hierro y le da forma conforme al perfil de éste.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 308
 
 
Los aspectos Júpiter-Neptuno son mucho más propensos a las fantasías de redención.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 309
 
 
A menudo, personas a las que les falta un elemento en la carta buscan otra persona que se lo proporcione. Tendemos a buscar parejas que nos puedan ofrecer aquello que tenemos dificultades para darnos a nosotros mismos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 310
 
 
Los aspectos Luna-Plutón pueden ser enormemente creativos porque la sensación de amenaza proveniente del entorno nos fuerza a desarrollar buenos instintos de supervivencia. Podemos descubrir dentro de nosotros mismos algo que es muy fuer-te e independiente debido a que vemos más allá de la superficie de la gente y de las situaciones. Aprendemos a confiar en nuestra conexión con la Naturaleza, que puede revelar tanto una gran belleza y profundidad como un buen olfato para el peligro. Pero para que la dimensión creativa de un aspecto nos sea accesible, necesitamos ser conscientes del complejo y de cómo éste nos domina.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 310
 
 
Indicaciones planetarias de persecución colectiva
 
Aunque todas las atrocidades implican víctimas, no toda víctima es un chivo expiatorio.
 
Durante mucho tiempo hemos intentado contener nuestros sentimientos de rabia respecto del mundo en que vivimos y el arquetipo del chivo expiatorio está muy activo en estos momentos. Esto suele ocurrir cuando nos sentimos desamparados como colectivo, lo que inevitablemente ocurre cuando nuestros mecanismos de seguridad sociales, religiosos y económicos comienzan a fallar. Nos sentimos humillados e ineficaces. Determinados individuos que están abiertos a sentir la influencia del arquetipo pero que no pueden canalizarlo por no poseer un ego fuerte se pueden identificar con él hasta el punto de revolverse contra esos sentimientos de impotencia —que son también nuestros sentimientos— de forma violenta. Aunque duela reconocerlo, ellos son nuestros portavoces.
 
Nuestros viejos amigos Quirón y Plutón están involucrados. y el ciclo Quirón-Plutón, que dura sesenta años, tiene una profunda conexión con los fenómenos de persecución colectiva.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 301
 
 
Oyente: ¿Con qué carácter se identificarían las personas como el tipo que colocó las bombas en Londres?
 
Liz: Con la cabra exiliada. Los muchachos de la Columbine High School eran solitarios como Thomas Hamilton. Cargaban con profundos sentimientos de inferioridad y de rechazo por parte del colectivo y eran exiliados dentro de su comunidad. Envidiaban y odiaban a los estudiantes populares y atractivos. Se sintieron como chivos expiatorios indefensos y su rabia marciana explotó hasta convertirlos en perseguidores. Y luego se suicidaron pegándose un tiro cada uno, como víctimas sacrificiales. Todos somos capaces de comportarnos así, si bien a una escala mucho más pequeña. Podemos activar el complejo de chivo expiatorio mediante un comportamiento malvado para con aquellos a los que envidiamos, o aquellos que nos han excluido o rechazado. Podemos activarlo al permitir que los demás nos conviertan en víctimas en nuestra vida personal. Podemos activarlo al perseguir a otros al efecto de ser nosotros mismos los perseguidos, incluso si la crueldad se manifiesta de forma sutil o se dirige hacia nuestra pareja o nuestro perro.
 
Los aspectos Sol-Saturno, reflejan gran receptividad al colectivo.
 
Pero mientras Sol-Saturno dice: «No soy lo bastante bueno, pero si me esfuerzo, puedo conseguir que me acepten».
 
Sol-Quirón dice: «No soy lo bastante bueno y no lo voy a ser jamás. Ellos me van a odiar siempre. No importa lo que yo haga».
 
Cuando empezamos a estudiar un tema arquetípico e intentamos encontrar en la carta configuraciones que puedan reflejarlo, vemos que no existe una única configuración que encaje con total exactitud en el arquetipo. Cada carta es distinta. No obstante, determinados planetas aparecen una y otra vez en ciertas clases de patrones. Quirón es un significador obvio del chivo expiatorio, tal y como aparece en su mitología.
 
Un Quirón poderoso conectado con el Sol, la Luna, Saturno o Plutón nos da algunas pistas acerca de la importancia del arquetipo del chivo expiatorio.
 
Dichos componentes pueden organizarse de muchas formas distintas, pero son siempre los mismos.
 
Ninguna de estas configuraciones nos dice que una persona vaya a actuar exteriormente conforme al patrón del chivo expiatorio; pero sí nos dicen que el individuo está sintonizado de alguna manera con el patrón.
 
El mito del chivo expiatorio no tiene por qué manifestarse de forma destructiva. Su lado destructivo se pone más en evidencia cuanto más inconsciente de él es la persona.
 
El chivo expiatorio como recipiente sagrado, pharmakos o agente sanador, es una imagen inmensamente positiva.
 
Pero si uno es profundamente inconsciente y una imperiosa sensación de agravio personal, el patrón puede volverse muy desagradable.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 315-318
 
 
El tema del padre ausente o espiritualmente enfermo es también un importante componente de la mitología que envuelve a Leo, porque la búsqueda de una fuente interior o espiritual es fundamental para el impulso creativo de Leo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 319
 
 
Los aspectos Sol-Júpiter pueden ser movilizados como defensa de unas maneras bastante exageradas. Una de las maneras en que la cabra exiliada puede intentar compensar esos terribles sentimientos de inferioridad y vergüenza es a través de la inflación. El espacio vacío creado por la soledad y el aislamiento puede ser inundado por una sensación de engrandecimiento y fervor mesiánico.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 321
 
 
Al efecto de hacer comprensibles los patrones astrológicos conectados en el mito del chivo expiatorio, tenemos que fijarnos no sólo en los planetas, sino también en las casas. La receptividad al colectivo puede ser descrita por un Saturno poderoso, pero un énfasis en la casa X también puede ser muy significativo.
 
Las personas con una casa X muy ocupada son con frecuencia ambiciosas. No se trata necesariamente una ambición común, sino de una necesidad de ser reconocido a los ojos del mundo como una figura útil y eficaz. Existe también una profunda necesidad de formar parte del tejido social y de ser visto como una persona importante. Aunque el resto de la carta diga «Me importa una mierda lo que piensen los demás», las personas con una casa X fuerte se preocuparán por ello. Esa preocupación puede volverse odio si uno se siente rechazado por la sociedad; y ése es el caso cuando Plutón, Urano, Quirón o Neptuno están emplazados en el MC. No odiamos aquello que no nos importa.
 
La Casa X es la casa de Saturno y el énfasis en ésta nos hace sensibles a lo que la sociedad exige de nosotros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 322
 
 
Un Urano fuerte puede ser igualmente relevante para el patrón del chivo expiatorio, como también un énfasis en la casa XI.
 
