Al principio, al final
Al principio las pendientes son visibles,
los picos están más altos que nunca.
Hasta que al final los picos
están más abajo.
Los valles se hacen profundos.
Es una ola
que crece y retrocede.
Oscureciéndose después
hacia las laderas,
agrietándose en lo cóncavo,
¿qué se puede hacer
salvo quedarse con los ojos abiertos y amar
la ola? La ola que nos dio
enormes alegrías
nunca igualadas,
y que nos va a dar,
hasta que rompa,
oh ¿qué
sorpresas, libertades, abismos?
¡Sentir, sentir!
Ser el instrumento
y la herida de la emoción.
Estar abierto a la emoción
en el pecho que explota, la ola. 
May Swenson
Versión de Tom Maver
Un deseo
De una hora construí una cabaña
     y me senté como un hindú
        inmune en el viento del tiempo
De un cabello hice una senda
    y caminé y ambos
        roca y desierto se volvieron
mi espacio y mi camino
   Con el dolor por piel
      no sentí heridas
Un agradable poder maduró
    como una nuez y se abrió dentro de mí
        Allí donde antes hubo ira
se distendió el mundo entero
     hacia el mediodía tranquilo
       Mi rostro en la roca mi nombre
en el árbol más silvestre
    Mi carne el brezal
       de un clima pacífico
Anna Thilda May "May" Swenson
Versión de Rosa Lentini y Susan Schreibman
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