Kyung-sook Shin

"Hace unos años, tu mamá dijo: «No tenemos que celebrar mi cumpleaños por separado». El cumpleaños de papá es un mes antes que el de mamá. Tú y tus hermanos siempre iban a casa de tus padres en Chongup para los cumpleaños y otras celebraciones. En total, éramos veintidós personas en la familia cercana. A mamá le encantaba que todos sus hijos y nietos se reunieran y se movieran por la casa. Unos días antes de que todos vinieran, preparaba kimchi fresco, iba al mercado a comprar carne y se abastecía de pasta y cepillos de dientes. Prensaba aceite de sésamo y tostaba y molía semillas de sésamo y perilla, para poder regalarles a sus hijos un frasco de cada uno al salir. Mientras esperaba a la familia, tu mamá se veía visiblemente animada; sus palabras y gestos revelaban su orgullo al hablar con vecinos o conocidos. En el cobertizo, mamá guardaba botellas de vidrio de todos los tamaños llenas de jugo de ciruela o fresa silvestre, que preparaba según la temporada. Los frascos de mamá estaban llenos hasta el borde de pequeños peces fermentados parecidos a corvinas, pasta de anchoas o almejas fermentadas que planeaba enviar a la familia en la ciudad. Cuando escuchó que la cebolla era buena para la salud, preparó jugo de cebolla, y antes de que llegara el invierno, hizo jugo de calabaza con regaliz. La casa de tu mamá era como una fábrica; preparaba salsas, pasta de frijoles fermentados y arroz descascarillado, produciendo para la familia durante todo el año. Con el tiempo, los viajes de los niños a Chongup se hicieron menos frecuentes, y mamá y papá empezaron a venir a Seúl con más frecuencia. Y entonces empezaste a celebrar cada uno de sus cumpleaños saliendo a cenar. Eso era más fácil. Entonces mamá incluso sugirió: «Celebremos mi cumpleaños el día de tu padre». Dijo que sería una carga celebrar sus cumpleaños por separado, ya que ambos son durante el caluroso verano, cuando también hay dos ritos ancestrales con solo dos días de diferencia. Al principio, la familia se negó a hacerlo, incluso cuando mamá insistía, y si se resistía a venir a la ciudad, algunos de ustedes iban a casa a celebrar con ella. Luego, todos empezaron a darle a mamá su regalo de cumpleaños el mismo día que papá. Con el tiempo, discretamente, se pasó por alto el cumpleaños real de mamá. Mamá, a quien le gustaba comprar calcetines para todos en la familia, tenía en su cómoda una creciente colección de calcetines que sus hijos nunca se llevaban."

Kyung-sook Shin

Por favor, cuida de mamá