La XI, cuyos regentes naturales son Urano y Saturno, se relaciona con el sentido de pertenencia a algo mayor que uno mismo. Si una de estas casas es dominante, las opiniones del resto de la gente importan y mucho. Importa que tengamos un papel que desempeñar y algo útil que aportar y que seamos respetados por nuestras capacidades y esfuerzos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 323
 
 
Los signos también son relevantes. Un énfasis en Capricornio —el Sol, la Luna, el Ascendente o un grupo de planetas— puede reflejar receptividad al tema del chivo expiatorio.
 
Capricornio tiene una aguda conciencia de las expectativas colectivas y una potente necesidad de ser útil de alguna manera al mundo y de contribuir o cambiar las estructuras existentes. Si esa receptividad se combina con sentimientos de victimismo y exilio, el patrón del chivo expiatorio dominará probablemente la vida de la persona. Nunca creo a los nativos de Capricornio que dicen «No me importa lo que piense la gente». Puede que no les importe de una forma obvia —no todos los Capricornio van a remolque del colectivo: algunos son abiertamente rebeldes y anarquistas—; pero muy en el fondo existe una necesidad de servir a algún tipo de principio de autoridad, aunque sea interno. El rebelde que se pasa la vida luchando contra las estructuras sociales existentes está tan dominado por ellas como el que trabaja por su mantenimiento. Todo Capricornio, ya sea de forma consciente o inconsciente, reconoce la importancia de una ley superior, ya sea objetiva y se perciba en la sustancia física (lo que constituye la base de lo que llamamos ciencia) o si es subjetiva y se percibe como un imperativo espiritual o psicológico.
 
El deseo de obedecer la ley es muy profundo en Capricornio y debido a eso, pueden aparecer grandes sentimientos de culpa e infelicidad cuando uno siente que ha violado la ley. Por supuesto, no todos los Capricornio son chivos expiatorios; pero el arquetipo del chivo expiatorio es relevante para muchos de ellos, al igual que para aquellos que en su carta tengan un aspecto Sol-Saturno o una casa X muy ocupada.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 301
 
 
El principio de Saturno se puede expresar de muchas maneras, incluido el signo. Si uno es fuertemente saturnino, y crece en un ambiente en que pertenece a la clase social «adecuada» con el bagaje «adecuado», el tema del chivo expiatorio puede no ser importante y pasarán a primer plano de la vida de uno otros temas. Pero cuando los temas saturninos se combinan con sentimientos de ser diferente y de exclusión por parte del colectivo, el chivo expiatorio mítico no andará muy lejos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 324
 
 
Los planetas en la casa XII son importantes porque actúan como mediadores de recuerdos ancestrales. Si el patrón del chivo expiatorio actúa en la vida de uno, uno es normalmente portador de algo mucho mayor que su propia experiencia personal. Una casa XII muy llena no implica en sí misma que exista ese patrón; pero siempre apunta a cuestiones que pertenecen al bagaje familiar.
 
Tenemos que recordar que el chivo expiatorio mítico carga con los pecados del grupo. No se le condena tan sólo por sus propios pecados, sino que es un vehículo del pecado colectivo. El pecado de Edipo no es un pecado cometido por elección propia. Edipo comete ese pecado porque los dioses se lo han exigido como cumplimiento de una maldición familiar. Lo mismo cabe aplicar a Orestes. Es castigado por haber asesinado a su madre; pero no mata a su madre por capricho, sino porque se lo ha exigido Apolo. Y éste lo hace porque, como en el caso de Edipo, es la culminación de una larga lista de pecados familiares que comienzan con una maldición familiar. La carga de pecado que lleva el chivo expiatorio siempre es más grande que el propio individuo. Para cualquiera que se sienta como una víctima o atrapado en el rol del chivo expiatorio puede suponer una gran diferencia reconocer que uno lleva algo más que la carga de sus propias acciones. Los planetas en la casa XII lo dicen con mucha claridad.
 
Es interesante observar lo importante que es la casa XII en las cartas de los líderes políticos.
 
Un líder íntegro siempre tiene presente que su carisma procede de algo más grande que él y no se identifica personalmente con la fuente de ese poder. Pero si cometemos el error de creer que ese poder es sólo nuestro, entonces nos inflamos y así un líder carismático se convierte en un perseguidor.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 325
 
 
Percatarse de que uno es el portador de patrones ancestrales pue-de ser muy liberador. La sensación de vergüenza, culpa y maldad que acompañan al exilio y a la víctima pueden ser profundamente inconscientes y la personalidad puede movilizar potentes mecanismos de defensa contra ella. Pero los sentimientos, tanto si uno es consciente o no, van más allá del individuo. Es de una arrogancia supina imaginar que uno es tan global y vastamente malo que merece ser perseguido colectivamente. Es la misma inflación que la de creerse un salvador. El chivo expiatorio carga con el pecado y la vergüenza durante muchas generaciones. Para dejar de identificarse con él, uno debe desengancharse y reconocer lo que uno está llevando. El desapego puede crear un espacio para respirar entre uno mismo como individuo y la figura mítica, permitiendo así la canalización de ésta en vez de ser simplemente su víctima.
 
En un individuo de naturaleza terrenal y que se relaciona bien con el plano material de la existencia, Saturno no es necesariamente inconsciente.
 
Ningún planeta en particular indica «inconsciencia». Es la forma en que el planeta o configuración se «asientan» en la carta.
 
Hay que examinar la carta en su conjunto y tenemos que ubicarla en el contexto de la familia del individuo y de su bagaje cultural.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 328
 
 
El sadismo está habitualmente vinculado al complejo, cosa que para vosotros debería ser obvia. La persona que abusa o tortura a personas o animales necesita demostrar su poder causando dolor a los débiles e indefensos. Esta compulsión tiene su origen en la incapacidad absoluta de reconocer la víctima indefensa en el interior de uno mismo.
 
Es interesante comprobar cómo a menudo el sadismo y la crueldad son expresiones de un Neptuno poderoso pero inconsciente. Solemos pensar en los neptunianos como víctimas; pero si otros factores en la carta indican fuerza y poder, el neptuniano puede convertirse en perseguidor y proyectar la figura interior de la víctima impotente al exterior.
 
La relación existente entre una persona así y el portador de la proyección puede estar llena de un odio y rabia enormes. Si nos sentimos débiles e impotentes, pero somos incapaces de reconocer esos sentimientos, podemos experimentar profundos sentimientos destructivos hacia aquellas personas que nos recuerdan esa dimensión inconsciente de nosotros mismos. Sentimos entonces la incontenible necesidad de herirlos, de humillarlos o incluso de aniquilarlos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 329
 
 
Los astrólogos se identifican a menudo con la cabra exiliada e inconsciente provocan la hostilidad del colectivo. Eso puede reflejar el fuerte componente uraniano de la astrología y el énfasis uraniano en las cartas de muchos astrólogos. También manifestamos el tema del chivo expiatorio de otra forma: nos percibimos a nosotros mismos como las víctimas impotentes de los planetas. Queremos saber qué cosa terrible nos va a suceder durante el próximo tránsito difícil, particularmente si ese tránsito implica a un planeta exterior y existe una conexión con acontecimientos mundanos.
 
