Ricardo de Turia

Epitafio a un gran músico

   No pases sin dolor, oh Peregrino,
si ofendida virtud te ha de hacer duelo,
pues yace muerto el que juntó en el suelo
el corzo al tigre, al lobo el Vellocino.

   Un día (ved si el canto era divino)
tantas piedras atrajo (sin recelo
que vino se enterraba) que del cielo
a lamentarse en su destreza vino.

   Agora, por poder salir, ¿quién duda
que cantará también? pues no está muerto;
mas en vano tu canto al aire ofreces,

   ¡oh triste! pues quien te oye es piedra muda
para decir que aun vives, y así es cierto
que la sobrada gracia ofende a veces.

Ricardo de Turia



Soneto

   Si Labán a Jacob no le da Lía
por premio y galardón de los siete años,
nunca Jacob llorando desengaños
vuelve a servir tan fiel como solía.

   Y no sirviendo más, ¿cómo podía
trocar en tanto bien tantos engaños?
Luego Labán por medios aunque extraños
a fin de dalle más, más le pedía.

   Si esto es así, Jacob, no formes queja
de tu suegro, que a más pena te obliga
para obligarse a darte mayor gloria.

   Fórmela el que sin premio está, y se queja
del rigor de su estrella, en tu fatiga,
y del de su fatiga, en tu memoria.

Ricardo de Turia










No hay comentarios: