Abandonada

"Abandonada a su dolor
un día en que la sombra
la envolvió en su velo
me dijo el corazón
que ya vendría
en el milagro espiritual
de un vuelo.

Abrí los pabellones solitarios,
iluminé los vastos corredores,
quemé la mirra de los incensarios
y el frío mármol alfombré de flores.

Llego cansado de volar, yo dije,
a mujer, inspiradora
rige mi vida entera para siempre
y arde como la mirra el corazón que inmolo.

Amor no llegues demasiado tarde
a quien se siente demasiado solo."

José Agustín Acosta y Bello





"Alma, mujer, inspiradora: rige mi vida entera para siempre."


José Agustín Acosta y Bello





"Amo todo lo verde porque trae hasta mi corazón y mi memoria el recuerdo inefable de tus ojos..."


José Agustín Acosta y Bello





"Amor no llega demasiado tarde a quien se siente demasiado solo."


José Agustín Acosta y Bello



"Aquí la paz me saluda junto a la verde campiña, y mi corazón se aniña, se enternece y se desnuda."


José Agustín Acosta y Bello


"Cada vez que hago bien, oh corazón, me invade una dulzura fresca, cuya virtud comprendo; veo dulces sonrisas en bocas que no existen, y manos invisibles que me están aplaudiendo."


José Agustín Acosta y Bello



"¡Cómo lucha mi amor por asirte! Más si es duro tener que alejarte, ¡mis palabras no deben herirte si mis besos no pueden curarte!"


José Agustín Acosta y Bello





"Cuando agitas tu cendal, sueño eterno de Martí, tal emoción siento en mí, ¡que indago al celeste velo si en ti se prolonga el cielo o el cielo surge de ti!"


José Agustín Acosta y Bello



"Inmensa necesidad de ser envuelto en ondas de músicas que digan el secreto que callan las palabras, las sinuosas palabras ¡oh serpientes, oh caminos!"


José Agustín Acosta y Bello



"Mariposa: qué triste me quedo sin tu luz que mi amor ilumina, te me vas... Te me vas... Y no puedo retener tu silueta divina."


José Agustín Acosta y Bello



"Mi ideal bien poco pide: ser música de mí, música sorda. Ex libris del ensueño: un árbol verde y una paloma."


José Agustín Acosta y Bello






"Nada diré que sea mentira; iré sobre la claridad, como una espiga al viento, hacia la eternidad."


José Agustín Acosta y Bello



"¡Sol, oh sol, oh sol mío! Necesito tu cálida vibración. Tengo enferma la luz de la palabra; de mí sale brumosa, y yo la quiero diáfana."


José Agustín Acosta y Bello





"Soy agradecido. Las suaves almohadas no me han dado sino plácidos sueños, enervantes apreciaciones de la vida. Hacía falta a mi voluntad tu agria dureza."


José Agustín Acosta y Bello




"Soy en mí como es en sí la sombra: causa de luz y efecto de sí misma."


José Agustín Acosta y Bello




"Tengo el decir enfermo de una niebla lejana, oh Dios, y se me torna de humo la palabra. Yo la deseo límpida... Yo la ambiciono diáfana..."


José Agustín Acosta y Bello


"Tengo llena de verde la pupila: verde de campo, de tus ojos, verde de mar y de esperanza, en el que pinta rosas de amor tu hermana primavera..."


José Agustín Acosta y Bello




"Tienes algo de Londres, pero mucho de Francia: una suma realeza y una noble elegancia palpitan en la seda de tu vestido gris."


José Agustín Acosta y Bello




"¿Y mi grito de ayer? Le puse al piano una sordina espiritual, y ahora sólo sabe quejarse con sonrisas que desdeñan la gloria."


José Agustín Acosta y Bello




"Yo dije: Alma, mujer inspiradora: rige mi vida entera para siempre. Arde como la mirra el corazón que inmolo..."


José Agustín Acosta y Bello




"Yo te contemplo, absorto, y en mi entusiasmo creo que eres una duquesa que sale de paseo hacia las pintorescas afueras de París."


José Agustín Acosta y Bello