¿Qué es lo que «nos van a hacer» los cielos? Hay algo en esa clase de fatalismo indefenso que es profundamente perturbador. No es un enfoque útil. Las energías inconscientes que provocan los acontecimientos externos son colectivas, pero la manifestación de éstas en la psique colectiva depende de los canales que cada individuo proporcione. Si en una nación existe un número importante de personas inconscientes, esa nación escenificará los tránsitos hacia su carta de formas compulsivas y a veces muy literales. Si, en cambio, la nación posee un número suficiente de personas relativamente conscientes, el resultado no es totalmente predecible. Ninguno de nosotros puede, como personas individuales, influir de forma instantánea en los acontecimientos mundiales; y todos podemos ser víctimas de una erupción colectiva. Pero si formulamos nuestros valores desde la conciencia individual en vez de la inconsciencia de la masa, finalmente podremos influir en el futuro y podremos descubrir áreas específicas en nuestras vidas en que podemos hacer algo constructivo, de lo cual se beneficiarán nuestros hijos y nietos antes que nosotros mismos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 329
 
 
A todos nos encantaría saber por qué el mundo es como es y lo que podemos hacer al respecto. Mantenernos informados acerca de los acontecimientos nos crea la ilusión de que tenemos un mayor control, razón por la cual la gente se vuelve adicta a la televisión y a los periódicos en momentos de crisis —incluso aunque la crisis esté ocurriendo a miles de kilómetros—. Cuando algo arquetípico se manifiesta a nivel mundial, puede ser terrorífico. Esos patrones arquetípicos eran llamados antiguamente «dioses», y su fuerza abrumadora nos hace sentir impotentes al enfrentarnos a ellos. En el momento presente su manifestación es particularmente perturbadora porque el antiguo mito del chivo expiatorio sigue revelándose tras la fachada de las cuestiones políticas y militares. Dado que para nosotros es importante a nivel personal, nos aporta una sensación de peligro que va más allá de la compasión que sentimos por las personas convertidas en víctimas y nos empuja a ser conscientes de la víctima indefensa y del perseguidor que hay en nosotros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 330
 
 
A lo largo de la historia, los seres humanos se han permitido las más horrendas formas de persecución. No hay un solo grupo humano que no sea culpable de haber perseguido a los demás ni grupo que, a su vez, no haya sido perseguido en una época u otra. Por eso, cuando vemos la carta de Milošević, debemos cuidarnos muy mucho de afirmar enfáticamente: «Por supuesto que es un bestia de psicópata, como Hitler». Eso es indudablemente cierto, pero la carta por sí misma no puede decirnos eso. Las configuraciones en esas cartas pueden ser iguales o parecidas a las de la nuestra; y en algún lugar dentro de nosotros existe la capacidad de pasar de ser chivos expiatorios a perseguidores. Aunque sólo se trate de un comentario malicioso acerca de alguien que consideramos inferior a nosotros, ya demostramos poseer una pequeña parte de Slobo o de Adolf. Todos somos capaces de comportarnos así, e igualmente todos podemos revolcarnos en sentimientos de victimización y de rabia venenosa cuando no se satisfacen nuestras necesidades. Si nuestro bagaje familiar ha hecho que el patrón arquetípico florezca como una herida, corremos el gran riesgo de identificarnos con el mito del chivo expiatorio. Trabajar este complejo supone una gran responsabilidad. Es mucho más cómodo ser un chivo expiatorio en el sentido usual del término y sentir una pena terrible por nosotros mismos. Podemos identificarnos con la víctima, con el exiliado y siempre será posible encontrar un perseguidor «ahí fuera» para culparle de nuestra desgracia, porque los perseguidores están realmente ahí fuera. Mucho más duro es, en cambio, preguntarse a uno mismo: «¿Dónde está el perseguidor que vive en mí? ¿Qué es lo que yo per-sigo y por qué? ¿Cultivo el victimismo porque sentirme desgraciado me hace sentir especial?». Estas cuestiones son difíciles de formular, pero a menos que lo hagamos, no vamos a conseguir nada.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 333
 
 
¿Significan los tránsitos importantes que podemos trabajar más constructivamente con el patrón?
 
La oportunidad existe. Si un tránsito activa un aspecto natal como Sol-Quirón o Luna-Plutón, podríamos llegar a ser más conscientes del patrón y trabajar con él más creativamente. Cuando un planeta natal es transitado, hay algo nuevo relativo a planeta que trata de emerger a la conciencia. Muy a menudo intentamos llevar a la práctica los tránsitos antes de entender qué es lo que pasa. Los experimentamos en el mundo concreto y eso es a veces necesario porque la experiencia sirve para despertar la conciencia. Pero no podemos forzar a algo a que aparezca previamente en la conciencia sin pasar previamente por un proceso de abstracción intelectual; y tampoco podemos usar nuestro conocimiento astrológico o psicológico para huir de la vida. Pero incluso cuando pasamos una por situación externa dolorosa, un tránsito poderoso puede darnos la oportunidad de entender el significado profundo del patrón.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 325
 
 
Un Plutón poderoso puede indicar que creemos merecer el castigo por haber sido tan malos.
 
Plutón hace su papel en el complejo del chivo expiatorio por su propensión a cargar con la sombra colectiva.
 
Las personas plutonianas están particularmente sintonizadas con la oscuridad del colectivo.
 
Son conscientes de ella desde edades tempranas. La sienten y la huelen; y su instinto de supervivencia les avisa cuando el ambiente es potencialmente peligroso. Los niños plutonianos son a menudo perseguidos porque ven más de lo que deberían ver. Perciben todo aquello que los demás se empeñan en ocultar. Las estructuras saturninas dominantes tanto en el ego individual como en la sociedad exigen la supresión del lado más primitivo de la naturaleza humana. Pero la persona plutoniana sabe siempre en qué momento la fosa séptica psíquica tiene fugas. Por esta razón es perseguido por los padres, los hermanos, los profesores y aquellos de sus pares que tienen mucho que ocultar.
 
Pero la reacción de Plutón no es la de Neptuno. Plutón no es realmente una víctima.
 
Ocasionalmente uno puede ver a un plutoniano jugando el papel de víctima, pero normalmente con un fuerte elemento de manipulación. Mucho más frecuente es que alimente su agravio mientras espera el mejor momento para vengarse. Es raro ver a un plutoniano dar pena. Más fácil es verlo sumido en una negra depresión o rabioso.
 
Plutón es un factor muy importante en el complejo del chivo expiatorio, pero no es una víctima indefensa. He conocido a unas cuantas personas con aspectos Sol-Plutón o Luna-Plutón que dan la impresión de ser víctimas indefensas, pero son en realidad personas extremadamente fuertes que cargan con un montón de veneno bajo la superficie y a quienes el martirio da un gran poder.
 
Los plutonianos interpretan normalmente el papel de la cabra exiliada, que no cejará hasta vengarse de aquellos que le hicieron daño y que a veces perecerá en el proceso.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 336-340
 
 
Un Júpiter o Neptuno fuertes, combinados con un Plutón fuerte, pueden indicar que somos castigados porque somos muy buenos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 336
 
 
En el tema del chivo expiatorio intervienen diversos planetas que se relacionan con facetas distintas del mismo, y no todos los complejos de chivo expiatorio implican temas plutonianos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 339
 
 
El chivo expiatorio mítico es un pharmakos, un agente curativo para la comunidad. El patrón mítico debe ser aceptado sin soberbia ni identificación de ningún tipo con la víctima. Expresar la rabia conscientemente puede ser necesario y válido, porque mientras la rabia sea inconsciente es muy peligrosa y prácticamente impedirá que podamos soltarnos de las garras del complejo. A veces puede ser necesario expresar los sentimientos de desamparo, porque muchos chivos expiatorios desconocen que lo son. Creen que son personas fuertes y competentes, por más que sigan siendo víctimas. Puede ser que la dependencia necesite ser expresada en vez de esconderse tras el orgullo herido y el aislamiento que habitualmente acompañan al chivo expiatorio en el exilio. Muchas de las dimensiones emocionales del patrón pueden ser trabajadas en un contexto terapéutico; pero al final, tratar creativamente con el chivo expiatorio implica aceptar el patrón mítico sin identificarse con ninguno de los roles.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 340
 
 
Urano puede ser feroz y fanáticamente conservador.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 325
 
 
Los tránsitos podrían activar una mayor comprensión del patrón del chivo expiatorio.
 
Pero también pueden activar la manifestación del complejo.
 
Depende de que uno esté dispuesto a trabajar duro para llegar a ser consciente de él.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 340
 
 
No podemos saber únicamente a través de la carta qué hará una persona determinada con la receptividad al colectivo o el sufrimiento interno; debe tenerse en cuenta la elección personal.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 325
 
 
Quirón en la XI nos habla de que era muy sensible a lo que estaba mal en la sociedad.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 350
 
 
A lo largo de nuestra vida hay momentos en que podemos decidir luchar contra nuestros instintos destructivos, aunque nos duela. Eso es lo que el mito define como búsqueda heroica. O podemos elegir ignorar esa vocecilla suave pero persistente y disculpar el complejo a pesar de saber que hacemos daño a los demás. A menudo ni siquiera nos damos cuenta de cuándo ocurren esos momentos. Tomamos series enteras de pequeñas decisiones, sin prestar mucha atención y después, cuando sobrevienen las consecuencias protestamos y decimos que no tienen nada que ver con nosotros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 325
 
 
Quienes son receptivos al colectivo pueden, si son capaces y ambiciosos, llegar a una posición prominente, porque ellos representan la voz del Zeitgeist del momento. El chivo expiatorio también puede llegar a ocupar una posición de importancia, especialmente cuando el propio colectivo se siente perseguido,
 
Los individuos que interpretan estos papeles en la escena mundana tienen normalmente vínculos fuertes con su nación.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 351
 
 
El tema del progenitor como chivo expiatorio y como perseguidor. Patrones heredados de abuso
 
De todas las manifestaciones posibles del complejo del chivo expiatorio en el ámbito familiar, el abuso infantil por parte de los padres es la más perturbadora, destructiva y dolorosa; y la pedofilia, su prima hermana, parece ir en aumento, en parte debido a la disponibilidad de material pornográfico infantil en Internet.
 
Al plantearse el tema en un seminario, siempre hay que alguien pregunta si es posible ver el abuso infantil en la carta. Mi respuesta es invariablemente la misma: no se puede ver el abuso de una forma literal. Uno puede reconocer patrones heredados de dificultad y a veces de violencia;
 
Pero nunca podremos estar seguiros de si la violencia o el abuso sexual se han manifestado físicamente o permanecen invisibles como una corriente emocional subterránea que en la atmósfera inconsciente del ambiente familiar.
 
El abuso puede adoptar muchas formas sutiles, incluido el tipo de coerción psicológica que exige que el niño cumpla las expectativas de sus padres y que en caso contrario le condenará a que éstos le aíslen y le nieguen el cariño.
 
Finalmente, el abuso sexual es el símbolo de una forma más repugnante de crueldad, vinculada a problemas de potencia y de impotencia.
 
Lo mismo se puede decir de la violación: el violador invariablemente padece sentimientos de impotencia. Pero ya sea que el abuso infantil se haya manifestado física o psíquicamente, al tener más conocimiento acerca del bagaje del individuo nos encontraremos normalmente con que el patrón del chivo expiatorio lleva funcionando en la psique familiar durante más de una generación.
 
Sabemos que la casa XII puede proporcionarnos con frecuencia claves acerca de esta clase de herencia ancestral, aunque no pueda explicarnos si esa persecución ancestral adoptó la forma de abuso físico dentro de la familia más cercana.
 
Desde luego no os puedo dar estadísticas acerca de cuántos progenitores abusadores pertenecen a familias que, en un momento anterior a su historia, fueron perseguidas por motivos raciales, religiosos o económicos; pero a lo largo de los años me han contado suficientes historias como para convencerme de que un individuo no se convierte sin más en un abusador hecho y derecho sin que exista una larga historia previa, colectiva o familiar, de persecución.
 
El abuso no surge abruptamente en una psique familiar sana. Es el producto final de una larga historia de conflictos y heridas que se remontan lejos en el pasado y que habitualmente incluyen algún tipo de persecución a nivel colectivo en algún momento de la historia familiar.
 
El abuso sexual infantil es horroroso y puede costar años de trabajo terapéutico sanarlo. Aunque eso no significa necesariamente que cuando crezca se convertirá en abusador, o en alguien que puede atraer el abuso por parte de otros en su vida adulta, si el patrón del chivo expiatorio está presente en la psique, cristaliza tras una experiencia así y suele existir una tendencia a ser la víctima de una forma u otra o, al menos, sobrellevar un sentimiento de vergüenza, daño y rabia.
 
Cualquiera de los dos padres puede ejercer violencia sobre sus hijos y ambos pueden también perpetrar abusos sexuales. Pero en la mayor parte de casos, el abuso sexual está relacionado con el padre, padrastro o pariente de sexo masculino.
 
Por tanto, deberemos prestar atención a los planetas que ocupen la casa IV o que estén en aspecto fuerte con el Sol. Los padres que abusan de sus hijos no son sólo individuos que se comportan de forma destructiva, sino que además son portadores de una victimización colectiva y así encontraremos a menudo a Quirón, Neptuno o Plutón en la casa IV como reflejo del patrón.
 
Con igual frecuencia podemos encontrarnos a Urano involucrado en la configuración correspondiente.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 353-355
 
 
El tema del padre como víctima puede estar indicado también por el Sol en la XII, pero en ese caso habrá que añadir un aspecto difícil con Neptuno, Quirón o Plutón, o uno o varios de estos planetas tendrán que hallarse también en la casa IV o en conjunción al IC desde la casa III.
 
Normalmente estos temas de victimización se confirman más de una vez: por ejemplo, Neptuno en la IV puede estar en cuadratura con el Sol en la XII.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 355
 
 
Un planeta en la casa IV o en la X sugiere que el pariente importante es mucho más que una persona individual. Él o ella son portadores de un principio arquetípico, que puede haber estado activo en la familia durante generaciones. Es un daimon transmitido a través de la línea del padre o de la madre. En esencia, el daimon no es patológico, sino que se trata de un don o mito familiar que puede expresarse de formas creativas. Pero el tiempo y la ceguera humana finalmente distorsionan ese daimon de forma que expresarlo se vuelve cada vez más destructivo. Esto es lo que los griegos entendían por maldición familiar.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 355
 
 
 
Cuando está implicado un planeta exterior, el principio arquetípico relativo al progenitor está conectado con el colectivo y, en el caso de Neptuno, es a menudo la víctima colectiva, la cabra sacrificial. Neptuno puede describir al padre también como artista o místico. Pero incluso si es capaz de expresar cualidades neptunianas positivamente, la víctima sufriente no está habitualmente muy lejos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 356
 
 
Quirón y Plutón están vinculados a la cabra exiliada y estos planetas pueden reflejar una gran rabia contra el colectivo porque cargan con la proyección colectiva de ser proscritos e incluso de estar fuera de la ley.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 356
 
 
El papel de Marte en el abuso infantil
 
Si bien esos planetas pueden hablar de temas de persecución, hace falta más tiempo para generar la clase de energía violenta necesaria para representar el patrón como abuso en el entorno familiar. Tanto si el abuso es físico o psicológico, será habitual encontrar a Marte como significador del padre, vinculado con el Sol o en la casa IV y a menudo en combinación con Neptuno, Quirón o Plutón.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 356
 
 
Cuando la imagen del padre está teñida de Marte, el padre puede ser de algún modo marciano: o tiene el Sol, la Luna o el Ascendente en Aries, o los luminares en aspecto potente con Marte, o Marte angular en su carta.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 357
 
 
De acuerdo con los parámetros conocidos, un padre marciano puede ser enérgico, activo y posiblemente dominante.
 
Pero si Marte está vinculado con Neptuno, Plutón o Quirón, en la imagen del padre hay una escisión, que desciende por la línea paterna y refleja una herencia colectiva de frustración y persecución.
 
No dejaré de repetiros que encontrar a Marte y a Neptuno juntos en la casa IV no significa que el padre sea un abusador; pero sí puede indicar un profundo conflicto en su naturaleza cuyas raíces se hunden en el pasado.
 
Está representado por dos imágenes contrapuestas: la víctima neptuniana y el guerrero marcial. Cualquier individual con una polaridad así tiene un gran problema y pocos son capaces de reconciliar ambos extremos del conflicto, especialmente si son jóvenes.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 357
 
 
En los últimos años se ha facilitado que el hombre trabaje para una mayor comprensión de sí mismo antes de tener hijos. Pero las generaciones anteriores, especialmente si se mudaban con frecuencia debido a dificultades económicas, ostracismo social o un régimen político hostil, no podían permitirse el lujo de abrir vías de introspección como la psicoterapia. El hombre que cargaba con el patrón simplemente se lo trasmitía a sus hijos e hijas y representaba un tema arquetípico cuyas raíces se hallaban en siglos de persecución colectiva. Como he dicho, el abuso sexual es un símbolo, y también un acto de aniquilación física. El padre que abusa de su hijo o hija está motivado por una corrosiva sensación de rabia, humillación e impotencia, que descarga sobre el niño indefenso, el cual se convierte así en un constante recordatorio de su propia impotencia.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 357
 
 
Los casos de abuso familiar son perturbadoramente comunes; pe ro como he dicho, el abuso no es sólo físico, sino también emocional o intelectual. Este abuso, a pesar de que es extremadamente destructivo, no deja cicatrices emocionales ni recuerdos específicos porque es muy sutil. Es corriente que el niño superdotado sea objeto de un tipo u otro de abuso, porque inadvertidamente inspira envidia, rabia y deseo en sus padres. A todos nos gustaría encontrar un culpable para cargar contra él porque las consecuencias son terribles. Incluso si no hemos experimentado abusos durante nuestra infancia, escuchar las experiencias de los demás suscita nuestros propios sentimientos de victimización. Sería muy sencillo afirmar: «Ese padre es malo y totalmente culpable» sin tener en cuenta el contexto. Pero la gente no se comporta así sin más.
 
Siempre hay una herencia psicológica, que normalmente se describe con bastante precisión a través de los planetas de la casa IV y los aspectos planetarios al Sol.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 357
 
 
La carta no nos puede hablar por sí misma de abusos físicos. No obstante, sí puede decirnos algo acerca de un conflicto específico presente en el padre y en su línea familiar que puede derivar en tensión y en comportamiento compulsivo.
 
Si conocemos el abuso, podemos sumar dos y dos y resolver la posible dinámica que lo ha alimentado.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 358
 
 
Marte y Neptuno son opuestos arquetípicos. Marte siente antipatía por cualquier planeta que le frustre y desde luego, Quirón, Saturno, Neptuno y Plutón provocan ese efecto. No todos los aspectos difíciles implican estas polaridades extremas.
 
Marte y Neptuno son opuestos arquetípicos y si están vinculados por una conjunción o aspecto difícil, eso denota un profundo conflicto interno relacionado con la potencia y que puede oponerse al tema de la víctima sacrificial.
 
Saturno y Neptuno son otra pareja de opuestos arquetípicos.
 
Lleva bastante tiempo desarrollar creativamente cualquier aspecto entre ellos, incluso el trígono y el sextil. Saturno defiende la autonomía frente al caos de las aguas neptunianas, volviéndose hipercrítico y excesivamente racional, y Neptuno se defiende de la soledad y aislamiento saturninos volviéndose indefenso y lamentable, así como minando secretamente las rígidas estructuras saturninas.
 
Es posible conseguir que ambos principios colaboren y esa combinación sea inmensamente positiva; pero en los primeros años de vida eso es imposible.
 
Cuando el padre está representado por imágenes opuestas como Marte y Neptuno, es probable que exista dentro de él una profunda escisión en su personalidad, basculando entre la ira agresiva y el desamparo impotente. No es probable que el padre haya integrado esa escisión en su personalidad durante su infancia cuando la carta lo describe con esos rasgos. Eso asegura que la escisión se transmita a la generación siguiente, esperando a ser sanada.
 
¿Cómo podrían trabajar juntos Marte y Neptuno creativamente?
 
Una buena manera de hacerlo es poner la energía marciana de uno al servicio de los débiles.
 
Este aspecto Marte-Neptuno, tiene una cierta cualidad de Robin Hood: es la persona que trabaja enérgicamente o de una forma agresiva para proteger a personas o colectivos representados por Neptuno o para lograr finalidades neptunianas. Podemos encontrar un paralelismo con héroes modernos de fantasía, como Superman, Spiderman o Batman. Aunque estos personajes de cómic pue dan parecer estúpidos, poseen un enorme atractivo global porque son míticos.
 
Otra área en que pueden trabajar juntos es el arte. Los aspectos Marte-Neptuno se asocian a menudo con el teatro y la música, porque la poderosa energía pasional de Marte puede ser traducida de una forma que toque profundamente al colectivo.
 
Pero los aspectos Marte-Neptuno necesitan tanto una salida imaginativa como una causa idealista a la que dedicar sus energías; si no existe ninguna de las dos, ambos planetas permanecerán en la eterna oposición y la persona tenderá a identificarse con la víctima o con el perseguidor, o con ambos por temporadas.
 
La victimización es adictiva. Al identificarnos con la víctima necesitamos continuamente arreglos; no tanto respecto del alcohol o de las drogas, como del sufrimiento y la soledad. Repetidamente nos atraen parejas violentas o permitimos que nos conviertan en víctimas de una forma sutil ya sea en nuestras relaciones o en el trabajo.
 
Cuando este conflicto se plantea en los dominios de la casa IV es que se ha transmitido por la línea paterna. A veces, combinaciones como Saturno-Neptuno en la casa IV con el Sol en cuadratura u oposición a Marte reflejan el mismo tipo de conflicto interno profundo. No es probable que un padre representado a través de esos rasgos sea capaz de manejar el problema con elegancia —particularmente cuando es joven y mucho menos si él mismo o su familia han sido objeto de persecución—.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 358-362
 
 
La herencia de la madre
 
Cuando el padre está representado por una escisión como esta, la madre también suele presentar una escisión parecida. Si uno de los padres escenifica el patrón del chivo expiatorio, el otro quedará atrapado en él y los patrones heredados de los padres pueden ser una de las razones principales por las que ellos estén juntos en primer lugar.
 
Con frecuencia, el padre que abusa de su hija abusa también de la esposa, o la madre inconscientemente colabora en el abuso «haciendo la vista gorda» y, por tanto, descargando su propia rabia de chivo expiatorio sobre la hija respecto de la cual siente envidia.
 
Podemos encontrar configuraciones como una conjunción Luna-Marte en cuadratura a Neptuno, con Quirón o Plutón en el MC. Los patrones complejos como éste no son nocivos en sí mismos; su verdadera complejidad, al analizarlos en términos del nivel general de inconsciencia humana, es que pueden perpetuarse si son escenificados de forma ciega y compulsiva en el contexto de los matrimonios y las familias.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 359
 
 
Cuando coexisten dos imágenes contradictorias del padre en la carta, hay que pensar que también coexisten dos imágenes contradictorias de la madre. ¿Cómo puede enfrentarse una mujer a un conflicto interno tan profundo como éste, a menos que sea una persona psicológicamente culta y haya realizado un montón de trabajo interno antes de ser madre? Lo más probable es que ella no pueda enfrentarlo y acabe formando parte de la representación del complejo del chivo expiatorio dentro del matrimonio de los padres. A veces la madre puede ser incluso la abusadora, emocional o incluso sexual, al mismo tiempo que la víctima.
 
Al final, la persona cuya carta presenta conflictos entre los significadores de los padres puede inicialmente alinearse con un lado u otro de la polaridad, porque la escisión reside tanto dentro del individuo como de sus padres. La víctima de abusos que a su vez se convierte en abusador está expresando el mismo y violento conflicto interno que los padres en su momento; y el patrón del chivo expiatorio se transmite así a la generación siguiente. Estos modelos, que aparentemente integran a opuestos irreconciliables, son heredados, y los compartimos con nuestros padres. Entonces podemos convertirnos en el chivo expiatorio de la familia, no sólo en el sentido de haber sufrido abusos por parte de uno de los padres, sino también como parte de la redención familiar. Incluso si no nos damos cuenta, somos el pharmakos, el agente sanador que enfrenta el enorme reto de sanar esas escisiones ancestrales a través de nuestro propio trabajo interior.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 359
 
 
En los primeros años de vida uno puede ser víctima de la herencia ancestral. Uno de los lados de la dicotomía puede ser reconocido y el otro suprimido, proyectado o experimentado desde el exterior. Es posible que uno, incluso, vaya y venga de uno a otro e interprete durante un tiempo a uno de los personajes del complejo y luego al otro. En relaciones más adultas podemos interpretar el papel de Neptuno mientras nuestra pareja interpreta el de Marte, Quirón o Saturno; o a la inversa. Los contactos por sinastría entre las dos cartas implicarán normalmente la activación de los significadores parentales en ambas cartas. Después de un tiempo es posible reconocer que todos los personajes de la obra están dentro de nosotros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 360
 
 
En nuestra vida existen áreas en que el complejo del chivo expiatorio asegura que podamos echar la culpa a cualquier factor externo precisamente por haber creado situaciones en que nos garantizamos la persecución.
 
A veces, los astrólogos, caemos en ese patrón. Históricamente ser astrólogo no ha sido aceptado por el colectivo y, como profesión, ha sufrido persecución por parte de las autoridades. Primero fue la Iglesia católica quien los persiguió; pero ahora es la comunidad científica la que ha tomado el relevo. No todos los astrólogos se identifican con este papel histórico de chivo expiatorio y de proscrito; pero muchos sí y, en la medida en que portamos un modelo personal del chivo expiatorio, nos encanta ser perseguidos por la autoridad. Nos proporciona un sentimiento de identidad. Seríamos muy desgraciados si nos volviésemos respetables. Intentamos demostrar nuestra legitimidad ante gente que siempre ha sido y será incapaz de reconocer el valor de lo que hacemos. Suplicamos que nos partan la cara y luego ponemos la otra mejilla: «¡Pégame otra vez!». Nos ponemos a discutir con los escépticos en una fiesta, cuando cualquier tonto se daría cuenta de que esas personas no quieren aprender nada de valor. Sólo quieren a alguien en quien descargar su agresividad, debido a que cargan con el complejo de chivo expiatorio y han elegido el papel del perseguidor.
 
De la misma manera, si nos identificamos con el arquetipo del chivo expiatorio, escogeremos amigos y socios que nos persigan o nos uniremos a grupos que sabemos positivamente que nos van a poner en la picota. Perseguimos activamente la infelicidad cuando el patrón domina nuestra vida interior. Hay muchas áreas en las que nosotros mismos somos responsables de nuestro sufrimiento, porque nuestro perseguidor interno e inconsciente necesita un gancho del cual colgarse como proyección. Si estamos repitiendo un patrón de persecución, será buena idea preguntarse: «¿Por qué me he colocado yo mismo en esta situación? ¿Existen otras opciones?». Suplicar ser aceptado por el perseguidor es uno de los aspectos más compulsivos de este patrón. Creemos que si tan sólo nos aceptara la persona o grupo que nos rechaza podríamos liberarnos de vergüenza y pecado.
 
Pero eso nunca funciona. Y no lo hace porque la única manera de ganarnos el amor del perseguidor es enfrentarse al perseguidor dentro de nosotros. Si empezamos por ahí, quizá nos demos cuenta de que los perseguidores externos dejan de aparecer en nuestra vida con la misma frecuencia.
 
Cuando se reproduce un patrón de victimización es urgente fijarse en las cuestiones internas. Éste es especialmente el caso cuando estamos atrapados en generalizaciones mentales relativas a los demás, como creencias del tipo de «todos los hombres son abusones» o «todas las mujeres son víctimas». Uno puede, además, haber topado con una serie de parejas abusivas, pero es seguro que interviene un elemento de elección inconsciente; y lo que uno quiere es encontrar personas que le den la razón y que de paso refuercen el patrón. Como dijo Ian Fleming: «Una vez es casualidad; dos, coincidencia; tres, acción del enemigo». Y el enemigo vive dentro.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 362
 
 
Los aspectos Sol-Quirón, Sol-Saturno, Luna-Plutón y Luna-Neptuno son significadores parentales relevantes para el tema de la persecución, al igual que determinados planetas en las casas IV y X. Un Marte conectado con esos significadores puede a veces reflejar manifestaciones de violencia y abusos, físicos o emocionales en el entorno familiar.
 
Otros factores en la carta natal pueden exacerbar estos conflictos familiares indicando una predisposición a huir de ellos mediante la sublimación espiritual.
 
Júpiter o Neptuno en la IX o en la XII, al igual que los aspectos Sol-Neptuno y Sol-Júpiter son característicos de un anhelo de «trascender» el sufrimiento y el conflicto heredados. Este tipo de emplazamientos reflejan un genuino sentimiento religioso y necesitan ser expresados. Pero a menudo el reino de lo espiritual es utilizado como una vía de escape prematuro frente a la oscuridad del patrón ancestral del chivo expiatorio. Ése es justamente el caso de personas que son arrastradas al mundo esotérico con la esperanza de poder esquivar la pesada tarea de luchar para liberar a la familia del patrón ancestral.
 
Uno de los grandes peligros de esta clase de huida es que uno puede acabar siendo acosado por un gurú o una comunidad espiritual tiránicos. Determinados grupos espirituales hacen la vida virtualmente imposible a cualquier miembro que se atreve a abandonar el grupo y los miembros de algunas comunidades religiosas, como las formadas por David Koresh o Jim Jones, quedan tan atrapadas en el patrón arquetípico del chivo expiatorio que acaban sacrificando sus vidas debido al enorme poder del arquetipo enarbolado por el líder. Estas comunidades, a diferencia de las víctimas del Holocausto o del genocidio de Milošević , están formadas por individuos que han tomado conscientemente la decisión de someterse a un líder espiritual que interpreta el papel del perseguidor. Encontraremos aquí el patrón de la persecución familiar en cartas individuales, reproducida ahora en el mundo exterior a través de la dinámica del grupo. Es saludable recordar aquí a Charles Manson, que mostró uno de los más peligrosos lados de esa compulsión repetitiva denominando a su grupo «La Familia».
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 364
 
 
Allí donde domina el complejo del chivo expiatorio uno interpreta todas las situaciones en relación a su propia «maldad», incluso si los perseguidores puedan ser percibidos como objetivamente malos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 367
 
 
La Luna en cuadratura a Plutón puede reflejar a veces un sentimiento de que los enemigos están por todas partes. Uno siempre se siente siempre amenazado. El sentimiento puede volverse intenso en algunos momentos.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 367
 
 
Un padre representado en la carta por Urano es percibido generalmente como extremadamente crítico y puede esperar logros de tipo intelectual en sus hijos. A menudo combina el mensaje de que las necesidades instintivas y emocionales ordinarias, de alguna manera, son «malas». Hay que recordar que en el mito Ouranos encontró repelentes a sus hijos y los devolvió al útero del inframundo.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 368
 
 
La cuadratura Sol-Saturno, sugiere un juez interno bastante duro. Se puede percibir la vida como un examen perpetuo y cualquier error, por pequeño que sea, constituye un fracaso total.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 357
 
 
La cuadratura Luna-Plutón indica una profunda infelicidad en la madre. Ésta debió estar muy deprimida en los primeros meses de vida de su hijo-a, pues es un aspecto aplicativo que se hizo exacto por progresión cuando el hijo tiene nueve. La sensación que tiene o tuvo el hijo/a de vivir con un progenitor deprimido puede ser muy amenazadora para un niño pequeño; y a veces todo parece estar rodeado de oscuridad y muerte. Aunque por lo general es profundamente inconsciente, la madre manda el mensaje de que tú debes redimir su sufrimiento. Tú debes hacer que su vida sea nuevamente digna de ser vivida, y si fallas es que eres una inútil. Pueden existir también cuestiones relativas a un resentimiento inconsciente y celos de la madre dirigidos a una niña que tiene toda su vida por delante. Cuando ocurre esto, aunque es inconsciente, no es mutuamente exclusivo respecto del amor.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 369
 
 
La conjunción Sol-Quirón en el MC sugiere que la madre fue una mujer fuerte y creativa, pero que la vida la hirió y no pudo cumplir sus sueños y desarrollar todo su potencial. Quizá estaba demasiado dominada por lo que «ellos» podrían pensar; y así, vivió su vida intentando contentar las expectativas de otros.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 369
 
 
Una madre convertida en víctima tarda poco en convertir en víctima a su propia hija.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 369
 
 
El Sol en el MC sugiere un vínculo muy fuerte con la madre. A veces lleva mucho tiempo a la persona definir sus propios valores porque la identificación con la madre es tal que no puede tomar distancia.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 370
 
 
El Sol en Capricornio tiene una profunda necesidad de ser útil.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 370
 
 
Los Capricornio tienden a ser de floración tardía.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 371
 
 
Allí donde exista el chivo expiatorio interno, no andará lejos tampoco el perseguidor interno, aunque la persecución proveniente del exterior sea real. Si te pones al servicio de los demás sin ningún tipo de conciencia respecto de tu patrón interno del chivo expiatorio, puedes acabar perpetuando el patrón en una forma distinta. La identificación con el arquetipo no es creativa, sino un medio de huir del trabajo duro y de la responsabilidad de recuperar el control sobre uno mismo, así como de canalizar el arquetipo mediante valores y opciones individuales. Si vosotros únicamente dejáis de ser la víctima de vuestros padres para convertiros en salvadores de otras víctimas, finalmente os sentiréis víctimas de esas otras víctimas a las que tratáis de ayudar y acabaréis exhaustos y explotados. Es un problema bastante común en las profesiones de ayuda, pero es un problema que no desaparecerá si no somos conscientes de él. Es muy importante localizar dónde reside la ira y hacia quién. Tiende a flotar mucha porquería allí donde se ubica la víctima indefensa, particularmente ira, vergüenza, culpa, y deseo de venganza. Mucha gente se convierte en profesional de la ayuda, pero no porque sepan realmente con qué material trabajan sino porque es una forma de intentar recuperar un sentido del propio valor. Lo cual también huele mucho a lo que Freud llamaba «compulsión repetitiva»: una constante recreación de la herida original con la esperanza de que, de alguna manera mágica, se resuelva por sí misma.
 
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 371
 
 
Es muy natural sentir empatía hacia aquellos que han pasado por el mismo sufrimiento que nosotros, y ciertamente no sugeriría que es una «mala» elección. Pero voy a repetiros lo que he dicho como respuesta a la anterior pregunta: si os ponéis al servicio de los demás sin conciencia ninguna del patrón interior del chivo expiatorio, podéis acabar perpetuándolo de una forma distinta. A veces la senda del profesional de la ayuda puede ser lo contrario de lo que necesita realmente la persona. Un sentimiento de autoestima es esencial para trabajar con el patrón de forma creativa; y si intentamos encontrar nuestro sentimiento de autoestima dedicando nuestra vida a ayudar a los demás, puede ser una compensación más que una verdadera vocación para la que uno está hecho por temperamento. Si es una verdadera vocación, por supuesto que es lo correcto, aunque sea necesario aún tener cierta conciencia del patrón en orden a evitar la inflación y la victimización. Pero si uno tiene al Sol en la casa V y montones de planetas en signos de Fuego y existe una profunda pero inexpresada necesidad de ser creativo por uno mismo, aceptar el rol de sanador con demasiada rapidez al efecto de sanar el propio sentimiento de inutilidad puede cortocircuitar la oportunidad de sentir que uno tiene algo especial e importante que ofrecer.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 372
 
 
Tomar la decisión de convertirse en profesional de la ayuda puede ser, a veces, una decisión equivocada. Depende de muchos factores. He tenido muchos clientes que me han dicho: «Yo quiero de verdad ayudar a la gente». No tengo duda de que la mayor parte de las veces, si no todas, esa afirmación nace de una compasión básica. Pero otras veces puede provenir del hecho de que han sido perseguidos y convertidos en víctimas durante mucho tiempo y no han tenido oportunidad de ser el centro de su propio universo. No saben realmente qué es lo más adecuado que ellos pueden hacer. Han dejado de ser redentores del complejo de chivo expiatorio de sus padres para convertirse en redentores del complejo de otras personas, sin aprender jamás a ser egoístas, a cuidarse por sí mismos y a mirar por sus intereses. Es muy generoso que ofrezcamos nuestra luz solar a los demás; pero el Sol debe brillar primero para sí antes de poder hacerlo auténticamente para los demás. No se sana el patrón del chivo expiatorio simplemente poniéndose a ayudar a la gente; puede resultar incluso exacerbado.
 
Todos necesitamos sentir que nuestra vida tiene algún valor, ya sea que literalmente ayudemos a otras personas o contribuyendo a la vida de otras, pero igualmente válidas formas. Pero si usamos a la gente como medio de afirmarnos nosotros, lo que estamos haciendo en realidad es explotar a la gente a la que afirmamos estar ayudando. Estamos usándolos para llenar nuestro propio espacio vacío. Es una buena idea tener cuidado con eso. No creo que exista una fórmula mágica. A veces es lo correcto, pero muchas otras veces no lo es. Puede ser como saltar de la sartén para caer en las brasas, bien que por compasión. Sólo cuando sentimos que nuestra vida tiene valor, que no somos meramente un recipiente para los pecados del colectivo, que no somos criaturas pecaminosas que deben merecer el aire que respiran sacrificando su vida a los demás, sólo entonces el ayudar a los demás es una verdadera consagración. Yo tendría mucho cuidado de aconsejar a alguien con un patrón de chivo expiatorio en su carta que siguiera la senda del servicio a los demás; querría ver la carta en su totalidad. Y si veo que Marte es fuerte, podría llegar a la conclusión de que para la persona puede no ser apropiado, al menos durante un tiempo, dejar de ser víctima neptuniana para convertirse en un redentor neptuniano cuando esa persona no ha aprendido a expresar su Marte. Probablemente mucha gente que quiere ejercer profesiones de ayuda no debería hacerlo, al igual que mucha gente que está verdaderamente dotada para ello nunca pudo imaginar que eso pudiera ser posible.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 373
 
 
 
Los perseguidores existen de verdad en el mundo, así como sus víctimas, y con frecuencia también personas que personalmente no viven el patrón del chivo expiatorio, pero que se ven atrapados en una erupción colectiva en la que ellos no pueden hacer nada. Jung sugirió que el único antídoto contra estas erupciones y episodios de persecución es aligerar la carga del propio complejo esforzándose constantemente para lograr una mayor conciencia. Cuantos más individuos sean capaces de hacer esto, menos gente habrá para participar en la degeneración hacia la brutalidad de la masa que hemos visto tantas veces en la accidentada historia de la humanidad. No podremos eliminar el patrón del chivo expiatorio porque es arquetípico y no tiene fin. Y volverá a aparecer cada vez que el colectivo se vea atrapado en una escisión. Escisiones como ésas son evitables si nos mantenemos en una línea de crecimiento y cambio. Pero sea lo que sea lo que hagamos en términos de trabajo interior individual, eso finalmente hará que marquemos la diferencia.
 
Greene Liz
El lado oscuro del alma, página 374
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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